Survive: A Story of zombies

#56 Closeness

Martin, Joaco, Gabriela y Gonzalo están alrededor de una vieja camioneta abandonada.

-Joaco: Este es todo el combustible que tenía. Me sorprende que no se haya oxidado el tanque.

-Gabriela: ¿Y a ustedes como les fue?

-Martin: Encontramos otra batería de un Renault 12 que hay por allá abajo. Espero que sirva.

-Gonzalo: Además de varias bujías.

-Martin: Si no arranca con esto, buscamos otra cosa.

-Joaco: Esperemos que eso no pase.

Por detrás de ellos aparecen dos caminantes, tambaleándose y gruñendo. Están sucios, con rastros de barro y empapados.

-Joaco: Son solos dos.

-Martin: Agarra algún palo, no dispares. Guardemos las pocas balas que quedan.

-Gabriela: Lo tengo.

Gabriela toma una vieja palanca de cambios sumida en el pasto y sale caminando. Cuando el primer podrido se acerca a ella. Amaga a moverse a su izquierda, pero lo hace en la otra dirección y golpea fuertemente en la nuca de su enemigo y lo hace caer al suelo, con el cráneo reventado.

Luego se da vuelta, en busca del restante, pero todos notan que comienzan a aparecer una decena de caminantes por los tres costados.

-Martin: ¡Cuidado!

-Gonzalo: Nos van a rodear, salgamos.

-Joaco: ¡Vamos por las pistolas!

Gabriela camina hacia atrás y arroja la palanca contra el abdomen de uno de los zombies, sin lograr derribarlo. Joaco la toma por el brazo y corren de regreso.

Del otro lado del campamento, el Flaco aparece rengueando desde el interior del pequeño monte.

-Pancho: ¿Qué estabas haciendo?

-Flaco: Vengo de entre los yuyos. Creo que es obvio que fui a mear.

-Pancho: Tenemos un lugar para eso...creo.

-Flaco: El rio está sucio pero tampoco vamos a seguir contaminándolo.

-Pancho: No, no. Es... ¿Y a estos que les pasa?

-Flaco: ¿Los corre la federal?

Ambos ven como revuelven las carpas y los autos buscando las pistolas y, desde el fondo del campamento, varias decenas de podridos cubren el horizonte cercano.

Pancho ayuda al Flaco mientras intentan correr y reencontrarse con los demás.

-Martin: Tomen, disparen a la cabeza.

-Flaco: ¿De dónde salieron tantos?

-Martin: Cruzaron el puente o el rio a nado. No sé.

-Pancho: Pensé que habían asegurado esa zona.

-Gonzalo: Lo hicimos. En todo el puente pusimos cosas. No entiendo lo que paso.

Los cuatro comienzan a disparar, mientras la horda se sigue adentrando y comienza a invadir las carpas y los autos donde duermen.