-Martin: ¿Entonces?
-Flaco: No sé. No tenemos ideas de a que nos enfrentamos. Ya nos pasó con los de la escuela.
-Martin: Éramos unos chicos solamente, sin ideas de nada. No digo que ahora seamos expertos, pero somos mejores que en esa época.
-Flaco: No tenemos armas ni balas ni defensas.
-Martin: Pero podemos tenerlas. Flaco, hay familias acá. No podemos dejar que mueran por este tipo.
-Flaco: No lo sé.
-Martin: Podemos hacerlo o vamos a tener que dejar el grupo. Es peligroso viajar con ellos. No luchar implica dejarlos.
El Flaco se refriega la cara. Sacude la cabeza y suspira.
-Flaco: Tenemos que encontrar armas y planificar una estrategia, entrenar a los del grupo de Sam para que sepan tirar. Es mucho trabajo y parece que el tiempo no es nuestro aliado.
-Martin: Podemos emboscarlos. Eso pensaba yo. Rodearlos, de la misma forma que los podridos atacan a los vivos. Sorprenderlos.
-Flaco: ¿Y los demás que dijeron?
-Martin: Te esperan a vos. Joaco no quería y no le gustaba la idea, pero creo que Gabriela podría convencerlo.
-Flaco: No sé por qué confían en mí y no deciden ellos.
-Martin: Simplemente lo hacen y eso necesitamos: que todos estén convencidos.
-Flaco: Vamos a hablar. Espero que tengan ideas.
Ambos vuelven a la cancha y se reúnen con el resto del grupo y Sam en el centro de la misma, donde anteriormente estaba el círculo central, tapado y borrado por el tiempo y el césped alto.
-Flaco: Así que hemos decidido frenar a estos tipos. Sean quienes sean.
-Joaco: Creo que estamos locos. Escucharon lo que Sam dijo, es extremadamente peligroso.
-Martin: ¿Y vamos a vivir huyendo, corriendo? Sam, ¿queres vivir con miedo hasta tu último segundo de vida? ¿Queres que tu gente viva con miedo?
-Sam: Ellos, familia. No ejército.
-Gabriela: Yo puedo enseñarles a disparar. A tu familia, Sam. Creo que podemos pensar bien si atacarlos o no. Si me preguntas, la respuesta es no. Pero debemos saber defendernos. Ellos deben saberlo y estar preparados.
-Pancho: Y aunque no sean ellos, no nos olvidemos de los podridos. Otra noche como la del predio y no salimos vivos
-Joaco: Si vamos a prepararnos para defendernos, estoy de acuerdo. Pero no voy a ir a una batalla con gente que come gente.
-Gonzalo: Preferimos huir a eso. No estaremos preparados jamás para vencerlos, pero si para frenarles el carro.
-Martin: Esta bien. ¿Todos de acuerdo?
-Gabriela: ¿Sam?
-Sam: Aprender a defenderse, sí. Todos los hombres defender a su familia. Y vengar a los que no están más.
-Flaco: Así será. Ahora, ¿alguno sabe dónde encontrar armas?
-Gonzalo: Ahora que preguntas....
El Flaco, Pancho, Martin, Gabriela, Joaco, Gonzalo y Sam se arman con palos y fierros y recorren las desiertas calles quilmeñas a paso acelerado. Después de varias cuadras llegan a una esquina, donde está emplazada la comisaría 4° de Quilmes.
-Pancho: ¿Cómo sabias exactamente dónde estaba?
-Gonzalo: ¿A quién no lo trajeron acá alguna vez? Vamos.
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Survive: A Story of zombies
HororAño 2014. Un virus creado por la OTAN durante la guerra fría se desata en África. Los reportes son tan claros como increíbles: los muertos regresan de su estado terminal y atacan a los vivos. A pesar de todo, el Mundial de Brasil se desarrolla no...