A TRAVÉS DEL TIEMPO

CONFUSIÓN

Saori no podía creer lo que veía, Seika e Ikki estaban besándose; de pronto a su mente llegaron muchas cosas, ya que solo habían pasado unos días juntos y verlos así era increíble; opto por retroceder con precaución pero Tatsumi la detuvo antes de que chocaran y por esto Saori gritó tan fuerte que espanto a los cariñosos, quienes al verla se separaron inmediatamente.

-Saori no es lo que crees.-Ikki intento excusarse pero la pelilila estaba mas ocupada recuperando el aliento luego del susto.

-¡¿Pero que creen que estaban haciendo?! ¡Este es un lugar sagrado!-Tatsumi alzó la voz tanto que de nueva cuenta la diosa salto asustada.

-Oye la vas a matar de un susto, ten cuidado pelón.-Ikki enojado tomó a la pelilila por los hombros, pero esta no lucía muy bien, además tenía la mirada perdida.-¿Saori estas bien?-De pronto la diosa sacudió su cabeza como si tratara de alejar algo de ella.

-¿Perdón dijiste algo?-Aun Saori lucía confundida.

-Mejor ven conmigo, tienes que descansar.-Seika se acerco a la chica para llevarla a la recamara.

Una ves que estuvieron ahí, la recostó sobre un sillón que estaba al lado de la ventana y planeaba irse sin que le hicieran preguntas pero fue tarde; porque Saori reacciono agarrándola por la falda.

-¿Te ocurre algo linda?-Seika con voz tímida pregunto.

-Crees que se me olvido lo que vi. ¿Me puedes explicar?-Saori ahora sonaba molesta.

  -Ummmm, bueno yo...

-¡Seika por Dios hace solo unos días que están saliendo y ya se besan! ¿Que es lo que piensas?-Ahora si parecía que le iba a dar un ataque de histeria a la pelilila.

-¡Saori!-Ikki entró a la habitación.

-¡Ahhhhhh!¡Todos quieren matarme de un susto!-La pelilila estaba ya gritando.

-¡Hey! Saori tienes que saber que Seika y yo estamos intentando algo.-Ikki con la mayor serenidad posible se dirigió a la diosa histérica.

-Ok, por mi esta bien pero no tienen que besuquearse de esa manera por todos lados.

-Saori, lo sentimos nos dejamos llevar por lo que sentimos. Pero prometo que no volverá a ocurrir.-Seika se disculpo con la cabeza baja y sonrojada.

-No tengo ningún problema en que estén saliendo, en que se besen; pero no tan así escondiéndose como si fuese un pecado lo que hacen y razonen un poco antes de hacer cualquier tontería o terminaran como yo.-Saori terminó tocándose el vientre.

-No te preocupes Saori, soy muy joven para tener hijos yo no tengo ni el menor interés en embarazar a Seika.-Al escuchar eso la hermana de Seiya lo miro con mucha sorpresa.-Bueno no ahorita.-Eso cambió la expresión de la chica, por una sonrisa.

-¿Vaya que le hiciste Seika?-Saori nunca pensó que vería al fénix cambiando de parecer para alegrar a una chica.

-¿De que?-Seika volteo asustada.

-Velo nada mas, si esta tirando la baba por ti. ¡Bien hecho!-La pelilila le propino un codazo ligero a  su cuñada, seguido de un guiño.-Ahora solo falta ver que dice Seiya.-Todos pusieron la misma cara que la diosa al imaginar lo que haría pegaso cuando se entere.

-Pero él no tiene nada que decirme si va a formar una familia contigo. Además yo soy mayor.-Seika levanto el rostro en señal de superioridad.

-Lo se pero tu hermano es terco, no le va a agradar mucho.-Saori parecía pensar bastante la situación.

-Bien te juramos que no volverás a vernos de esa forma de nuevo y también que no haremos tío a Seiya tan pronto. ¿Ya podemos irnos?-Saori aplico una mirada amenazante al fénix.-De acuerdo, es solo que a penas íbamos a ir a cenar. ¿Quieres venir?

-No tengo ganas de salir y creo que no es lo mejor pues ya se me ve la panza. Supongo que tendré que recluirme en cuatro paredes para que en el Santuario no digan nada, sobre todos los caballeros.-Saori cambio el semblante a uno mas triste.

-No te preocupes Saori, tu eres la diosa y no tendrían por que decirte algo.-Seika intento animarla.

-No esta bien, vayan ustedes. Yo me daré una ducha y luego me dormiré estoy cansada.

-Esta bien. Es mejor que descanses pero antes debes de comer algo para mantener a ese bebé.-Ikki de un tiempo para acá era mas protector y sensible con la diosa y eso le costaba trabajo comprenderlo.

Luego de que la pareja saliera a pasear, Saori fue a la cocina por algo de fruta para comer un poco; pero debido a que se sentía con nauseas solo dio algunas mordidas antes de dejarlo por la paz. Se encamino a su habitación donde Seiya dormía plácidamente o al menos eso parecía; así que la pelilila se quedo mirando la ventana por unos segundos para luego dirigirse al baño para llenar la tina, volvió a salir y comenzó a quitarse su vestido, primero bajo los tirantes descubriendo una pequeña mancha en su hombro; entonces volteo a ver un pequeño espejo que se encontraba a un costado de ella y descubrió que no solo su hombro tenía una mancha sino también su rostro, recordando aquella niña caprichosa de antes Saori hizo un berrinche por lo que ahora estaba en su cara; mejor decidió concentrarse en su baño y terminó de quitarse el vestido dejándolo caer al suelo, sin pensarlo se dio la vuelta para juntar su ropa pudiendo observar a Seiya que ahora tenía los ojos abiertos y parecía mirarla ; un poco de saliva fue tragado por la pelilila que de pronto estaba roja como un tomate, intento calmarse e ignorar la situación pero pegaso tenía el rostro tan rojo como ella, sin pensar bien las cosas se acerco a él para comprobar lo que hacía un momento visualizo y era cierto; entonces se acerco aun mas dejando solo unos centímetros entre ambos, ella podía sentir la respiración de su caballero mas agitada y pronto sus labios se posaron de nuevo sobre los de este fundiéndose en un beso muy sensual, a penas unos segundos después Saori se retracto y mejor se metió a la bañera, para así olvidar esos pensamientos que comenzaban a inundar su cabeza. Sin embargo a pesar de sus intentos el agua tibia, el vapor y ese beso en su cabeza provocaban que su temperatura aumentara; sabía que eso no era correcto pero ella hacía tiempo que había sobrepasado lo que no tenía que hacer, aun así intento calmarse y disfrutar del baño. En solo 10 minutos la pelilila estaba limpia, salió con una toalla y descalza, por su cabeza pasaban ideas de controlarse, sin voltear hacia Seiya; como si sus pensamientos y sus acciones no se coordinaran se quito la toalla que la cubría ,quedando completamente desnuda, tomó la crema para ponerla sobre su cuerpo; dando suaves masajes pensando en cualquier otra cosa que no la llevara a malos pensamientos, todo iba bien hasta que quedo de frente a pegaso y una necesidad que desconoció la llevo otra vez a la cercanía con él, lo miro fijamente de la misma forma que él lo hacía, ella acarició su mejilla con delicadeza; la mirada de ambos no solo se había encontrado sino que además brillaba, parecía que con solo hacer eso sabían con exactitud que pensaba el otro, se inclinó para besarlo o mas bien apenas rozar sus labios; estos sabían tan dulces como las otras ocasiones, su mano bajo para tocar su pecho, deteniéndose justo en el corazón; el cual palpitaba con demasiada fuerza como cada vez que ella lo abrazaba, lo besaba, lo tocaba; por inercia su mano se deslizo hasta su parte genital que sin darse cuenta se había puesto dura, eso provoco que ella despertara de la situación dándose cuenta de lo que hacía, se levanto sin dudarlo tomo su bata y se dirigió de nuevo al baño; luego de vestirse temía salir para que Seiya no la viera, se sentía tan avergonzada pero no podía quedarse en el baño, así que salió sin mirar a Seiya, agarró una cobija que esta cerca de él pero sin mirarlo aun y como si de magia se tratara volteo solo un poco observando la mirada de este llena de melancolía, de nuevo ella se acerco tal cual si pegaso la hubiera llamado y así lo pensaba él; ahora mas que nunca él necesitaba tenerla cerca no le gustaba verla triste.

-No se que decirte, me siento mal por lo que deseo.-Quiero tenerte a mi lado abrazándome, besándome, riendo, lo que fuera es perfecto pero quiero que estés bien. Yo no deseo causarte daño y siento que es lo que planeo cada que me acerco a ti de esa forma, te necesito y no se que hacer.-Las lagrimas brotaban como si de una fuente se tratara, de repente algo presiono su corazón dejándola sin respirar, toco las piernas de Seiya con desesperación pero este no podía hacer nada y sin mas cayó inconsciente.