Ya no eran solo días ya era casi un mes el que había pasado desde que Saori viajo al santuario, a pesar de que ella se había encargado de hacer creer a los santos de oro que ya no se sentía mal aun continuaba con esos mareos, pero en menor cantidad; intentaba no poner en riesgo la situación para que no fueran a descubrir su secreto aunque en ocasiones ni siquiera deseaba levantarse por los malestares solo le quedaba rezar para que todo marchara normal.
Por esos días el Santuario comenzó a sentirse mas tenso, de pronto se percibía una presencia maligna por esos lugares. La guardia por parte de los dorados se reforzó, así como algunos caballeros de plata que se preparaban para defender el Santuario; no obstante a pesar de la orden se podían visualizar algunos guerreros de bronce en aquel lugar, sobre todo la presencia de uno que causo varios problemas antes de hacer acto de presencia del todo.
-¡Athena un caballero de bronce ha entrado al Santuario!-Le informo uno de los guardias del exterior a la diosa, pero aunque esta intento averiguar quien no conseguía respuesta hasta que la verdad llego ante ella.
-¿Me estabas buscando?-Un Cosmos ardiente como el fuego se hizo presente y antes de que alguien atacara a dicho portador la diosa se interpuso.
-Ikki,¿que haces aquí?-La pelilila reconoció enseguida ese Cosmos, con el cual ya se había relacionado por bastante tiempo.-¿Que no sabes que cualquier caballero de bronce tiene prohibida la entrada a este lugar?
-¿Entonces que hacen Jabu y los demás aquí?-Tanto Athena como el fénix parecían estar en constante lucha por tener la razón.
-¿Cual es tu propósito aquí?-La diosa prefirió ser mas clara si eso era lo que deseaba su caballero.
-Saori no se por que no deseas que mis amigos vengan pero permite me estar a tu lado para protegerte, se que algo negativo se aproxima y nada me haría mas feliz que acabar con eso.
-Ikki, yo decidí que ustedes ya habían hecho demasiado por nosotros, por mi mas que nada. Ikki ya es momento que ustedes descansen y que nosotros seamos los que luchemos por nuestro mundo.-Las palabras de hace un momento no se parecían a las que ahora eran escuchadas por el fénix, la diosa parecía mucho mas humana, sonaba como Saori.
-¿Y crees que tienes el derecho de decidir por nosotros?-A pesar de los esfuerzos de la pelilila su caballero no cedería ante ella.
-Si deseas quedarte puedes hacer, pero te encargaras de la protección de los alrededores del Santuario; de mi protección se encargaran los dorados. Ve con Shaina y los demás para ayudarlos, o al menos para saber que lado necesita ser reforzado.-La chica conocía ya bien al caballero como para saber su siguiente movimiento.-Ikki si ves a tus compañeros me temo que el intentar entrar es considerado un delito y debe ser castigado.-Ikki no dijo nada mas pero antes de irse miró a la chica que tenía al frente y comprendió lo que sentía.
En cuanto Ikki salió de la habitación Shaka hizo acto de presencia, quien no dudo en presentarse ante su diosa al sentir el Cosmos de un amigo que ahora tendría que ser considerado adversario.
-¿Ocurre algo Athena?
-Nada Shaka, ahora Ikki estará con nosotros como un refuerzo en los alrededores.
-¿Eso significa que no permitirás que pelee?
-Así es prefiero que se involucre lo menos posible.
-Sabe que él no se quedara fuera y sus compañeros menos.-Esas palabras recorrieron todo el cuerpo de la diosa dejando a su paso escalofríos, ella sabía que las palabras de Shaka eran ciertas pero no deseaba que se cumplieran y aun deseaba que un milagro ocurriera.
-Lo se Shaka, pero lo hago por su bien aunque no lo entiendan.
-O se molesten.-Cada palabra de Shaka sonaba como una campana en el interior de la pelilila que le causaba molestias.
-Shaka,¿ entiendes mi razones?-Él asintió sin decir ni una palabra.-¿Crees que esta mal, querer protegerlos?-De nuevo el rubio no dijo nada, solo para comprobar un poco lo que ella se temía y lo que sabía que terminaría por molestarlos.
-Ellos deben entender que hay ocasiones en las que uno ya ha luchado suficiente, sin embargo eso no significa que tengas que detenerte o que debas rendirte, si en tu espíritu no esta esa opción solo queda seguir adelante enfrentando lo que se ponga enfrente y esperar a que resultes victorioso.-Esas fueron las últimas palabras del caballero de virgo antes de salir de la habitación.
Mientras tanto en Japón Seiya ya iba en camino al Santuario, recién había dejado el orfanato para partir en busca de su amada; para mala suerte de este la chica que vivía en este lugar le había recordado la promesa que había profesado el pegaso antes de partir a las doce casas, provocando cierta molestia en este; al inicio prefirió no hablar sobre el tema pero luego de días ella le insistió hasta que por fin logro obtener una negativa de este para informarle que su interés había cambiado y ya no podría cumplir lo acordado; aunque en un principio ella se molesto luego entendió que ese no era el fin.
Por su parte Hyoga también había dejado Siberia para ir al santuario luego de sentir un Cosmos de esa categoría, pero no olvidaba que eso había llevado a que dejara a Eri aun esperando en lo frío de Rusia a que regresara por ella y cumpliera la promesa que solo un día atrás había hecho ante la tumba de su fallecida madre; esos recuerdos ayudaban al cisne a desear con mas ansias volver a su lugar natal, hasta que unos hombres intentaron lastimarlo.
En Rozan Shiryu acababa de percatarse de lo que ocurría por lo que también vio como su maestro desaparecía, agregando a esto un grupo de hombres irrumpió en ese lugar lastimando a Shunrei; Shiryu pudo defenderla pero tuvo que dejarla para ir al Santuario. Por su parte Shun aun estaba en la mansión recordando a su hermano en el tiempo en que intentaba alejarse de este lugar el mayordomo de la Srta. Kido no se lo permitió atacándolo en vano, ya que fue fácil para Andromeda evadir su ataque; pero cuando creyó que todo estaba bien otro grupo de hombres intento detenerlo, a pesar de ello él los derroto rápidamente y emprendió su viaje a Grecia.
Entre tanto en el Santuario la gran mayoría de los caballeros comenzó a sentir una energía negativa que invadía todo el lugar, en poco tiempo los dorados fueron viendo cambios tanto en el ambiente como en las doce casas; el primero en darse cuenta fue Mu por ser el que esta al principio, pero jamas espero encontrase con que uno de esas presencias que afectaban el Santuario sería precisamente quien fuera el anterior Patriarca, junto con dos de sus compañeros fallecidos; él no podía creerlo pero ahí estaban frente a sus ojos. Pronto la pelea comenzó, para desgracia del caballero de aries eran tres contra uno hasta que otro Cosmos hace acto de presencia para ayudar a lemuriano; sin embargo es este personaje alguien que complicara la situación.
ESTÁS LEYENDO
A TRAVÉS DEL TIEMPO
FanficEsta historia es un fanfic acerca de Saori y Seiya, la historia comenzara desde el momento en que termina la guerra contra Poseidon .