La ultima plaga parte 3/?

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POV Rachel
Fui de regreso a la Villa y encontré a los hijos de Aaron; les pedí que me ayudaran a recolectar partes del cordero, pan sin levadura y sangre del animal para los egipcios. Por obvias razones, no le dijeron nada a Moisés, se enfurecería conmigo. Al atardecer, ya había mas de 30 fardos con todo lo necesario cerca de la fuente.

- ¿Segura de que van a venir? - cuestiono Nadab.
- En mi visión del futuro había varias casas con la marca de sangre en sus puertas, se que vendrán... aunque no se cuantos realmente - dije, de repente percibí su aroma - Están llegando.
Justo como dije, los egipcios llegaron; eran como 40 hombres, todos representaban a una familia con hijos y/o nietos. Los chicos repartieron los fardos a casi todos, quedaba un hombre mayor y no habíamos quedado sin fardos.
- No puede ser, tiene que haber uno - me estaba desesperando ante la negativa cuando vinieron dos personas con lo que necesitaba - Assir, Elcana.
- Nos enteramos de que estabas reuniendo las cosas para el ritual y... quisimos contribuir - dijo Assir mostrando el fardo mientras que su hermano tenia la sangre.
- Gracias a Dios, el necesita una - dije señalando al hombre, ellos le dieron las cosas y se fueron - ¿Todos saben lo que tienen que hacer? - pregunte, nadie hablo - Vayan a sus casas y preparen todo, la plaga viene esta noche. Que Dios proteja a sus hijos.
Los egipcios se fueron tan pronto como vinieron; pude ver una mezcla de decisión y duda en sus ojos, solo espero que no se inclinen por la segunda.
- Rachel - dijo Moises acercándose a mi, estaba molesto - ¿Como es eso de que le contaste a toda la ciudad sobre los corderos?
- Sabes que el rey puede enterarse, ¿no? - dijo Aaron, también molesto.
- Para su información, el rey ya esta enterado y no por mi, por eso distribuí la noticia - dije contraatacando - Estoy tratando de salvar la mayor cantidad de niños, ellos no merecen pagar por la necedad del rey.
- Tienes razón - dijo Moisés suavizando su rostro - ¿Estas lista para esta noche?
- Lo tengo todo planeado - dijo un poco nerviosa - Recen por mi, ¿si?
Los dos asintieron y fui a mi casa; ase el cordero, pedí hecho el pan (porque el mio me sale fatal), puse los platos en la mesa y pinte la puerta con la sangre.
- Espérame aquí Keik, voy por unas amigas y vuelvo - dije para ir al almacén y usar el pasadizo secreto.
Continuara...

La chica de los ojos vendados Donde viven las historias. Descúbrelo ahora