Maldades que se entrecruzan

Noticias que dan qué pensar

Pasos rápidos y enfurecidos se podían escuchar resonando por los pasillos de la nave, provenientes del soldado de tez roja que buscaba lleno de ira al changlong azul para contarle lo que le había causado tal enfado. Así, cuando llegó a su destino no pudo sino mostrar su frustración nada más llegar.

-¡Nos ha salido el tiro por la culata!

Frost, que aún seguía en la sala de entrenamiento practicando lo que le había enseñado Bonyu, se sobresaltó al escuchar ese grito muy cerca de él, girándose hacia la voz y descubriendo los verdosos ojos de Jeice a la altura de los suyos.
-¿Qué quieres decir? -preguntó el azulado al no entender por qué le decía eso.
-Zarbon se largó por el vídeo que hicimos temiendo quedar mal ante todo el universo, ¿no?
-En realidad esa no es la ra... -intentó rectificarle Frost, pero siendo interrumpido por el peliblanco.
-¡Pues resulta que le ha dado la vuelta a la situación! ¡En lugar de esconderse se ha hecho famoso limpiando su nombre!
-Espera. ¿Qué?
Los ojos de Frost se abrieron mucho tras escuchar eso. ¿Limpiar su nombre? ¿Después de lo que había pasado? ¡¿Cómo se suponía que había hecho eso?!
-El muy canalla se las ha ingeniado para ganarse la simpatía de muchísima gente al tiempo que se ha asegurado de que no le vean como un loco desquiciado, sino como el hombre perfecto -siguió contándole Jeice apretando los puños de rabia -. ¡Ja! ¡Qué más le gustaría a él! Dista mucho de ganar ese título...
-Un momento. Para, para -Frost agitó las manos indicándole a Jeice que dejase de hablar -¿Qué es exactamente lo ha pasado? ¿Cómo ha hecho tal cosa?
Jeice se cruzó de brazos y frunció el ceño. Aquello le tocaba mucho la moral, que ese listillo estuviera ganándose la admiración de tantos a base de mentiras...
-Puedes verlo por ti mismo -dijo haciendo un ademán con la cabeza hacia fuera de la sala -. Te lo mostraré, sígueme.

Frost siguió a Jeice por unos cuantos minutos, hasta llegar donde estaba reunido el resto del equipo.
-¿Qué es lo que...? -comenzó a preguntar, callando en cuanto pusieron en sus manos la tablet holográfica que estaban observando hasta ese momento.
-Fíjate -gruñó el peliblanco señalando la pantalla -. Ahora resulta que es la cara de una marca de productos de cuidado capilar, el muy...
-Jeice...
El peliblanco calló, bajando la mirada ante la regañina implícita de su capitán.
-A nosotros no nos corresponde juzgarle, pero sí que debemos informar al señor Freezer de ésto -habló con seriedad Ginyu.
-Yo lo haré -intervino Frost con un tono monótono -. Si se enfada, sé que no arremeterá contra mí. De modo que soy el más indicado.
Los miembros de las Fuerzas Especiales asintieron de acuerdo con el changlong, que partió de inmediato hacia la sala de mandos con una mirada que fue del shock a la rabia y que hizo que los que se cruzaban en su camino se apartaran instintivamente, queriendo evitar la ira de su nuevo señor.

-Será posible... -masculló Frost de claro mal humor - Parece que se esté riendo en nuestra cara, escapando de forma que nos sea imposible rastrearle y después haciéndose famoso de esta forma...
Frost fue aminorando sus pasos fúricos hasta terminar deteniéndose con la mirada perdida.
-Se ha hecho famoso... ¿Puede ser... ?

Volviendo sobre sus pasos a gran velocidad, Frost alcanzó de nuevo a su compañero de fechorías y le agarró del brazo para llamar su atención.
-¿Qué ocurre? -preguntó confuso Jeice al ver que el azulado había llegado corriendo.
-¿Sabes...? ¿Sabes si todos éstos reclutas han llegado...?
-¿Por él? -terminó el peliblanco suponiendo lo que iba a decir el azulado -Sí. De hecho, nos hemos enterado de su éxito porque nos lo han contado ellos, alegando que quieren apoyar al imperio por él. ¡Es de locos!
Frost bajó la mirada, pensando detenidamente en ello para poco después alzarla a su amigo.
-Sí que es de locos, pero por una vez sus locuras resultan beneficiosas para nosotros.
Jeice asintió con mala cara, aceptando que eso era cierto por mucho que le molestase que Zarbon hubiese conseguido algo así. A pesar de todos los problemas que había dado, había logrado captar mucha gente en muy poco tiempo, y eso, en la situación de decadencia de la que estaban saliendo, era muy importante para el ejército.