A TRAVÉS DEL TIEMPO

AL FIN MARIDO Y MUJER

-¿Hay alguien que se oponga a esta boda?-El sacerdote optó por mencionar las palabras claves para generar tensión en los invitados.

-¿Sacerdote?-Afrodita habló causando la impresión de todos.-¿Podría saltarse esa parte?

-¡Si, ya hace hambre!-Milo la respaldó, causando la risa de todos.

-¡Ah, Milo!-La pelilila colocó su mano sobre su frente.

-¡Yo no tengo hambre pero ya va siendo hora de que Saori sea mi esposa oficialmente!-Seiya lucía inquieto.

-¡Si el Olimpo estuviera aquí ya se habría opuesto!-Todas las miradas se dirigieron a Poseidón con molestia.-¡Pero no están aquí así que pueden continuar!-Julian se encogió de hombros.

-¿Puedo continuar?-Hasta el sacerdote se estaba hartando de tantas interrupciones.-Si no hay nadie que se oponga a esta boda, yo los declaro marido y mujer. ¡Puede besar a la novia!-Antes de que el sacerdote terminara esas palabras el moreno ya había tomado por la cintura a la diosa para besarla, beso que obviamente fue correspondido por esta y que varios segundos causó que ambos se olvidaran de los presentes.

-¡Bueno ya estuvo bueno de besos!-Aioros gritó cruzado de brazos desde su asiento.

-¡Perdón!-La pelilila tenía sus mejillas encendidas.

-¡Felicidades!-Fueron sonando en general en todo el lugar, seguido de abrazos a la pareja.

-¡Espero que seas muy feliz mi vida!-Aioros apretaba con demasiada fuerza a su hija.

-¡No me voy a ir de tu lado!-Saori se esforzaba por liberarse de los brazos del sagitario.

-¡La vas a asfixiar!-Seiya apareció para intervenir auxiliando a su mujer.

-¡En cuanto a ti, Seiya estas bien advertido!-Aioros no bajaba la guardia.

-¡Relanjese ahora son familia!-Saori unió al caballero de bronce y oro en un abrazo.

-¿Van a venir?-Hyoga les recordó a los tres que todos los demás ya estaban en el área de la fiesta.

A petición del escorpión la comida fue la primera en servirse, aunque no deseaban admitirlo la mayoría tenía hambre; inclusive los hijos de los recién casados comenzaban a sentir vacío su estómago.

-¡Ok me parece bien!-Saori aprobó que trajeran la comida aunque sus hijos no comerían lo mismo que ellos.-¡No, mi amor!¡Tú no puedes, ni debes comer eso!-La diosa detenía la manita de su hijo.

-¡Bueno es que ya tiene hambre!-Seiya apoyó a su niño.-¿Verdad que quieres que tu mamá te dé de comer?

-¡Claro para eso prepare varias mamilas!-La pelilila se levantó para buscar algo justo bajo su asiento, al encontrarlo sacó una mochila con todo lo indispensable para un bebé.

-¡Que precavida eres, mi princesa!-Las últimas dos palabras fueron susurradas en el oído de la pelilila seguido de un beso en la mejilla.

-¡Ya ves, una mujer siempre debe de tener todo a la mano por si se ofrece!-Mientras Saori alimentaba a su hijo el caballero jugaba con su hija.

Cerca de media hora posterior a eso June se acercó a la mesa de los novios para indicarles que ahora debían de bailar, tanto Seiya como Saori estaban consientes de ello pero sentían un poco de vergüenza por pensar en hacerlo.

-¿Es muy necesario?-Seiya buscaba como librarse.

-¡Para eso les pedimos que nos dijeran de una canción que pudiera describir su relación!-June alzó un poco la voz llamando la atención del resto.