- Yo sabia que estabas arrepentida de lo que paso... que te sentías culpable... pero ahora se que tu dolor era mas grande del que imaginaba... ahora puedo entender mejor tus motivos... y lamento tanto que hayas cargado con este peso tu sola - dijo Jairo, Rachel retiro sus manos.
- Infelizmente o afortunadamente, existían mas personas que cargaban con este secreto y me apoyaban... ese susto que pase me hizo entender lo peligrosa que era nuestra amistad en ese momento... pero ya no quiero perder mas tiempo - dijo Rachel tomando sus manos esta vez - Se que es muy osado de mi parte y tengo que pedirle permiso a tu padre pero... quiero que cuando partamos... tu y tu familia vengan con nosotros.
- ¿Lo dices en serio? - dijo Jairo conteniendo su emoción.
- Egipto no sobrevivirá, con el tiempo las personas se irán a otros reinos y se convertirá en una ciudad fantasma - explico Rachel - Si quieres comenzar de cero tu vida, quiero que sea al lado de mi pueblo.
- Querrás decir nuestro pueblo - dijo Jairo con vigor - Soy medio hebreo por parte de mi madre y tu eres mi mejor amiga... me iré contigo.
- ¿En serio lo dejaras ir, papa? - pregunto Ana, ambos voltearon a verlo.
- Solo no... los tres nos vamos - dijo Apuki, recibiendo un abrazo de su hija - No tengo nada que hacer aquí.
- Me alegra mucho oír eso - confeso Rachel.
Mientras, con la familia de Aaron...
La cena era en absoluto silencio; Aaron estaba sumido en sus pensamientos (por no decir recuerdos) y su familia no se atrevía a mencionar el tema.
Flashback
- Mama, ¿que le pasa a mi hermano? - pregunto la pequeña Ana señalando a su hermano.
Jairo comenzó a temblar mucho, sus labios se pusieron morados y su rostro palideció. Pasados unos minutos, dejo de moverse.
- ¿J-Jairo? - tartamudeo Judith.
- No puede ser - dijo Aaron tomando su pulso pero no sintió nada, luego puso su mano en la boca del niño y nada. Entonces los miro y dijo - Esta muerto.
Judith cayo de rodillas con un grito ahogado, Rachel se acerco a su amigo y rompió en llanto mientras que Apuki lloraba en silencio.
- ¡Dios mio, no! - dijo Rachel elevando sus manos al cielo con la esperanza de ser escuchada - Dios, ten misericordia; te prometo hacer mejor mi trabajo, convertirme en Jefe de esclavos de ser necesario pero te pido que lo regreses.
Continuara...
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La chica de los ojos vendados
RandomAclaraciones: para leer esto tendrías que ver la serie de "Moisés y los 10 mandamientos" en Telefe. La portada no es mía, la saqué de Internet. Una persona inusual se cruza en el camino del príncipe Amenhotep y su vida cambia para siempre, tanto...