Capítulo 130 "El único arrepentimiento"
Mientras este dentro del dominio de uno, uno podría transportarse a donde quisiera dentro de su dominio. En estos momentos... ¡Alan podía moverse libremente por el planeta, sin restricciones y con una velocidad espantosa!
Junto con su poder en la cima del Reino Santo, su velocidad, su dominio, y su habilidad más fuerte, Siete Pasos Asesinos, ¡Era prácticamente invencible en este lugar!
¡Y todavía no había desatado el verdadero poder de su dominio!
Alzó su cabeza, miró al Jefe del Clan del Clan Demoniaco, ¡Y lo señaló! Un momento después, ¡Innumerables personas traslucidas, que poco a poco se hicieron completamente visibles, aparecieron alrededor del Jefe del Clan del Clan Demoniaco!
¡Eran cientos de miles!
Alan las pudo reconocer de inmediato. ¡Estas personas que aparecieron fueron todas las que murieron a causa de él!
Aunque hubiesen muerto en la Tierra, ¡Aún aparecían aquí! Aunque Alan había cambiado de cuerpo, ¡Esencialmente seguía siendo la misma alma que la de su cuerpo en la Tierra!
Entre todas estas personas...se hallaba el Joven Maestro Novan, y todos los demás de la Familia Novan. Estaban las personas que mató del Clan Demoniaco, la mujer y Federico. Y finalmente, el más poderoso de todos... ¡¡Fue el Emperador del Continente Santo!!
Sin esperar una orden de Alan, ¡Las decenas de miles de personas se lanzaron contra el Jefe del Clan Demoniaco, quien se hallaba en retirada!
La primera persona que lo ataco era un hombre regordete. No pertenecía a este planeta, ¡Sino a la Tierra! Lo atacó simplemente con los puños...
Los ojos del Jefe del Clan del Clan Demoniaco se iluminaron y se detuvo. Sin dudar, ¡Estiró su propia mano y atacó al puño entrante del hombre regordete!
¡El Jefe del Clan del Clan Demoniaco estaba gratamente sorprendido al descubrir como esa persona era destruida luego de que sus puños chocasen!
'Como lo supuse, ¡En realidad un gran número de personas de aquí son sorprendentemente débiles!' Había estado dudoso, ya que vio como en realidad estas personas, una gran mayoría, le atacaban con puños y patadas, pero simplemente estos puños y patadas eran demasiado débiles. Y sus velocidades tampoco eran sorprendentes...
Todas estas cosas hicieron que dudase. Después de todo, estas personas fueron formadas por el dominio de Alan. Era imposible que fuesen verdaderamente débiles, ¿verdad?
'Es imposible... ¡Debe haber algún truco!' Y justo después de que pensó eso, ¡Frente a sus ojos, donde acababa de matar a ese hombre, una persona exactamente igual al hombre que mató apareció!
Y nuevamente, sin temor a nada, ¡Se lanzó y atacó con puños y patadas hacía el Jefe del Clan del Clan Demoniaco!
'¡Así que ese era el truco!' Los ojos del Jefe del Clan del Clan Demoniaco se movieron hacía todos lados. Se dio cuenta de que gracias a que se detuvo a luchar contra ese hombre, ¡Ya varias decenas de otras personas lo habían rodeado!
Justo cuando estaba por atacar, ¡Un sonido capaz de sacudir los cielos y la tierra fue escuchado detrás de él y un momento después, un dolor increíble se esparció por su espalda!
Pero antes de que pudiese siquiera gritar de dolor, ¡Una de las personas delante de él explotó y un dolor intenso cubrió su rostro y la parte superior de su cuerpo!
¡Y luego vino otra explosión! ¡Y otra!
En tan solo diez segundos, ¡Ocurrieron nueve explosiones en cadena, y los gritos infernales venían del centro de esas explosiones!
Al final, cuando el humo de la explosión se dispersó, el Jefe del Clan del Clan Demoniaco pudo ser visto por todos...
Su pierna derecha estaba despedazada, y sus dos brazos habían sido pulverizados por las explosiones. Su ojo derecho estaba cerrado, y salía sangre como si se tratase de un manantial...
Su pelo estaba hecho un desastre, y apenas se podía distinguir como el anteriormente majestuoso Jefe del Clan del Clan Demoniaco...
Ahora era simplemente... ¡Una persona casi mutilada, apenas reconocible incluso por sus conocidos más cercanos!
Incluso en ese estado, se pudo mantener con vida. El Reino Santo le proveía una gran resistencia. Pero no tenía ni la más mínima oportunidad de poder resistir o siquiera sobrevivir a las próximas explosiones...sabía que su vida estaba a punto de acabar.
Si no fuera porque Alan detuvo las auto-explosiones de estas personas y no dejo que las demás explotasen, ¡Hubiese muerto sin ninguna duda!
De repente, el rostro del Jefe del Clan del Clan Demoniaco se retorció por la ira y la furia: "¡¿Cómo puede ser posible!? ¡¿Cómo puede ser posible que una basura como tú pueda derrotarme!?" Tal vez fuese por orgullo, o por su instinto de pelea, pero en vez de retroceder, y al saber que moriría, ¡Se lanzó sin ninguna duda hacía adelante! ¡Hacía Alan!
Al menos, si moría, ¡Intentaría herirle en el proceso!
Con una voz llena de determinación, gritó: "Aunque no pueda matarte... ¡Intentaré herirte!"
Mientras se acercaba, seguía gritando: "Incluso aunque tampoco pueda herirte, ¡Moriré con honor! ¡Mi Ancestro estaría orgulloso de mí!" ¡Justo después de que dijo eso, llegó delante de Alan!
En el camino, ninguna de las personas lo detuvo. Al contrario, fue como si abriesen un camino para que pasase...
El rostro de Alan, originalmente inexpresivo, soltó un suspiro. Este hombre, este jefe de clan...tan solo quería liberar del destino que su clan tenía. Quería deshacer el sello y luchar contra el Continente Diablo y Santo para recuperar su libertad, la de su familia y su gente.
Pero al final...todo terminó de esta manera. Por una variable desconocida para ellos, llamada Alan, ¡Todo terminó en fracaso!
¡No había correcto o incorrecto!
¡No se podía culpar al Clan Demoniaco por querer salir de esta isla y volver a tener libertad! ¡Pero tampoco se podía culpar que los del Continente Santo y Diablo quisiesen detenerlos! ¡No había duda de que la naturaleza sanguinaria del Clan Demoniaco y su enorme talento dificultarían en gran medida, e incluso pondrían en peligro, la seguridad de todos los humanos en este planeta!
Alan de repente dio un paso adelante, y justo cuando llegó el Jefe del Clan del Clan Demoniaco, desató un puñetazo. Su puñetazo fue simple, sin usar el poder espiritual del entorno o su dominio, ¡Tan solo su cuerpo carnal!
Con un sonido sordo, y sin que el Jefe del Clan Demoniaco pudiese casi reaccionar ante el ataque, la mano de Alan atravesó el estómago del Jefe del Clan del Clan Demoniaco... Una parte de sus dedos se podía ver del lado de su espalda...
Los ojos del Jefe del Clan del Clan Demoniaco se opacaron casi por completo. Con una voz débil, murmuró: "Yo...lo siento Ancestro... te he fallado...no, no solo a usted, ¡Sino también a todo mi clan y mis familiares directos, quienes se sacrificaron para que podamos tener éxito! Realmente lo siento..." Justo después de que terminó de murmurar eso, sus ojos se opacaron por completo y cayó del cielo...
El único arrepentimiento que tendría en su vida este grandioso jefe de clan sería no haber podido liberar a su gente.
Hoy, en la guerra que quedaría grabada en la historia de este planeta, ¡El Jefe de Clan del Clan Demoniaco había muerto!
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Ascensión del Segundo Joven Maestro Sin Igual
ActionAlan murió, con su alma poseyendo otro cuerpo en un nuevo planeta. En este nuevo planeta, Alan tiene el estatus del segundo joven maestro de una de las grandes familias. Sigue a Alan en su camino, enfrentándose a innumerables oponentes como príncipe...