A TRAVÉS DEL TIEMPO

TENTACIÓN

Los días pasaron y Saori tenía momentos buenos, pero en ocasiones se sentía muy débil, no quería comer, solo deseaba estar acostada; esta actitud comenzó a preocupar a Ikki y a Seika, que eran lo que mas cerca permanecían de ella.

Cuando Saori se sentía bien se la pasaba con Seiya cuidándolo ahora que tenía avances y ya no estaba acostado, leyendo algo para estimular su mente; ella amaba hablarle para sentir que estaba con ella, que en realidad no la dejaría sola nunca. Ese día la pelilila esta leyendo un libro de poemas a su amado, este oía atento sentado en una silla de ruedas; mientras ella estaba en una silla a un lado; pronto Saori se recargo en el hombro de su caballero, dejó el libro a un lado para abrazarlo y susurrarle al oído como acostumbraba él antes.

-Espero te haya gustado lo que leí porque lo escogí para ti especialmente, quería que supieras cuanto te amo y cuanto desearía que estuvieras bien. Te amo.-Dijo antes de plantarle un beso en la boca.-¿Quisiera que me respondieras algo?¿Estas dispuesto?-La mirada de Seiya estaba perdida como otras ocasiones pero se levanto levemente para verla.-¿Sentiste lo mismo que yo aquella ocasión que yo estaba desnuda frente a ti?-Lo miro detenidamente esperando una respuesta, pero la mirada de su caballero se había perdido de nuevo; Saori no pudo alejar sentimientos de frustración; pero sin esperar Seiya levanto la mirada para fijarla sobre la de ella, esta lucía llena de amor igual que antes, de la misma forma que lo hizo en el momento en que la salvo de Jamian y los cuervos; la pelilila se acerco a él para besarlo y ver su reacción, este tardo unos segundos antes de meter su lengua a la boca de la chica, su beso fue subiendo de intensidad hasta que alguien toco a la puerta.

-¿Quien es?-Saori luego de separarse se arreglo un poco.

-Soy Ikki, perdón si te interrumpí o te desperté pero queríamos ver si puedes ayudarnos con unos caballeros rebeldes.-Saori se levanto de la silla para ir con Ikki, pero antes se acerco a Seiya.

-Voy a ir con él, intentaré no tardar para continuar con lo que estábamos.-Las últimas palabras las susurro en su oído, depositando un tierno beso en su mejilla.

Saori salía por primera vez en bastante tiempo, para que nadie dijera nada la diosa traía puesto un vestido entre azul  e índigo claros, de tirantes, con unos toques plisados en la parte de arriba; el vestido era sumamente holgado para ocultar su vientre y le llegaba a los pies, los cuales estaban cubiertos por unas lindas balerinas azules. La diosa llego seguida por el caballero de fénix, quien era el encargado del Santuario; en cuanto ella hizo aparición todos la reverenciaron.

-¿Cual es el problema?-Saori sonaba autoritaria.

-Athena estos caballeros querían organizar un motín en su contra, debido a que aseguraban que no se encontraba aquí.-Ikki hablo primero para informar a la chica.

-Bueno la razón por la que no he hecho acto de presencia es simple, y espero que todos lo escuchen bien; yo he tenido problemas de salud, los cuales requieren de un reposo total para mi recuperación. A mi me hubiera gustado no deslindar me de mis obligaciones pero es mi salud contra estas, por eso opté por cuidarme y luego atender lo que me corresponde, pero veo que eso no es suficiente para ustedes, quizá prefieran que mi vida se ponga en peligro.-Todos los presentes de inmediato negaron, con la cabeza y algunos en voz alta.

-No Athena, ese jamas fue nuestra intención.-Uno de los hombres que era juzgado decidió defenderse.

-Caballeros les pido un poco de consideración con mi estado de salud, les reitero que una vez que estos mejoren yo personalmente me encargaré de mi Santuario pero por ahora les pido que me apoyen. A propósito si ustedes consideran que tienen arrepentimiento por lo sucedido yo olvidaré por completo sus faltas, pero sino es así tendrán un castigo inmediato.-Ikki y Marin estaban sorprendidos por la actitud de la diosa, pero lo atribuyeron al embarazo; por su parte los hombres que armaron el alboroto no dijeron nada.-Vaya no dicen nada entonces Ikki elige el castigo mas adecuado para ellos, pero se considerado.-Luego de esas palabras Saori dio media vuelta y se retiró dejando a todos sorprendidos y a fénix con una gran sonrisa malévola.