Un plato de ramen.

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— ¡Ah, pero si son Naruto y Sasuke! —saludó Shikamaru, al lado de Temari y Choji. — ¿Cómo han estado?

—Kakashi-sensei volvió a escaparse de invitarnos comida. —murmuró Sakura, llegando al lado de Naruto. Sasuke en cambió miró los puestos de comida, esperando encontrar algo que le atrajera la atención, pero a decir verdad, sí se le había antojado el ramen, solo que no quería estar de acuerdo con Naruto.

Al mirar la burla que le estaban dando a Shikamaru por la chica de la arena, se sintió contento de estar de nuevo con esos dos que no parecían haber cambiado en nada. Sin embargo, cuando escuchó que Gaara se volvió Kazekage de la aldea de la arena, igual que a Naruto, algo picó su orgullo.

Se despidieron de ellos para seguir avanzando, si bien Sasuke se había dado cuenta que atraía las miradas de varias personas, comenzaba a ser mucho más evidente y le molestaba. Sobre todo porque Sakura y Naruto habían puesto esa sonrisa pícara, dirigida a él.

—Sasuke hasta los viejos te están mirando. —sonrió Naruto, picándole el codo.

—Es demasiado popular, estoy segura que de noche lee los libros Icha-Icha. —se burló Sakura, simulando susurrarle a Naruto al oído, pese a que lo decía con un tono bastante elevado para que los aldeanos escucharan.

Una ceja crispó en Sasuke, quién ya quería tomar la espada detrás de su cintura para practicar un par de movimientos con ellos. Y ahora esos dos estaban murmurándose cosas entre sí, dándole la espalda, pero mirándolo de vez en cuando para después burlarse y asentir con la cabeza.

Seguro que la quinta podría curarlos de la paliza que les daría.

— ¡Pero si son Naruto y Sasuke! —gritó Ino, corriendo a ellos con un ramo de girasoles.

Justo a tiempo pues Sakura y Naruto ya le estaban rogando piedad al Uchiha que los tenía tomados de la ropa, con una mirada gélida en su rostro.

—Cuanto tiempo sin verlos. —sonrió ella, dándole un manotazo a la palma de Sasuke, para que soltara a Sakura, sin borrar la sonrisa en su rostro. Naruto solo soltó un quedo, ¿y yo qué? — ¿Cuándo regresaron?

—Ayer por la mañana. —respondió Naruto, sobándose la cabeza del chichón que seguro se le formaría pronto. —Pero tan pronto llegamos, la vieja bruja nos acaparó.

—Sí, algo así escuché de Lee.

—Por cierto, no hemos visto a los demás. —comentó Naruto, recordándolos. — ¿Están en alguna misión?

—No que yo sepa. —y se encogió de hombros. —Tengo que ir a dejar este encargo, pero seguro van a Ichiraku Ramen, ¿cierto?

Los tres asintieron con la cabeza.

—Los veré allá, llevaré a todos los que me encuentre de los antiguos novatos. —sonrió, despidiéndose con la mano.

—Si ves a Lee, asegúrate de invitarlo. —pidió Sakura, despidiéndose de ella.

—Oye... Sakura. —llamó Naruto, mirándola con el ceño fruncido y los brazos cruzados. — ¿No crees que has estado muy pegada al cejotas?

Sasuke también puso atención, era algo de lo que ya se había percatado.

—Sí, bueno..., —Sakura mordió sus labios. —Lee es muy bueno conmigo, además me ha hecho mucha compañía.

— ¿AHHH? ¡No me digas que te gusta ese cejotas! —reclamó Naruto, zarandeando a la chica. Una vena creció en la frente de su mejor amiga, soportó unos segundos más del movimiento brusco y terminó por estrellar su puño en Naruto, lazándolo varios metros lejos.

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