Gabriela, Martin, Joaco y Marcelo están frente al galpón donde habían encarcelado a los sublevados. Los cuatro están armados y forman un círculo por delante del portón.
-Gabriela: Nos dijo que los metamos acá.
-Marcelo: Ya se lo que dijo, pero no me importa.
-Martin: Linda forma de obedecer.
-Marcelo: ¿Y porque tenemos que hacer lo que diga? ¿Quién se piensa que es?
-Martin: El tipo que va a encaminar esto. Y todos lo vamos a ayudar. Así que podes empezar a colaborar.
-Marcelo: ¿O sino que?
-Martin: Ya vas a venir.
-Gabriela: O sino nada. ¡Déjense de joder los dos! Ya lo hemos dicho, pero tenemos que estar todos juntos.
-Joaco: Shh, esto nunca paso.
Mientras Joaco los hacia callar, Pancho apareció y hablo con ellos.
-Pancho: ¿Tuvieron algún problema?
-Joaco: Todo tranquilo. Están controlados.
-Marcelo: Por lo menos eso esperamos.
-Pancho: ¿Eso qué quiere decir?
-Marcelo: Estoy seguro de que estos tipos van a querer escaparse. Y seguro conocen bien estos galpones. Ya que van a estar presos hay que cuidarlos bien.
-Pancho: Justamente a eso vine en parte. Por ahora están seguros.
-Marcelo: Llámalo a Ricardo y los demás. O los que quieran. Podemos custodiar esto por turnos o hacer rondas. Lo principal es estar cubiertos en la noche.
-Gabriela: Estoy segura de que podemos encontrar voluntarios entre la gente.
-Pancho: Por ahora tenemos que reforzar la entrada y ver el estado de las paredes. Después volvemos en este problema.
-Marcelo: Yo no tengo ni idea en eso, pero si aprendí a disparar. Puedo custodiar esto.
-Martin: Podemos. Yo te acompaño.
-Marcelo: No es necesario, el peligro son los de afuera.
-Martin: Eso dicen algunos.
-Gabriela: Déjalo, él tiene razón. Además, ahora están heridos y cansados como para intentar algo.
-Pancho: Bueno, entonces. Vamos. No quiero imaginar cuántos de estos podridos se están acercando después de escuchar los tiros.
El grupo deja a Marcelo en la custodia para ir directamente hacia la entrada de la finca. Allí, junto con el Flaco y algunas personas que se acercaron, comienzan a reparar la reja de entrada principal. Además de reforzarla con maderas, fierros y chapas, el grupo acomoda autos semi-abandonados, rotos o con las gomas pinchadas cerca de la entrada y en los muros laterales, a modo de barricadas.
-Gabriela: Podemos poner a la gente a trabajar en estacas y pegarlas a los autos.
-Pancho: En el fondo hay bastante alambre de púas, aunque podemos buscar más. Por lo menos eso va a detener a estas cosas.
-Flaco: Sigan tirando ideas, trabajo es lo que sobra.
-Martin: ¿Para qué dejaste ir a los esclavos?
-Flaco: Son decisiones.
El grupo entero echa a reír mientras emprenden el regreso al interior de la finca. Mientras lo hacen escuchan una enorme cantidad de disparos, que los dejan casi pasmados.
-Joaco: ¿De dónde vienen?
-Gabriela: Del galpón donde pusimos a esos tipos.
-Pancho: Pero estaban desarmados.
-Martin: Esto es culpa de Marcelo. ¡Vamos!
-Flaco: ¡Cierren las puertas y quédense acá! Martin, Pancho. ¡Vamos!
-Gabriela: ¡Yo también voy!
-Martin: ¿No crees que ya hiciste demasiado?
-Gabriela: ¿Qué?
-Martin: ¡A vos se te ocurrió dejarlo solo! ¡Trata de cerrar la puerta!
Gabriela observa como Martin, el Flaco y Pancho corren hacia el fondo de la finca. Mientras lo hacen, le gritan a la gente que vuelva a sus casas y aseguren las puertas. Finalmente los tres llegan hasta el galpón, entrando apuntando al interior. Allí esta Marcelo, rodeado de cadáveres, sangre y balas.
-Flaco: ¡Tira el arma!
-Marcelo: Esto debía hacerse.
-Martin: ¡Deja el arma! Si tengo que hablar nuevamente te reviento los sesos.
Marcelo tira el rifle y se arrodilla frente a ellos.
-Marcelo: ¡Esto había que hacerlo! Apenas podemos darle de comer a los nuestros, apenas podemos custodiar a los nuestros. ¿En serio iban a mantener a estos asesinos? ¡Nos iban a matar!
-Flaco: Con esa misma lógica yo tendría que matarte, pero no te voy a matar. Atenlo.
-Marcelo: ¿Qué vas a hacer?
-Flaco: Lo mismo que iba a hacer con ellos: vas a estar preso.
-Martin: Déjenme encargarme.
-Flaco: Dale. Además recorran todo el lugar y secuestren todas las armas.
-Pancho: ¿Estás seguro de eso?
-Flaco: Si vamos a mantener esto en orden no quiero que nadie este armado.
-Pancho: Le voy a decir a Joaco y Gabriela que se ocupen.
-Flaco: Y fíjate si podemos conseguir otra casa.
-Martin: ¿No te gusta la de ahora?
-Flaco: Estoy seguro de que los amigos de Marcelo van a molestarnos.
-Pancho: Voy a ver qué podemos hacer.
-Flaco: Gracias. Y díganle a todos....que vamos a mantener esto en pie.
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Survive: A Story of zombies
HorrorAño 2014. Un virus creado por la OTAN durante la guerra fría se desata en África. Los reportes son tan claros como increíbles: los muertos regresan de su estado terminal y atacan a los vivos. A pesar de todo, el Mundial de Brasil se desarrolla no...