La chica de los ojos vendados

Extra 2

POV Rachel
Pobre del rey, perder a su hermana fue un golpe tan duro para el y estoy casi segura de que el sabe que no fue por causas naturales.
- Con permiso, mi rey - dije para subirme a su cama, detrás de su espalda y pasar mi mano por su brazo - Lo lamento mucho.
- Henutmire... de verdad lo siento - dijo el rey llorando, creo que no sabe que estoy aquí.
- No es su culpa - en parte lo es pero no puedo decirle eso - ¿Como iba a saber que esto iba a pasar?
- Yo pude haberlo evitado, ¿no? Si no la hubiera dejado volver - lo sabia, sabia que se había dado cuenta.
- Lo hecho, hecho esta, majestad - dije para consolarlo - Lo importante ahora es que se levante.
- No puedo hacerlo... siento que estoy hecho pedazos - conozco ese sentimiento, se lo difícil que es.
- Yo también lo estaba cuando perdí a mi madre... pero si yo pude levantarme siendo una niña, usted también puede - dije haciendo que fijara su mirada en mi - Egipto esta tan destrozado como usted, ellos necesitan a un rey fuerte que los ayude a levantarse, no que llore con ellos. Necesitan saber que su soberano esta ahí para apoyarlos, para hacerse cargo de ellos.
- Tienes razón, Rachel - dijo el rey reincorporándose - No puedo cerrar los ojos y pretender que esto es solo una pesadilla, tengo que atender mi reino.
- Ese es el rey que yo conozco - dije dándole palmadas en la espalda - Ahora vaya y encárguese de ellos, yo me hago cargo del resto.
- Gracias por el apoyo... y los consejos - dijo el soberano retirándose, yo también fui a atender mis asuntos.

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Los preparativos de embalsamamiento ya se realizaron, los reyes están llevando su cuerpo a su tumba y yo estoy con el resto de los demás hebreos con una flor en la mano. El rey se detuvo a pelear con Moisés y yo tuve que interferir.
- El no tuvo la culpa de nada - dije indignada - Yo trate de advertirle, ¿recuerda? Le dije que la llegada de una mujer malvada traería la desgracia a palacio.
El sabe que tengo razón, que se lo dije y no me hizo caso. Se limito a mirarme con mala cara.
- Si no quiere que vayamos esta bien, pero al menos permita que Moisés se despida como se debe... tal vez no tenga su sangre pero para ella, Moisés era su hijo - dije, el rey puso cara de "Estoy pensando pensativamente"
- Solo Moisés puede venir - dijo el rey finalmente, Yo le di mi flor y susurre...
- Que Dios este contigo.
Continuara...