T3E17: El cantor dormido

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Conforme pasaban los días, el ánimo de la gente en la facultad empezaba a volverse cada vez más tenso y no era para menos: en menos de un mes, muchos tendrían que volver a sus hogares fuera de Xalapa y no lo harían en paz si estaban a medio reprobar y aunque Kai no tenía ese problema, sí que necesitaba apresurarse con otros temas.

— Tampoco creo que esté viviendo en algún sitio público - Opinó él, viendo la lista de lugares que Alba Dorada todavía no revisaba - ¿Qué hay de los parques públicos?

— Sabes que te aprecio, pero no voy a escalar cerros contigo - Le respondió Toph, revisando minuciosamente el mapa de Xalapa que tenían en una de las paredes del cuarto de Kai.

Ambos se tomaron un pequeño descanso: bajaron las escaleras rumbo a la calle, en busca del primer puesto de comida corrida que encontrasen, uno que estaba a pocos metros de la entrada de la facultad: era algo temprano todavía y poca gente estaba en la calle, pero gracias a que entraban dos horas después, ambos habían tenido tiempo para discutir un rato acerca de posibles ubicaciones para Caleidoscopio. No tuvieron éxito.

— Mira, a este paso, la mitad de La Ciudad vendrá a cortarme la cabeza para cuarto semestre - Se quejó Kai - Al menos tus amigas no vienen tras mí, ¿verdad?

Toph prefirió darle otra mordida a sus tacos.

— ¿Verdad?

Toph se apresuró a masticar para evitarle un colapso a su amigo.

— ¡No! Es decir... a veces hablo con una o dos y no creo que quieran... ya sabes.

— ¿Quiénes? - Preguntó Kai, sosteniendo su taco mientras le apuntaba con él a su amiga - Es decir... ¿Gwen? ¿Tina? ¿Alguien del Triunvirato, quizás?

— No tiene importancia, Kai. Tan solo con Sonia y otras amigas - Reconoció la chica, terminándose otro taco al acabar la oración.

Kai reflexionó un poco mientras masticaba: Gwen había sido su novia durante un breve periodo en segundo semestre de preparatoria (spoiler: lo engañaba con Tina). Tina a su vez terminó contribuyendo a que la siguiente pareja de Kai lo dejase también. Después, formó parte de otra sociedad criminal: El Triunvirato.

Había que reconocer algo: no lo odiaban de a gratis. Kai husmeó en donde no debía durante la mayor parte de su tiempo en preparatoria y además, tanto Gwen como Tina seguían órdenes del jefe de la mafia de La Ciudad en ese entonces, pero por otro lado Sonia... Kai fue bastante grosero con ella y varias veces Sonia le demostró que se equivocaba respecto a ella.

Eso volvía a Kai en un miserable, ¿no? Mientras mordía su último taco, pensó en cómo pasó de creer que Sonia era algo idiota a tenerle cierto respeto. Era una lástima que ya no hablasen. De hecho, desde que lo expulsaron, ya no hablaba con muchas personas y el número fue en descenso incluso después.

— Pero no te preocupes - Decidió añadir Toph, viendo a su amigo con expresión preocupada - Las que no están en prisión... bueno, ya sabes que Sonia, Gavin y las demás no quisieron participar en... bueno, tu expulsión.

— No te preocupes - Le restó importancia, limpiándose el excedente de grasa de la boca con una servilleta.

Mientras agarraban sus cosas, Kai pudo ver a una de sus amigas acercarse a toda prisa: era Xany, del otro grupo. Toph volteó a verla también, sin entender lo que ocurría.

— ¡Kai! ¡Amiga de Kai! Vengan, ocurrió... ¡Sólo vengan!

— ¿Cuál es la prisa? - Quiso saber el chico, sin ganas de ir corriendo tras Xany sin razón aparente.

— El consejo de alumnos convocó una junta - Explicó Xany - Se trata del que... el de la bienvenida. Desapareció uno de tus compañeros.

 Desapareció uno de tus compañeros

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