T6E10: El congreso estudiantil

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— Hoy estamos reunidos por un preocupante hecho que cae sobre nosotros el día de... hoy - Balbuceó Ramsés, frente al pleno de estudiantes de literatura de la facultad.

— Es necesario renovar a los miembros del consejo - Tomó la palabra Maya - Dado que nosotros dos estamos por graduarnos en pocos meses.

— Y creemos que entre ustedes están nuestros sustitutos.

— Principalmente porque solo pueden ser elegidos de entre los alumnos de esta carrera - Puntualizó Maya.

— El asunto es que creímos haber tenido más tiempo, pero Maya ya está por hacer el examen para titularse y yo ya preaprobé las materias que me faltaban.

— Y aunque pudimos dejarles el muerto a ustedes, no nos pareció correcto - Sonrió Maya.

Era viernes en la mañana y los ánimos de Kai estaban por los suelos, como su capacidad para prestar atención. A su lado estaban Mei, Tezca y Ghandi, a quienes habían sentado al frente, dado que eran los potenciales nuevos representantes de la facultad. Claro que, a como les explicó Ramsés, no es que el candidato fuera a salir específicamente de entre ellos, pero se tomó la molestia de explicarles que lo más probable es que ellos fueran las primeras personas en ser nombradas.

Mientras Maya explicaba las tecnicidades que implicaba el cargo, Kai pensó en que, aunque sería útil ocupar el puesto, en realidad estaba más que harto de tantos trámites y burocracia. Ocupar un puesto oficial dentro de la comunidad estudiantil no podía ser divertido ni por asomo.

— Quizá Kai y yo debamos postularnos juntos - Sugirió Ghandi en voz baja.

— Ni muerto.

— No tenías que ser tan grosero con ella - Murmuró Mei, a su lado.

— Pero ni muerto lo haría - Contestó Kai. A estas alturas no le importaba si Ghandi se sentía ofendida por su rechazo o indiferencia.

Salieron de ahí los cuatro propuestos como candidatos. Nadie más se ofreció. Ramsés tenía razón: ellos eran los que gozaban de la popularidad e historia detrás suficiente para postularse para el cargo. Irónicamente, ni Kai ni Mei se habían postulado solos, caso contrario al de Tezca y Ghandi, quienes se pusieron de pie para aceptar sus respectivas candidaturas. Kai podía ver claramente cuáles eran las prioridades de cada uno.

No pensaba dejarse elegir.

Entre clase y clase, logró reunirse con Toph. La volvieron representante de la carrera de Idiomas en su facultad, lo que no significaba mucho más aparte de cargarla de trabajo adicional.

— Supongo que te habrán propuesto - Intuyó Toph.

— Sí, pero no pienso aceptar. Demasiado trabajo para mí. Llamar la atención no es lo mío.

— Eso dices tú - Sonrió Toph.

— Quizá lo sea, pero no quiero eso. Demasiado estrés, y eso.

Ella asintió, concediendo.

— ¿Y por qué aceptaste tú?

— Creo que quería hacer algo útil.

Kai se quedó pensando en lo que dijo Toph horas después. En casa, Mei le preguntó si deberían candidatearse juntos: Letras tenía dos asientos en el congreso estudiantil y podrían ocuparlo juntos.

Sin embargo, Kai se negó: le explicó por qué no quería ser consejero estudiantil y después, se encerró en su cuarto. Mei le mandó un mensaje más tarde diciéndole que quizá ella tambien se bajara de la contienda. Pronto, los reporteros del periódico escolar estarían acribillándolos, queriendo saber por qué no querían involucrarse en la política escolar.

Kai ya tenía planeado lo que iba a decir: "si no puedo mantener segura la ciudad, ¿para qué quiero echarme a cuestas a mi facultad también?". Aunque no era la razón real, serviría como excusa.

Ya entrada la noche, abrió su PC y empezó a revisar los correos que le habían llegado de Alba Dorada. Un grupo de egresados de la academia pidiendo ser apadrinados... archivar. Algo sobre la captura de los líderes de una red de trata de personas a mano de Alyssa Pendragon y su equipo... guardar y archivar.

Entonces llegó a la parte interesante.

Un archivo encriptado de parte de Ezra Saucedo.

Hizo clic en el hipervínculo que venía en la descripción del correo: ingresó sus contraseñas y unos segundos después, estaba viendo un documento sin censurar con actividad ilícita de una compañía fantasma llamada Amores Inc. Por lo visto, era empleada para lavar dinero por parte de... todavía no sabían a qué organización criminal pertenecía. Las especulaciones, según el agente que redactó el informe, apuntaban a que era trabajo de las Lunas de Jonsu, dado que eran la facción criminal de cuello blanco predominante desde hacía un año.

— Amores Inc... ¿a qué se supone que se dedican?

No había mucha información al respecto en internet, pero parecían ser subcontratistas. El outsourcing y la subcontratación habían sido eliminados como modalidad laboral hacía algún tiempo en el país, al menos en teoría, pero por lo visto, en la práctica era un tema totalmente distinto.

Kai guardó el correo, pero no sabía muy bien cómo seguir esta pista. Redactó una respuesta para Ezra, agradeciéndole el pitazo, pero esta noche no tenía muchas energías para seguir por ese camino.

A la mañana siguiente, Kai asistió a la facultad como todos los días, exceptuando el detalle de que hoy se elegía a los representantes de grupo. Kai se adelantó a las urnas para poner la suya de cabeza. Cuando Ramsés y Maya preguntaron la razón, él contestó que no quería estar en la plantilla de candidatos.

— Lo siento si arruino la planeación, pero en realidad, no tengo deseos de ser elegido como representante.

— Pero... ¡eres la opción que la mayoría pensaba escoger! - Expresó Ramsés - ¡Yo iba a votar por ti!

— Gracias, pero no gracias - Sonrió amablemente Kai, insistiendo en que no quería participar como candidato - Preferiría que alguien más esté ahí en mi lugar.

Cuando llegó la hora de votar, Kai se sorprendió un poco al ver a su amiga Mei todavía en las urnas. Al parecer, ella no se había bajado de la contienda, dejando la competencia entre ella, Tezca y Ghandi. Honestamente, Ghandi no era la favorita: sus rivales eran miembros activos de Alba Dorada, tanto Mei, del Paraselene, como Tezca, del Apex Lupus. Muchos creían que ambos saldrían ganadores y mantendrían la representatividad pareja entre los dos grandes equipos de agentes en la facultad.

Sin embargo, cuando llegó la hora de la votación, se supo que uno de ellos no reunió suficientes votos para convertirse en representante.

— Con ciento ocho votos, tenemos a Mei como nuestra primera representante - Contó Maya.

— Y, en segundo puesto, con sesenta y ocho votos, con una diferencia de cuatro sobre el tercer puesto, se encuentra Ghandi como nuestra segunda representante - Leyó Ramsés su parte del conteo de votos - Una lástima para nuestro teniente del Apex Lupus, pero si hubiese juntado uno o dos votos más, las cosas serían diferentes.

Tezca alzó las manos en señal de rendición, entre el público.

— A nuestras chicas, felicidades - Añadió Ramsés - Me alegra poder decir que el consejo estudiantil de nuestra facultad se encuentra en buenas manos.

— Y es importante recordarles que tendrán que asistir a las reuniones de consejeros que se efectúan cada día quince en el campus central de Los Lagos - Apuntó Maya - Donde estarán en contacto con sus compañeros del resto de carreras.

— Además - Señaló Ramsés - Ahora ustedes son responsables de dirigir la planeación para la feria del libro de esta universidad, que tiene fecha fijada para dentro de tres semanas. ¡Mucha suerte, chicas!

Literatura según KaiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora