Capítulo 102 "Si yo te quiero molestar, ¡Te molestare!"

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Capítulo 102 "Si yo te quiero molestar, ¡Te molestare!"

Sentado dentro de su camarote, ¡Alan se levantó de repente y sus ojos miraron hacia su puerta, con un brillo de frialdad saliendo de ellos! Murmuró por lo bajo: "Finalmente, ¡Te tomaste tu tiempo Emperador de mierda!" Su voz no estaba menos fría que la del Emperador.

Agarró las armas con una velocidad que no era ni rápida o lenta. Luego, salió por la puerta de su camarote. Al instante, innumerables miradas se posaron en él.

Y cuando vieron las armas en su sus manos...se llenaron de horror y no pudieron evitar que las ganas de vomitar se precipitase a sus bocas. Hubo algunos que estaban mejor, ya que eran más experimentados, pero otros no pudieron aguantarlo, y junto con la muerte que habían visto anteriormente en la batalla contra el Clan Demoniaco, ¡No pudieron evitar vomitar!

Anteriormente, en la batalla contra el Clan Demoniaco, mucha gente había estado demasiada ocupada luchando por sus vidas por lo que no notó en lo absoluto a Alan recolectando 'méritos de guerra'. Pero ahora, que todo había vuelto a ser tranquilo, ¡Alan se destacó de inmediato!

Sería imposible no destacarse con esas armas empalando decenas de cabezas...

El rostro de Alan era inexpresivo al caminar lentamente hasta una esquina del barco. Pero antes de impulsarse con poder espiritual y saltar a otro barco hasta llegar al barco del Emperador, ¡La Segunda Princesa apareció, llevando una expresión indescifrable en su rostro!

Ella se acercó y antes de que pudiese decir algo, Alan le sonrió y dijo: "¿Quieres qué te lleve como antes? ¡Sé que mis abrazos son reconfortantes y cálidos!" Su voz estaba llena de burla, pero a la vez una intención oculta muy maliciosa. Alan sabía que esta muchacha no le diría nada a su padre si no la 'convencía'. Al final del día, esta chica no era su aliada, y Alan tampoco la quería como aliada o como cualquier otra cosa. En el futuro, sí le arrebataba la posición al Emperador, ¡Definitivamente habría unas altas posibilidades de que ella, como hija del Emperador, le tomase odio y quisiese vengarse de él!

Por eso no le importaba molestara e irritarla. Mientras más sentimientos así esta chica tenga hacía él, mejor.

Al llegar, el humor de Karina ya era horrible. Había estado dudando de lo que haría Alan para conseguir beneficios y recompensas de parte de su padre. Y ahora que ayudó al plan de Alan, no sabía cómo sentirse...

Pero de repente, escuchó una voz que la hizo poner más irritada y llena de furia. Alzó la vista, ¡Y su furia solo creció! La persona que acababa de hablar, llevaba una sonrisa completamente burlona en su rostro...

Ella resopló y aceleró su caminata, hasta estar al lado de él. Al llegar a su lado, ¡Ella acercó su mano al brazo de Alan! Y luego, para total sorpresa de Alan... ¡Pellizcó su brazo izquierdo tal cual lo haría una muchacha común que estaba enfurecida y molesta!

Pero las cosas no terminaron ahí. Karina levantó su cabeza hasta poder mirar a Alan, quien era una cabeza más alta que ella. Entonces, con una voz comparable a la de Oriana cuando hablaba de forma escalofriante...le dijo: "La próxima vez que quieras hacerte el gracioso, ¡No te pellizcare una vez, sino veinte! Y la próxima, ¡Te pellizcare cien veces! Y luego, ¡Mil! ¡¿Entendiste!?"

Muchas personas observaron esto y no pudieron evitar abrir sus bocas en shock. Algunos eran jóvenes nobles y conocían el temperamento de la Segunda Princesa, compuesto y refinado. Pero ahora mismo... no se veía para nada como una señorita de clase alta y noble. En cambio...se veía como una chica pequeña haciendo un berrinche...

Los ojos de Alan revelaron un brillo de duda, intentando decidir sí lo que acababa de hacer esta chica frente a él era un acto o no. Finalmente, sin poder saberlo con seguridad, suspiró y negó con su cabeza. Con una sonrisa forzada, le dijo: "Sí yo te quiero molestar, ¡Te molestaré! ¡No me importa si me intentas pellizcar un millón de veces!" Y justo después de que dijo eso, estiró su mano con la velocidad comparable a una bala... ¡Y rodeó la cintura de la chica! Entonces, para la consternación de todos... ¡La levantó y la llevó a su lado mientras saltaba a otro barco con el poder espiritual impulsando sus pies!

Ascensión del Segundo Joven Maestro Sin IgualDonde viven las historias. Descúbrelo ahora