Maldades que se entrecruzan

Actualizar la estrategia

-Maldita sea...

La cola rosácea del emperador ondeaba con enojo mientras él repiqueteaba el apoyabrazos de su trono con las uñas. Estaba de muy mal humor. Absolutamente ninguna de las bases que tenían su emplazamiento en los planetas que le habían arrebatado estaban operativas. ¡Ni una! Así era imposible conseguir información sobre lo que había ocurrido, pues ya no podía contactar con ninguno de los subordinados que tenía en dichos lugares. Necesitaría enviar a alguien a investigar si quería saber sobre el asunto... Pero Bonyu, que era a quien más solía encomendar ese tipo de tareas, ya estaba en una misión similar. Podría mandar a Ginyu como planeó en un principio para el caso que finalmente le dió a la peliblanca... Se llevó una mano al rostro, sintiendo desesperación. Prefería evitar mandar al capitán a una misión como esa. No era el tipo de persona que pasa desapercibido...
Miró ligeramente a su derecha, encontrando la mirada inquisitiva de Berryblue. Trató de respirar hondo y calmar la ira que fluía libremente por su cuerpo. Debía hacer lo posible por seguir sus consejos y evitar actuar de forma impulsiva. Aunque ella le había dado ese consejo para el problema que tenía con Frost... Frost.
-No, no puede ser -pensó cerrando los ojos -. Se marchó con Cooler. Y si hubiera atacado esas bases seguramente sería para que las tuviese él... Por lo que seguirían formando parte de nuestro Imperio y podríamos contactar con ellas.

Observó la copa que reposaba en su mano izquierda y miró atentamente su contenido rojizo, dejando su mente vagar por las posibilidades que se le ocurrían. Y al final llegaba siempre a la misma.
-Todo esto es parte de su plan, seguro. Ya lo ha comenzado... -sus iris adquirieron un brillo peligroso al tener en mente a alguien en concreto. Alguien cuyo color de ojos era completamente opuesto al suyo -. Seguramente ya ha movilizado a todos los rebeldes que ha podido... Y deben de ser muchos, a juzgar por los inconvenientes que me acaba de causar.

Aquello solo consiguió que su malestar aumentara más aún. Ese era un frente abierto que tenía que solucionar cuanto antes. Esos malditos rebeldes... La afluencia de los nuevos reclutas no serviría de nada si seguía perdiendo territorio. Echó un largo trago a su bebida y dirigió su vista a las estrellas que se veían por el ventanal.
-El problema es que lo último de lo que ha informado Bonyu es muy distinto a esto. Decía que aún está reuniendo gente... -su agarre se hizo más fuerte sobre el cristal de la copa, resquebrajándolo levemente -. ¿Y si sabe que ella está ahí? Si la información que hemos recibido era parte de su plan... Y la revuelta comenzó mientras nos hacía creer que aún no están listos.

Su mano terminó por romper completamente el cristal, haciendo que el poco vino que quedaba se derramase en su mano y el suelo.
-¡Necesitamos actuar inmediatamente y neutralizar la revuelta! -gritó con furia a sus generales, que se encogieron cuando vieron al emperador dirigirse a ellos - ¡¿Aún no habéis encontrado la forma de detenerlo?!
-Señor Freezer... Ante la falta de información no podemos elaborar ninguna estrategia...
-¡Eso no es excusa!
La cola del changlong azotó el suelo, consiguiendo que Shisami y Tagoma sintieran un desagradable escalofrío recorrerles.
-¡Estoy completamente seguro que a pesar de ese contratiempo vuestros predecesores ya habrían elaborado más de un plan de ataque!

Berryblue observaba la escena en silencio, preguntándose si Freezer era consciente de lo que estaba diciendo... Y de que él mismo era la razón por la que ahora estaban en esa desfavorable situación, con unos sustitutos a los que claramente les faltaban años de entrega para responder correctamente a las exigencias del tirano.
-Frost también lo habría hecho -murmuró en voz baja, pero con un tono que sabía que Freezer sería capaz de captar.
Pretender conseguir unos resultados concretos de las personas que no tenían suficiente experiencia en ese campo era un despropósito. Aún así... Era raro que Bonyu se hubiera dejado engañar y no les hubiera informado debidamente sobre el comienzo de la rebelión. Aquello hacía aguas por todas partes.