Capítulo 3:
"La advertencia"
Ambos mellizos, lograron detener al elfo que quedo medio mareado por tantos golpes
-Si son tan malos contigo, ¿Por qué no los dejas?- pregunto Tabatha, acariciando la cabeza del elfo.
-Un elfo domestico, solo puede ser liberado por su familia, señorita. Y la familia nunca pondrá en libertad a Dobby... Dobby servirá hasta el día en que muera, señorita.- la pelirroja, sintió algo de pena ante esa pobre criatura.
-Y nosotros que nos considerábamos desgraciados por tener que pasar otras cuatro semanas más aquí.-dijo Harry, mirándolo fijamente.
-Lo que nos cuentas, hace que los Dursley, parezcan humanos. ¿Alguien puede ayudarte? ¿O nosotros podemos hacer algo por ti?-si la casa hubiese sido toda de cristal, se hubiera roto en mil pedazos con los sollozos que daba Dobby.
-Por favor, deja de llorar, nuestros tíos no pueden saber que estás aquí, no matarían si te vieran.- le rogo la pelirroja tratando de calmarlo.
-Ustedes preguntan si pueden ayudar a Dobby... Dobby, estaba al tanto de la grandeza de los mellizos Potter, pero no conocía su bondad.- ambos, se ruborizaron al instante.
-Sea lo que hayas escuchado acerca de nuestra grandeza, es mentira. No somos los primeros de Gryffindor, Hermione, ella es...- Tabatha se quedo en silencio, le dolía hablar de su amiga.
-La señorita Potter, es humilde y modesta.- los ojos de Dobby resplandecían de adoración.
-No hablan de su triunfo sobre el Innombrable.-la pelirroja, entendió a quien se refería, pero al parecer, su hermano no.
-¿Voldemort?- Dobby, se tapo los oídos y comenzó a gritar.
-¡Harry! No debes nombrarlo, como dijo Hagrid, a muchos les da impresión su nombre.- le regaño su hermana, abrazando por los hombros al elfo.
-Perdón.- dijo Harry, una vez que Dobby, estuvo calmado.- Sabemos de muchas personas a la que no le gusta que se diga su nombre, por ejemplo, nuestro amigo Ron...- tal como le paso a Tabatha, Harry también se detuvo al nombrar a su amigo.
Dobby, se inclino sobre ambos mellizos, mirándolos con los ojos abiertos.
-Dobby, ha oído.- su voz parecía quebrarse.- Que los niños Potter, han tenido un segundo con el Señor de las tinieblas, hace tan solo unas semanas... y que ambos salieron ilesos... otra vez.-los dos Potter, asintieron lentamente. Los enormes, ojos verdes de Dobby, pronto se llenaron de lágrimas.
-¡Pobres niños Potter!- exclamo secándose los ojos con la funda de almohada que tenía como ropa.
-¡Son tan valientes! ¡Han afrontado tantos peligros! Pero Dobby, ha venido a protegerlos, a advertirles, aunque más tarde tenga que apretarse las orejas con el horno, que ustedes no deben regresar a Hogwarts.- un silencio se hizo presente en la habitación de Harry.
-¡¿Qué?!- dijeron a la vez, los mellizos.
-Tenemos que regresar, nuestras clases empiezan el 1 de septiembre.- protesto Tabatha.
-Es lo único que nos ilusiona, tú no sabes cómo es esto. Nosotros no pertenecemos a este lugar, pertenecemos a tú mundo a... a Hogwarts.- las palabras no le salían a Harry, no querían abandonar lo que hasta hace una semanas, se transformo en su hogar.
-¡No!-grito Dobby, sacudiendo con fuerza la cabeza, que las orejas golpeteaban a sus costados.
-Ustedes, deben estar en donde no corran riesgo. Son demasiado grandes y son demasiado buenos, como para que los perdamos. Si los Potter, vuelven a Hogwarts, sus vidas estarán en peligro.-la idea de no volver, hacia que la pelirroja se sintiese mal no solo por no ver a sus amigos, mal por no poder volver a Cedric.
-¿Por qué?- pregunto Harry algo nervioso y sorprendido.
-Hay una conspiración en contra ustedes, señor. Algo que hará que este año, sucedan las cosas más terroríficas.- susurro Dobby, con temor.
-Hace meses que Dobby, lo sabe, señor. Los Potter no deben volver este año a Hogwarts, ¡Son demasiado importantes!- el tono de voz del elfo, eran de súplica.
-¿Qué cosas terribles?- pregunto inmediatamente Tabatha.
-¿Quién las está tramando?- siguió Harry.
No recibieron ninguna respuesta, solo se sentían los golpes y los aullidos de Dobby contra la pared.
-¡Ya está bien!- gritaron ambos mellizos a la vez, agarrando al elfo.
-No puedes decirnos, lo entendemos. Pero ¿Por qué has venido a avisarnos?- pregunto algo impaciente Harry.
-Dobby, ¿Esto no tiene nada que ver con-quien-ya-tu-sabes?- pregunto con algo de temor Tabatha.
-Basta que asientas o niegues con la cabeza.- añado rápidamente el azabache.
Dobby, movió con lentitud la cabeza de lado a lado.
-No, esto no tiene nada que ver con el Innombrable, señor.-los ojos del elfo, estaba abiertos de una forma que daban miedo y parecían querer revelar algo, pero ninguno de los mellizos sabía descifrar que.
-¿Él no tiene hermanos, no?- la pelirroja lo miro sin entender. Dobby negó con los ojos más abiertos que antes.
-¿Qué tiene que ver si tiene hermanos o no?- pregunto Tabatha.
-Bueno de ser así, no puedo imaginar quien más podría provocar que en Hogwarts, pasen cosas terribles.- Harry ignoro a su hermana y se relajó un poco.-Quiero decir, está Dumbledore, ¿Sabes quién es Dumbledore?-
-Harry, es obvio que sabe quién es Dumbledore.- contesto la pelirroja.
-Albus Dumbledore es el mejor director que alguna vez Hogwarts haya tenido alguna vez. Dicen que sus poderes rivalizan a los del Innombrable, señor.- en un susurro se transformó la voz de Dobby.- Hay poderes que Dumbledore o cualquier mago honesto no...-
De un salto, Dobby quedo sobre la mesa y con la lámpara en sus manos, comenzando a darse golpes con ella y lanzando alaridos de dolor.
El corazón de los niños se detuvo en el momento en que sintieron los sonoros pasos del tío Vernon por las escaleras. Los dos se miraron sin saber qué hacer y...
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Los Mellizos Potter |Cancelada|
Fanfiction¿Cómo sería si James y Lily hubieran tenido otra hija? ¿Cómo sería si esa noche no solo hubo un niño que sobrevivió a la maldición imperdonable? ¿Cómo sería si esa noche una niña también sobrevivió a la maldición imperdonable? ¿Cómo sería si no hubi...