Un mago llamado Peter Pettigrew.

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Capítulo 24

Un mago llamado Peter Pettigrew.

A Harry se le quedó la mente en blanco a causa de la impresión. Los tres se habían quedado paralizados bajo la capa invisible. Los últimos rayos del sol arrojaron una luz sanguinolenta sobre los terrenos, en los que las sombras se dibujaban muy alargadas. Detrás de ellos oyeron un aullido salvaje.

-Hagrid.-susurró Tabatha aferrándose más a su hermano. Harry, sin pensar en lo que hacía, fue a darse la vuelta, pero Ron y Hermione lo tuvieron por los brazos.

-No podemos.-dijo Ron, blanco como una pared.-Se verá en un problema más serio si se descubre que lo hemos ido a visitar...-Hermione respiraba floja e irregularmente.

-¿Cómo... han podido...?-jadeo, como si se ahogase.- ¿Cómo han podido?

-Vamos.-ordenó Ron, tiritando. Reemprendieron el camino hacia el castillo, andando muy despacio para no descubrirse. La luz se apagaba. Cuando llegaron a campo abierto, la oscuridad se cernía sobre ellos como un embrujo.-Scabbers, estate quieta.-susurró, llevándose la mano al pecho. La rata se retorcía como loca. Él se detuvo, obligando a Scabbers a que se metiera del todo en el bolsillo.- ¿Qué te ocurre, tonta? Quédate quieta... ¡Me ha mordido!

-¡Ron, cállate!-susurró Hermione.-Fudge se presentará aquí dentro de un minuto...-no hay manera. Scabbers estaba aterrorizada. Se retorcía con todas sus fuerzas, intentando soltarse de Ron.

-¿Qué le ocurre?-pero Harry acababa de ver a Crookshanks acercándose a ellos sigilosamente, arrastrándose y con los grandes ojos amarillos destellando pavorosamente en la oscuridad.

-¡Crookshanks!-gimió Hermione. - ¡No, vete, Crookshanks! ¡Vete!-Pero el gato se acercaba más...-

-Scabbers... ¡NO!-demasiado tarde...la rata escapó por entre los dedos de Ron, se echó al suelo y huyó a toda prisa. De un salto, Crookshanks se lanzó tras el roedor; y antes de que los mellizos y Hermione pudieran detenerlo, Ron se salió de la capa y se internó en la oscuridad.

-¡Ron!-gimieron ambas chicas.

Ellas y Harry se miraron para luego seguirle la carrera. Era imposible correr a toda velocidad debajo de la capa, así que se la quitaron y la llevaron al vuelo, ondeando como un estandarte mientras seguían a Ron. Oían delante de ellos el ruido de sus pasos y los gritos que dirigía a Crookshanks.

-Aléjate de él..., aléjate... Scabbers, ven aquí...-oyeron un golpe seco.- ¡Te atrape! Vete, gato asqueroso.-Harry y las chicas casi chocaron contra Ron. Estaba tendido en el suelo. Scabbers había vuelto a su bolsillo y él sujetaba con ambas manos el tembloroso bulto.

-Vamos, Ron, volvamos a cubrirnos.-dijo Hermione jadeando.-Dumbledore y el ministro saldrán dentro de un minuto.-

Pero antes de que pudieran volver a taparse, antes incluso de que pudieran recuperar el aliento, oyeron los pasos de unas patas gigantes. Algo se acercaba a ellos en la oscuridad: un enorme perro negro de ojos claros. Harry quiso tomar la varita, pero era ya demasiado tarde. El perro había dado un gran salto y sus patas delanteras le golpearon el pecho. Él cayó de espaldas, con un fardo de pelo. Sintió el cálido aliento del fardo, sus dientes de tres centímetros de longitud...pero el empujón lo había llevado demasiado lejos. Se apartó rodando. Aturdido, sintiendo como si le hubieran roto las costillas, trató de ponerse en pie; oyó rugir al animal, preparándose para un nuevo ataque. Ron se levantó. Cuando el perro volvió a saltar contra ellos, Ron empujó a Harry hacia un lado y el perro le mordió el brazo estirado. Harry embistió y agarró al animal por el pelo, pero éste arrastraba a Ron con tanta facilidad como si fuera un muñeco de trapo.

Los Mellizos Potter |Cancelada|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora