Segundo
Ana me recomendó que saliéramos a cenar para distraernos. No estaba de acuerdo con una salida sin saber lo que le podía estar pasando a Toni,pero si era verdad que si seguía un minuto más adentro de la casa iba a arañar las paredes.
Aún en la mesa con más de cuatro cervezas encima, zapateaba nervioso y mi mente solo pensaba en ayudar a Toni. Pero como podíamos denunciar a Marcos si no teníamos una sola prueba?. Si Toni mismo no lo denunciaba,era imposible.
- Vas a gastar el suelo si seguís zapateando- bromeo Ana a quien el alcohol me habia hecho más efecto que a mí.Intento sonreír pero no puedo.
- Como puedo estar tranquilo sabiendo que Toni está en su casa solo con ese enfermo?- no sabía que hacer - Cada minuto que pasa es una tortura,tengo ganas de correr a su casa ,romper las paredes y sacarlo de ese lugar.
- Vamos a ayudarlo. Pero tenemos que ser discretos - la admiro por pensar con más calma- Segundo,no podemos perjudicar a Toni,Marcos es capaz de hacerle cualquier cosa. En la situación en la que está , Toni debe estar muy vulnerable,debe pensar que todo es su culpa,que el lo pone así.
- Pero no lo hace- le replicó.
- Eso lo sabemos vos y yo. Pero Marcos le debe trabajar la culpa a más no poder - me aclara ella- y no es fácil salir de ese lugar.
- Como vamos a convencerlo de que lo denuncie?- le pregunto. Ella sonríe.
- Es que no tiene porqué hacerlo- frunzo el ceño sin entender - Segundo,acá lo importante es que Toni sepa que no está solo. Que tiene una red de personas que lo contienen y lo apoyan. Pero la víctima acá es él,y no tenemos que agregarle más presión como la de Marcos ,sino respetar sus tiempos. Hacerle saber que lo acompañamos hasta que el mismo,solo él,este listo para denunciar.
Asiento teniendo ahora el panorama más claro. En ese momento,sentimos que la puerta se abre y nos giramos para ver. Toni entra al lugar escoltado por Marcos,su semblante se veía asustado,como un ciervo caminando hacia el matadero.Nos miramos con Ana sin saber que hacer. La mano posesiva de Marcos en la cintura de Toni me hervía la sangre y notaba como el se esforzaba por sonreír. En un segundo,Marcos se levanta para ir al baño ,dejándolo solo y supimos que ese era el momento.
Caminamos hacia la mesa ,dónde Toni parecía distraído esperando a Marcos.
- Toni,hola!- le dice Ana sonriente.
El se gira sorprendido al vernos. No sé si nuestra presencia le agrada mucho,no puedo deducir su mirada pero se nota que está incómodo.
- Que hacen aquí?- nos pregunta sin entender frunciendo el ceño.
- La noche estaba hermosa y decidimos salir a cenar- dice Ana aparentando tranquilidad- Por que no nos acompañas?.
El mira para todos lados nervioso. Era evidente que se sentía comprometido al tenernos cerca y ante la posibilidad de que Marcos volviera y lo encuentre hablando con nosotros. Lo miro suplicante,pero noto que el esquiva mis ojos,casi como si tuviera vergüenza. Una punzada me atravesó el pecho al verlo así.
- No creo que sea la mejor idea - nos dice - Por favor,vayanse antes de que Marcos vuelva. No quiero escándalos.
Antes de que pueda hablar ,Ana toma delicadamente su mano y el la observa temeroso.
- Toni,por favor. Te lo suplico - le pide con voz suave- solo una charla,los tres solos. Nos lo debemos,amigo.
Después de unos minutos,estábamos los tres sentados en la mesa. Toni suspiraba nervioso,evitando nuestras miradas.
- Seguís con Marcos - le dice finalmente Ana cortando el silencio.
- Supongo que eso ya lo saben- revolea los ojos cansado - vayan al grano,por favor.
Antes de que Ana diga algo,la interrumpo alzando la mano. Era mi momento de hablar.
- Toni-el abre más los ojos al oír mi voz- amor,mírame por favor.
El cierra los ojos y traga saliva pero yo mantengo mi mirada fija . Era evidente que estaba agotado y se notaba. Finalmente, después de unos segundos suspira y lo hace. Sus ojos se encuentran con los míos,pero yo lo miraba suplicante,casi con desesperación.
- No tenés idea del infierno que viví en estos días desde tu partida- recuerdo esa noche en la casa del campo,donde el nunca llegó.
Sus ojos se ponen vidriosos,casi conteniendo las lágrimas y su respiración estaba levemente agitada. Era evidente que quería mostrarse fuerte frente a nosotros,no sabía que responder. En ese momento,lo veo bajar la cabeza,casi como si se avergonzara y siento que empieza a sollozar.
- Toni,amigo- Ana toca su brazo tratando de contenerlo.
- Ey,ey. No,no- le pido agarrando su mentón y obligándolo a mírame - No la bajes. Jamás vuelvas a bajarla ante nadie. No tenes por qué y nadie lo vale.
Ana lo abrazaba contra su pecho frotando su espalda y yo me agachó frente a él para agarrar sus manos. Estaba liberando todo el dolor que contuvo todos los días,encerrado en la casa con ese psicópata: su instinto de defensa empezaba a bajar. Acaricio su rostro y veo como cierra levemente los ojos,casi como si sintiera paz .
- Seguís siendo tan hermoso como el día en que te perdi- le digo sin pensar.
En ese momento,el abre los ojos más grandes y aparta su rostro,queriendo llorar más. Siento la mano de Ana frenarme, tocando mi hombro.
- Segundo,por favor - me pide- Controla tus sentimientos y cuida tus palabras. No querrás asustarlo.
Yo sin embargo sonreí. Toni sabía muy bien lo que sentía por el, inconscientemente siempre lo supo.
- Yo- habla finalmente con un hilo de voz- No puedo...no puedo dejarlo...el va a...a...
- Estamos acá con vos- le dice Ana con dulzura - No estás sólo.
Agarro sus manos entre las mias ,besando cada centímetro de ellas.
- No tenés por qué avergonzarte- le digo mirando sus ojos y secando sus lágrimas- Ni frente a nosotros ni a nadie. No estás solo. Te amo,te amo toda mí vida y Marcos va a tener el castigo que se merece.
El me mira compungido mientras las lágrimas siguen cayendo y Ana lo abraza fuerte queriendo calmarlo. Vuelvo a besar sus manos y el me agradece con la mirada.
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" Segonio : amar en los 80"
Ficción históricaSegundo y Antonio son mejores amigos desde los 10 años. La vida los separa en medio del horror y se vuelven a encontrar 7 años más tarde. Pero ,siguen siendo los mismos?.