Capítulo 32 "¡Llega el Jefe de Familia de la Familia Novan!"

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Capítulo 32 "¡Llega el Jefe de Familia de la Familia Novan!"

La residencia de Leonardo era la más cercana a la de su hijo, Luca. Hace poco, no pudo escuchar a los asesinos y mucho menos a Alan. Pero ahora, se levantó de su asiento y sus ojos se abrieron de golpe. Con el ceño profundamente fruncido, pensó: 'Ese grito... ¡¿Venia de la residencia de Luca!?' De inmediato se preocupó por su hijo.

"¡¿Quién se atrevió a entrar en mi Familia Novan!?" Su voz estaba llena de una profunda furia, al igual que impulsada por el poder de su fuerza en el Reino Carnal Intermedio. Su voz sonó por toda la Familia Novan, alertando a todos, tanto a los guardias y sirvientes por igual que estaban dentro.

En una residencia mucho más alejada, se encontraba el Jefe de Familia de la Familia Novan, el abuelo de Luca y padre de Leonardo. Era un Experto en el Reino Carnal. Cuando se puso de pie, dio un paso hacia adelante. Pasó de estar en su residencia, ¡A estar afuera! ¡En tan solo un segundo!

¡Pero las cosas no terminaron ahí! Dio otro paso, ¡Y ahora estaba frente a la residencia de su hijo! Y con otro paso, ¡Llegó frente a Leonardo! Con una mirada afilada, preguntó: "¿Qué paso?" Como su residencia estaba mucho más lejos, no pudo oír el grito del asesino. No era que no pudiese, sino que ni siquiera pensó que alguien intentase colarse en su familia, por lo que no estaba prestando atención a sus alrededores. Por lo que solo pudo venir a preguntar lo que sucedió a su hijo, Leonardo.

Leonardo hizo una reverencia respetuosa, cuando habló fríamente: "Hace un momento, escuché un grito proveniente de la residencia de Luca. No fue su voz, y ahora mismo, Luca está afuera. Lo más probable es que haya alguien que haya entrado a nuestra Familia Novan" Los ojos del Jefe de Familia de la Familia Novan se fueron haciendo cada vez más fríos conforme escuchaba lo que decía su hijo.

Cuando su hijo terminó de hablar, ¡Desapareció!

...

A la vez, el asesino en el Reino Carnal Intermedio realizó un gesto y aparecieron dos espadas en sus manos. Con un balanceo de una de las espadas, ¡Más de la mitad de las cosas dentro de la residencia fueron cortadas!

'No puedo sentir el aura de esa persona... ¡Pues muy bien! ¡Destruiré todo hasta que salgas!' Alan estaba usando una gran técnica de movimiento enseñada por ese viejo en la Tierra, e incluso un Experto en el Reino Carnal le resultaría difícil encontrarlo, mucho menos alguien en el Reino Carnal Intermedio.

Pero había una gran debilidad con esta técnica de movimiento. Ahora mismo, apenas podía mantenerla algunos minutos. A lo sumo, esforzando mucho su cuerpo, podría lograr utilizar esta técnica por cinco minutos completos. Si ahora intentaba usar esta técnica por más tiempo, ¡Al menos su cuerpo podría recibir heridas serias y sus órganos podrían incluso explotar!

Para controlar esta técnica por al menos una hora, debería al menos llegar al Reino Carnal Inicial. Y para lograrla controlarla por completo, ¡Debería al menos llegar al Reino Carnal Avanzado!

¡Pero ahora era más que suficiente! Quería que el Jefe de Familia de la Familia Novan venga personalmente al ver que había caos, ¡Y ver que es lo que haría con estos asesinos!

Ahora mismo, Alan estaba en una esquina de la residencia del Joven Maestro Novan. Su frente estaba con un poco de sudor, y la mitad de un minuto ya había pasado. Estaba apretando sus dientes, pensando: '¡Maldito viejo desgraciado! ¡¿Por qué tardas tanto!?' Aunque estaba furioso por la tardanza del Jefe de Familia de la Familia Novan, veía con mucha burla como estos asesinos hacían un gran lio en la residencia del Joven Maestro de la Familia Novan.

Con una leve sonrisa burlona, pensó: 'Jaja, ¡Ya quisiera ver el rostro de ese hijo de puta cuando vea como quedo su residencia! Jajaja...' En medio de su sonrisa de burla, ¡Un aura aguda apareció en el aire! Los ojos de Alan se llenaron de seriedad, cuando pensó: 'Al fin llegó'. A la vez, se acercó lentamente a la ventana.

Quedaban cuatro minutos y medio para cinco minutos completos. Cuando faltasen cinco segundos, no dudaría y saldría de aquí aunque aún las cosas no hubiesen acabado. Un grito de profunda ira inundó todo el patio y residencia del Joven Maestro de la Familia Novan: "¡¿Quién se atreve a causar estragos en mi familia!?" Justo después de ese grito, ¡Una persona apareció dentro de la residencia!

Esta persona ya era un hombre de mediana edad, pero su rostro era solemne y la edad no podía ocultar que en el pasado había sido alguien guapo. Su pelo y barba blanca ondulaban con el viento cuando apareció. Sus ojos estaban fríos y llenos de intención de matar.

Esta persona, naturalmente, ¡Era el Jefe de Familia de la Familia Novan, Lautaro!

Ascensión del Segundo Joven Maestro Sin IgualDonde viven las historias. Descúbrelo ahora