Literatura según Kai

T3E03: Bienvenida, Parte 1

Era ya la tercera semana de clases: conforme los días pasaban y el primer parcial se avecinaba, dos o tres alumnos que casi no se aparecían en clases dejaron de venir casi de un momento a otro.

Mientras tanto, el escondite secreto de Kai y sus amigas ya estaba casi completamente limpio: tras un día o dos de reubicar libros viejos que fueron abandonados en la habitación, yendo de piso en piso dejándolos donde nadie los viese, el grupito decidió darse un descanso.

Ahora, en el tercer lunes del curso, cuando Toph y Kai atravesaron el portal en la entrada de la facultad, se encontraron con un grupito de alumnas de la carrera de Kai viendo el tablón de anuncios, como siempre que había un nuevo papel pegado ahí.

— Pone que habrá una junta en el auditorio a las ocho de la mañana de hoy. La asistencia es "voluntariamente obligatoria" - Leyó Xany, una de las chicas de la sección 201-B, con quien Kai solía ir por café y churros cada semana.

— Solo miembros de la licenciatura en letras - Aclaró Nara, otra de las chicas de la 201-B.

— Supongo que no voy contigo entonces - Se encogió de hombros Toph antes de dirigirse a su edificio.

— Cuídate - Se despidió Kai antes de que ella se fuese.

"Cuídate", pensó el chico. Él era quien tenía que cuidarse, no ella.

Casi enseguida, Khanna y Mei llegaron también a ver el tablón de anuncios: Nara, aquella chica andrógina, llamó la atención de Khanna, por lo que tan solo Mei se quedó junto a Kai, esperando a que el resto se hiciese a un lado.

— ¿De qué crees que trate? - Preguntó Mei, ansiosa - ¿Crees que vayan a regañarnos o algo? Espero que no tarden en hablarnos, teníamos clase con la maestra Tapia.

Tapia era una de varias profesoras que no llevaban más que unos dos o tres años enseñando en la facultad: recién egresados de licenciatura o maestría que ya daban clases que, como Davriel o la propia maestra Tapia, eran de los favoritos de los alumnos. También, Mei tenía un severo amor platónico por ella.

Quedando menos de diez para las ocho, la mayoría de los estudiantes se encaminaron hacia el auditorio, ubicado en el sótano de uno de los edificios de la facultad. Khanna y Nara se sentaron una al lado de la otra; Nessa y Kalea también y al otro lado de la hilera de asientos en la cuarta fila, Mei y Kai. Más estudiantes de todos los cursos de letras entraron hasta que Kai pudo ver a una chica varios años mayor que ellos (excepto quizás por Khanna, quien quizá aún fuese un año mayor). La reconoció. Era Celia, la consejera alumna de la facultad de letras.

— Ay, hola a todos - Saludó la chica - Soy la presidenta del consejo de estudiantes, Celia. Quizá algunos ya me conozcan, pero la mayoría de los de segundo curso creo que no. Déjenme explicarles por qué están aquí.

El auditorio estaba en absoluto silencio, sin contar a Celia, claro. Se notaba que el resto de los estudiantes la apreciaban bastante y los de segundo, como Kai, se daban cuenta y los imitaban, guardando silencio también.

— Es una tradición de parte de la facultad, que al pasar a segundo semestre, les organicemos una fiesta de bienvenida - Sonrió Celia, extendiendo sus brazos.

Kai pudo notar que había otros dos estudiantes de cursos superiores en una esquina del escenario en el auditorio, pero no pudo distinguirles las caras; aunque su paranoia le insistía cada vez más seguido con que iban a emboscarle, se reprimió.

— Nosotros somos Maya y Ramsés - Saludó una de los dos alumnos a la sombra, en una esquina del escenario.

La chica era quien había hablado, de cabello muy corto, lentes de marco redondo, de tez morena y complexión sumamente delgada: a Kai le recordó a su amiga Amelia, pero menos como pandillera y más refinada. El chico, Ramsés, vestía una camisa a cuadros, tenía ojos color verde oscuro, era aún más blanco que Kai y aunque se veía afable, también parecía ser un adicto a las reglas.