Corbata lista, traje perfectamente listo y la clara convicción de que iba a convencer completamente a los que se reunirían con él en apenas una hora.
Echó un último vistazo a la cama a través del espejo en el que se miraba y esbozó una sonrisa confiada al ver el verdoso rostro en el que vislumbraban escamas de la persona con la que había compartido la noche.
Su propio reflejo le devolvió la sonrisa y pareció enturbiarse justo antes de que él emprendiera su camino fuera de la habitación.Aquel día hacía un tiempo ventoso que parecía querer despeinarle, pero eso no iba a pasar. Se había asegurado que todo saldría a la perfección, hasta el más mínimo detalle. Absolutamente nada ni nadie impediría su triunfo.
Caminó tranquilamente hasta el lugar que habían acordado para el encuentro, deteniéndose en una cafetería para hacerse con leve desayuno y siguiendo su ruta a paso lento. No había necesidad de apresurarse, por muchas ganas que tuviera de lograr sus objetivos, la calma era esencial. Ya tendría tiempo de dejar salir su ansia cuando tuviera la oportunidad de ponerle las manos encima a...Miró de repente a su espalda. Le había parecido... Le había parecido que alguien le observaba. Escaneó la grisácea calle con sus fríos ojos ante cualquier indicio de posibles problemas, pero lo único que alcanzó a ver fue un pájaro de plumas negras que le observaba desde una señal de tráfico.
-Ningún pajarraco va a ser un mal augurio hoy -dijo, devolviéndole una fiera mirada al animal.Freezer se encontraba en su cuarto de aseo personal, dándose un supuesto baño relajante. Y es que por su cabeza pasaban mil pensamientos que iban de Frost a su hermano, pasando por los dos generales en paradero desconocido y por ese maldito traidor.
Suspiró profundamente hundiéndose un poco más en el agua que llenaba el jacuzzi. Necesitaba arreglar aquel entuerto en el que se había metido él solito.
-Lo primero que debería hacer sería volver a ganarme la confianza de Frost -murmuró para sí -. Pero ahora mismo probablemente será más prudente acabar con Bett.
Ondeó su cola debajo del agua al pensar en ello, sintiendo una ira creciente en su interior cuanto más pensaba en el asunto.
-Sí... Alguien que averigüe su ubicación es lo único que necesito, del resto puedo encargarme yo solo perfectamente -dijo con los ojos echando chispas rojas llenas de amenaza por sus ojos.Al rato, habiendo salido ya del baño, Freezer agarró su scouter y se sentó en su cama pensando en quién podría mandar a aquella misión. Y casi al momento, el rostro de probablemente su mejor soldado apareció en su mente. Sí, seguramente sería la mejor opción.
Contactó con su frecuencia y esperó con un tanto de impaciencia hasta que escuchó su voz por el auricular del aparato.
-¿Señor Freezer? ¿Qué desea?
-Voy a encomendarte una tarea muy importante, Ginyu. Presta atención.En la sala de entrenamiento destinada a las Fuerzas Especiales, se había formado el más absoluto silencio mientras todos ellos trataban de escuchar las indicaciones del emperador.
Ginyu escuchaba atentamente sus palabras, acordando reunirse con él personalmente en unos minutos para, según había dicho, comentarle un detalle al respecto.
-Seguid entrenando, volveré en un rato -dijo con expresión seria a su equipo.
Salió de allí pensando en lo que le había dicho su señor y pensando al mismo tiempo en que había mantenido una conversación parecida con Frost hacía no tanto.
-Pero será mejor que tomemos cartas en el asunto nosotros mismos, no me fío de que Kiwi sea capaz de conseguir la información que precisamos por muchos contactos que tenga.Sin embargo, en lugar de dirigirse directamente al encuentro del emperador, Ginyu se desvió hacia la cafetería. Entrando allí vió a la persona que buscaba y se acercó a ella decidido. La relación entre ellos se había vuelto más tensa por todo el asunto de Salza, pero él estaba convencido de su profesionalidad para aquel momento, dejando a un lado las rencillas que hubiese.
-Bonyu.
La guerrera levantó la vista del café que estaba terminando y frunció el ceño.
-¿Qué ocurre? -preguntó con resentimiento.
-Tengo que ir a hablar con el señor Freezer por una misión y creo que es buena idea que vengas.
Ella le miró con cierta curiosidad y asintió, levantándose de inmediato y partiendo juntos hacia el lugar donde estaba el changlong.
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Maldades que se entrecruzan
FanfictionDespués del Torneo del Poder todos los Universos fueron restaurados y los miembros del equipo del Universo 7 consiguieron sus deseos, siendo de este modo que Freezer fue resucitado. Tras esto, él retomó su papel como emperador y volvió a reunir a su...