Survive: A Story of zombies

#57 Hitchhiker

El Flaco se da vuelta y trata de calmar a los de la parte trasera, quienes poco a poco dejan de llorar y sollozar.

-Flaco: Bueno, tranquilos, tranquilos. Tenemos que salir de acá.

-Gabriela: Estamos rodeados de esas cosas. Y los que no están con nosotros....

-Joaco: Se están comiendo a nuestros amigos. ¡De nuevo! Esta vez no los abandonamos, pero igual murieron. ¡Dios mío!

-Pancho: Tranquilos, por favor. Los gritos son peores. Si queremos poder rendirles homenaje a los que perdimos hoy, tenemos que salir con vida.

-Joaco: ¡Ah! ¡Otra vez esa payasada! ¿Realmente te ayuda a dormir?

-Martin: ¿Cómo que otra vez?

-Joaco: ¡Nos hicieron abandonar a Mauro para poder escapar mientras lo mataban los podridos! ¡Eso quieren hacer de nuevo!

-Flaco: Con la diferencia de que ya los mataron...

-Joaco: ¡Te voy a cagara trompadas!

-Gabriela: ¡No, Joaco, No!

-Gonzalo: ¡Quédate quieto!

-Pancho: ¡Basta!

-Martin: ¡HABER SI NOS TRANQUILIZAMOS! Por favor, hermano. Tenemos que salir vivos de esto. ¿No querías irte de acá? ¿A un lugar seguro? Bueno, vamos. Pero todos juntos y unidos. Ya nos va a sobrar el tiempo para pelearnos, pero tenemos que poder respirar para eso. ¿Están todos conmigo?

El grupo asiente.

-Pancho: Bueno. ¿Y qué carajo hacemos?

-Joaco: Yo no tengo más balas ni nada como para revolear.

-Gabriela: Me queda una.

-Martin: A los tiros no podemos salir.

-Flaco: Salgamos por la luneta.

-Pancho: ¿Estás loco? ¿No se van a meter todos los podridos por ahí?

-Flaco: Esto es así. Lo estuve pensando. Ustedes, los del fondo, arranquen el respaldo. Nosotros tenemos que romper la luneta y enseguida taparla con el respaldo. Entonces todos empujamos eso y arrastramos todo lo que se nos cruce.

-Joaco: ¿Y después?

-Flaco: Corres como un hijo de puta. ¿Qué dicen?

-Gabriela: Espero que sepas lo que haces.

Los tres del fondo, con ayuda de Martin, patean y tiran del respaldo único del asiento trasero, ante la atenta mirada de más de una decena de zombies golpeando el cristal y el baúl. Finalmente, entre cuatro, logran desprender las grampas de apoyo encastradas en el acero y chapa que divide ambos cubículos.

Seguidamente lo colocan por delante suyo, como si fuese un escudo, tomándolo por las grampas de metal pintadas de negro y los hierros que sostienen la estructura del respaldo. El Flaco y Pancho arrancaron los apoyacabezas y tratan de afilar los dos hierros que cuelgan por debajo.

-Pancho: ¿Listos?

-Joaco: No lo sé.

 -Gonzalo: A lo mejor tendríamos que pensar esto...

-Flaco: Si, están listos.

El Flaco dispara la última bala de Gabriela y hace estallar la luneta trasera. Inmediatamente Joaco, Gabriela y Gonzalo empujan el respaldo y lo meten en el lugar libre. Los zombies gruñen y comienzan lentamente a agruparse en torno al baúl. Martin, el Flaco y Pancho se colocan por detrás y ayudan a empujar el respaldo, logrando traspasar el hueco donde estaba el vidrio y salir fuera.