Dodoria caminaba hacia la enfermería de muy mal humor. La ira ardía en su pecho como un fuego con deseos de quemarlo todo a su paso, consiguiendo así que él sintiera unas ganas irrefrenables de destruir cualquier cosa que se interpusiera en su camino. O cualquier soldado, que fueron un par los que cayeron por cometer la imprudencia de cruzarse al general rosado.
-Permanecemos a su lado... ¡Morimos por él! ¡Y ASÍ NOS LO AGRADECE! -exclamó furioso arremetiendo con el brazo que no estaba herido contra la pared que tenía más cerca -Somos sus generales, sus guardaespaldas... -murmuró rechinando los dientes -Y aún así parece que no seamos más que unos simples soldados más.
Dodoria se apoyó de espaldas en la pared que había destrozado parcialmente y miró al techo con los ojos enturbiados y el corazón latiéndole de forma dolorosa. Siempre había sido fiel al imperio... ¡Y quería seguir siéndolo! Pero en esos momentos le resultaba terriblemente difícil ver el lado bueno de permanecer allí.
-Debería haberme marchado con Zarbon, así me habría librado de ésto -dirigió su mirada a su brazo izquierdo, del que seguía brotando sangre de forma lenta pero continuada, y apartó la vista al tiempo que volvía a poner su otra mano sobre la herida -. También habría evitado la incertidumbre de saber si estará bien él sólo...Con una gran angustia alojada en él, retomó el camino hacia las dependencias médicas. Esperando recuperar la movilidad de su brazo herido en poco más de un par de horas.
En la sala de mandos, Freezer daba las indicaciones necesarias para acercarse al primer planeta del que deberían hacerse cargo. Aún estaba con una actitud rabiosa por el asunto de la dimisión de su mano derecha y por el hecho de que su otro general no hubiera hecho nada por impedirlo.
-Ese par de traidores -masculló mirando fijamente a través del gran ventanal -. Debí haberlos dejado muertos. Pudriéndose en el Infierno.Frost, a pesar de estar un tanto retirado de él, escuchó aquello y no pudo evitar fruncir el ceño.
Se acercó al emperador despacio, poniéndose a su lado cuando llegó hasta él y le miró de soslayo.
-Creía que les tenías un mínimo aprecio. ¿Realmente piensas eso simplemente porque...?
-Me parece que no lo entiendes -le refutó Freezer cortándole a mitad de la frase, al tiempo que le miraba con una mueca en la cara -. Zarbon se ha marchado sin más explicación que una condenada carta en la que se pone sentimental dando razones estúpidas para justificar su partida. Y si no es suficiente con eso, súmale que Dodoria, probablemente la única persona que podría haberle detenido, no ha hecho absolutamente nada para evitarlo.
Frost analizaba lo que Freezer le iba contando, pero no hacía más que reafirmarse en que estaba terjiversando los hechos de un modo que no comprendía.
-Pero si has dicho que deberías haberlos dejado muertos... Realmente no los necesitas, ¿no? ¿Por qué te sienta tan mal? Si crees que te iría mejor sin ellos... Ésta es la oportunidad perfecta para deshacerte de ambos, de modo que no tiene sentido que te moleste. Sin embargo... Si te sienta tan mal, quizás sea porque te importan de algún modo. Por eso te duele su traición... Y por eso mismo creo que deberías intentar que no quieran marcharse. Y lo que acabas de hacer...
Freezer apretaba los puños tratando de no responder de mala manera a Frost. Él no podría entender sus razones, de modo que no habría manera de hacerle ver su punto de vista en todo ese asunto.
-Olvídalo, Frost -dijo cortante antes de que el azulado pudiera seguir hablando -. No quiero seguir dándole vueltas a lo que han hecho, ya se me ocurrirá algo... Ahora centrémonos en lo que tenemos pendiente.
El pirata se quedó cabizbajo, pensando en qué sería lo que había molestado tanto al emperador y decidiendo preguntar más tarde a Berryblue.Los minutos pasaron en silencio, con el único sonido del producido por las consolas de mandos.
Frost sentía una gran tensión en el ambiente, resultando obvio que Freezer no estaba pensando precisamente en la tarea que tenían entre manos, sino que seguía con la mente en el asunto de sus hombres.
-Ésto no va bien -los pensamientos del azulado se revolvían inquietos por lo que podría desencadenar el mal humor del emperador -. Quizás si consigo distraerle...
Mordiéndose el labio con nerviosismo por no saber si daría buen resultado lo que iba a hacer, Frost avanzó ligeramente hacia su derecha hasta que quedó lo bastante cerca del tirano como para alcanzar su piel con la mano.
Con el corazón latiéndole demasiado deprisa para su gusto, el pirata acercó su mano derecha hasta la pierna de Freezer que tenía a su alcance. Frost deseó no empeorar aún más el enrarecido ambiente y finalmente alcanzó con el dorso de la mano la rosácea piel del emperador, la cual comenzó a acariciar de forma casi imperceptible con los dedos.
A pesar de la ligereza del roce entre los dos changlongs, el tirano se percató perfectamente de éste y miró con una expresión de fastidio a su compañero.
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Maldades que se entrecruzan
FanfictionDespués del Torneo del Poder todos los Universos fueron restaurados y los miembros del equipo del Universo 7 consiguieron sus deseos, siendo de este modo que Freezer fue resucitado. Tras esto, él retomó su papel como emperador y volvió a reunir a su...