Survive: A Story of zombies

#60 Pursued Ones

-Sam: Psss. Pssss. Arriba.

El Flaco se sacude y hace muecas. Abre los ojos. El sol sigue sin aparecer y apenas distingue el otro arco blanco de la cancha de futbol en el otro extremo.

-Flaco: ¿Nos atacan los ingleses?

-Sam: Tenemos que salir. Seguimos viaje

-Flaco: ¿Qué? Dejate de joder

-Gabriela: ¿Qué pasa?

-Flaco: Este que quiere que nos levantemos. Chau hermano, deja dormir.

-Sam: Arriba, Gabriela. Ustedes también.

-Gabriela: Es temprano, Sam. Y peligroso.

-Joaco: Estuvimos corriendo toda la noche, ayer. Podemos salir dentro de unas horas.

-Sam: Estamos todos listos.

-Martin: Hey, ¿otra vez lo mismo? Le salvamos el culo para dormir acá, podrían hacernos caso

-Gonzalo: No hay necesidad de gritar. Gabriela, explícale.

-Martin: Nadie está gritando, queremos saber qué pasa.

-Gabriela: Martin, tranquilo.

-Martin: Estoy bien, estoy bien. Pero, ya que somos tan parte del grupo, que somos esto, que nos agradece, que se yo, que se cuánto, podrían darnos bola. O explicarnos.

-Sam: Arriba, por favor. Tenemos que irnos.

-Flaco: Te dijimos que estamos cansados y es peligroso de noche. ¿No entendes?

-Pancho: Sam, ¿Por qué el apuro?

-Sam: Tenemos que irnos.

-Flaco: No vamos a dar un paso más si no nos dicen porque mierda corremos de noche

-Gabriela: ¡Tranquilos! ¡Flaco, anda atrás!

-Sam: Nos vamos.

-Joaco: ¡Contesta, carajo!

-Gabriela: ¿Vos también, boludo? Anda allá y déjate de joder.

 -Pancho: ¿Están jugando con nosotros? ¿Qué les pasa?

-Gonzalo: ¡Hey! ¡Cálmense! ¡Están haciendo quilombo al pedo!

-Gabriela: Sam, ¿podes decir algo? Termina con tanto misterio. Ayudame a calmarlos, por favor.

-Sam: Nosotros, de noche.

-Flaco: ¡Aprende a hablar!

-Gabriela: ¡Flaco!

-Flaco: ¡Pero si no sabe ni hablar! ¿Nos quieren matar, acaso?

-Sam: No, no. Ustedes amigos. Amigos nuestros. Familia.

-Joaco: ¡Entonces habla! ¿Qué pasa? ¿Qué tanto lio es?

-Sam: Es que...

-Martin: Habla.

Martin toma su pistola y apunta directamente sobre la nuca de Sam. Todos dejan de gritar automáticamente y nadie se mueve. Los senegaleses levantan las manos y tratan de arrodillarse.

-Sam: Por favor, no me mates.

-Martin: No te voy a matar, por ahora. Decime porque salimos siempre de noche. De que se esconden. Porque había gente muerta en el Shopping. Habla y no te mato.

-Gabriela: Martin...por favor.

-Gonzalo: Pibe, pibe. Cuidado. ¿De dónde sacaste eso?

-Martin: El que pregunta cosas primero soy yo. ¿Y, Sam?

-Gabriela: Esta no es la forma....

-Sam: No, está bien. Yo contarles. Si, tienen razón. Nos escondemos, huimos y escapamos.

-Joaco: ¿Por qué?

-Sam: Hay un tipo. Un hombre. Viejo, grande. Con más gente, mucha más. Nosotros venir de Rosario, capital. Ahí nos encontró este hombre por primera vez.

-Pancho: ¿Los persigue desde Rosario?

-Sam: Si, sí. Teníamos campamento y muchas familias. Hasta que nos atacó y mato. Nos fuimos y nos siguió. Cada vez que parábamos nos encontraba. Por eso salir de noche, cuando es peligroso y dejamos menos rastro.

-Martin: ¿Mato a tu gente en el shopping?

-Sam: Teníamos familia enferma. Paramos por agua y calor. Hizo fuego en un costado y quemo vivos a nuestra gente. Muchos corrimos, no podíamos hacer nada. Esa fue la última vez que lo vimos.

-Flaco: ¿Quién es este tipo?

-Sam: Alguien. Y su grupo.

-Gabriela: ¿Por qué se las agarro con ustedes?

-Sam: Por nuestra piel. Nos caza y come a nosotros. Dice que los negros somos animales. Nos sigue y caza como animales. Ellos todos hombres blancos, como ustedes. Solo ataca a nosotros.

-Flaco: Deben ser uruguayos.

-Gonzalo: Solo les falta un avión.

-Pancho: Que ganas de insultar a los hermanos rioplatenses...

-Gabriela: Hey, déjense de joder. ¿Martin?

Martin baja el arma. Mira a los demás y agacha la cabeza. La toma por el cañón y se la ofrece a Sam. Este la toma y la arroja lejos. Seguidamente lo palmea en la espalda.

-Martin: Nosotros te vamos a ayudar, ¿no gente?

Todos asienten.