A TRAVÉS DEL TIEMPO

LA FIESTA

Luego de la boda de Hyoga y Eri, los invitados se prepararon para gozar de la fiesta; sin dudarlo la mayoría se paró a bailar, tomar y conversar, con excepción de los novios que fueron a saludar a todos; para desgracia de la novia también debía de hablar con las asgardianas.

-Felicidades Hyoga.-La hermana mayor no sonaba emocionada pero debía ser cortes, mientras Flare ni siquiera se acercó solo bebía una copa de champagne.

-¡Gracias Hilda, me alegra que tanto tu como tu hermana hayan venido!-Por su parte el cisne si se veía animado.

-¡Muchas felicidades Hyoga y Eri!-La diosa no evitó abrazarlos.

-¡Gracias Saori!-La feliz pareja respondió al unísono.

-Athena lamento interrumpir pero vengo a informarle que una mujer acaba de llegar y desea entrar.-Un guardia apareció de repente a un lado de la pelilila para avisarle.

-¿Una mujer?Yo no espero a nadie.-Por mas que lo pensaba no le encontraba lógica.

-¿Que te pasa Athena viste un fantasma?-El dios del mar se colocó cerca de los novios.

-No, es solo que el guardia me dice que una mujer llegó al Santuario pero yo no espero a nadie.

-¿Oye dime si es rubia?-Julian se dirigió al guardia, quien solo asintió.-¿Ojos azules?

-Si, asi es.-El guardia no entendía con claridad las palabras de aquel hombre.

-Ups, creo que viene conmigo solo que se atrasó un poco.-El peliazul río nerviosamente.

-¿De quién se trata Julian?-La diosa se puso seria.

-No es nada malo, solo se trata de Thetis; ella también trabaja para mi.-El peliazul parecía muy tranquilo.

-Espero que no trames nada Julian, porque estas en mis dominios.-La pelilila amenazó a su invitado.-Pero puede pasar.-La diosa lo dijo mas para el guardia que para Julian.

No paso mucho antes de que el guardia escoltara personalmente a la rubia hasta la fiesta, donde sin esperar Julian se dirigió hasta con su marina quien traía un vestido rojo muy sensual, este tenía los hombros descubiertos dejando un profundo escote pero sin llegar a verse vulgar, el resto estaba completamente ajustado a su curvilínea figura terminando en lo que se conoce como cola de sirena; Thetis no vaciló en acercarse a su jefe y reverenciarlo.

-¿Thetis?-Kanon divisó a la mujer desde su posición al lado de su hermano.

-Hola Kanon.-La rubia lo miró de reojo.

-¿Te trajo Julian?-En ese instante Sorrento apareció de pronto a un costado de su dios, lucía molesto al tiempo que veía a Kanon.

-No tenía idea de que a Athena le gustan rejuntar basura.-Sorrento aun miraba de forma maliciosa a Kanon.

-Hola Sorrento.-Kanon tampoco sabía sobre la marina.

-Serán peras o manzanas, pero no deseo que la paz se rompa así que Sorrento, Kanon y Thetis compórtense.-La pelilila sonaba muy seria.

-Perdón Athena, no deseaba molestarla. Y tenga por seguro que no tendrá quejas de mi parte en tanto me permitan bailar con la hermosa sirena que vino esta noche.-El ex dragón marino miraba a Thetis de forma muy seductora y por supuesto ella le devolvió la acción.

-Me encantaría.-La rubia no dejaba de observar a Kanon, pero sin pensarlo le extendió su mano.

-Oye,oye te la llevas y aun no la saludo.-A pesar de que Julian intentó detener a su ex marino, la pareja ya se había alejado.