- ¿Para que preguntas? Solo déjala - dijo Bankenmut, lo que dijo Amenhotep dejo a muchos con la boca abierta.
- Se que mi padre me matara por esto pero... llévala a palacio para que reciba atención medica del Sumo Sacerdote - ordeno el príncipe con sumo nerviosismo.
- Enseguida, señor - dijo Ikeni tomando en brazos a Rachel.
- Sabe que al soberano no le gustara, ¿verdad? - susurro Bankenmut a Amenhotep.
- Tendrá que aceptarlo, solo espero que el entienda mis motivos - respondió suspirando profundamente.
Aten solo podía mirar como se llevaban a su cuñada sin poder hacer algo al respecto, solo ir a casa sin saber como decírselo a su esposa. Al llegar...
- Mira, mi amor, ¿no es verdad que Meushar se ve mas guapo vestido así? - dijo Elena con una sonrisa para ver a su marido, la cual se borro al ver su expresión - Cariño, ¿que pasa?
- El príncipe acaba de ser rescatado y fue a palacio, no parece herido pero... - dijo Aten pero no pudo terminar porque la puerta se abrió revelando a Heru y Madu junto con sus esposas.
- Aten, ¿lo viste? Llevaron a una esclava a palacio para ser atendida después de que se desmayo por la perdida de sangre que tuvo al regresar de rescatar al príncipe, es increíble - dijo Madu sorprendido, luego desvió la vista a Meushar - Por cierto, que bien se ve con esa ropa.
- ¿E-Esclava? - dijo Elena en shock - Aten, dime que no es ella.
- Lo lamento, cariño - dijo Aten bajando la mirada.
- ¡No! - dijo Elena cayendo de rodillas - ¡Mi hermana, no!
- Amor, tranquila - dijo Aten abrazándola con fuerza.
- Lo lamento tanto; si hubiera sabido quien era, hubiera tratado el tema con mas tacto - se disculpo Madu.
- No te preocupes, amigo; esas cosas pasan - dijo Aten, el se paro cuando su esposa decidió hacerlo.
- ¿Que fue lo que paso? - dijo Elena con la voz rota.
- Rachel regreso herida; camino a Egipto, perdió sangre y se desmayo en la calle. El príncipe exigió que fuera atendida por el Sumo Sacerdote, ella estará bien - dijo Aten tratando de calmarla, la puerta se abre nuevamente y alguien entra.
- Elena - dijo Jocabed, Elena corrió a abrazarla.
- ¡Jocabed, mi hermana... mi hermana...! - dijo Elena muy angustiada.
- Lo se querida, vine en cuanto supe. Todo estará bien, ya lo veras - dijo Jocabed consolándola.
Continuará...
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La chica de los ojos vendados
RandomAclaraciones: para leer esto tendrías que ver la serie de "Moisés y los 10 mandamientos" en Telefe. La portada no es mía, la saqué de Internet. Una persona inusual se cruza en el camino del príncipe Amenhotep y su vida cambia para siempre, tanto...