Ascensión del Segundo Joven Maestro Sin Igual

Capítulo 105 "¡Únete a mí familia, o muere!"

Capítulo 105 "¡Únete a mí familia, o muere!"

La Segunda Princesa, Karina, suspiró y asintió con solemnidad. Aunque su rostro no revelaba nada, por dentro solo podía suspirar continuamente al pensar: 'Espero que no me haya equivocado al ayudar a Alan...' Actualmente, al ayudar a Alan, se estaba poniendo casi de enemiga de su padre. Por eso, no sabía si realmente había valido la pena o no ayudarlo...

Pero al pensar en las palabras que Alan le dijo antes, en medio de la lucha contra la gente del Clan Demoniaco, no pudo evitar que sus ojos brillasen y la obsesión de conseguir el trono lleno su mente...

Mientras ella pensaba esto, ¡No sabía que había aturdido a casi todos los presentes! Cuando asintió, fue como un trueno que impactó en las mentes de todos.

Entre la multitud que estaba viendo esta escena, uno de ellos quedo particularmente sacudido: '¡¿Cómo puede ser posible!? ¡¿Cómo puede ser que esta basura haya matado a alguien en el Reino Carnal Intermedio!? ¡¿Cómo puede ser posible!?' Había caído en un estado mental bastante lamentable. Y su rostro era igual de terrible. Esta persona era Antonio, el Joven Maestro Baker.

Estaba impactado, más impactado que todos los demás presentes. Aunque sabía que Alan no era ninguna basura, se negaba a creerlo. Con la repentina aparición de Alan, su estado de genio más poderoso en la Dinastía Santa fue arrebatado.

Gracias a la lucha contra el Clan Demoniaco, esto no se notó tanto. Aprovechando esto, en esta guerra quería ganar respeto y fuerza. No esperaba que justo después de que empezase la lucha contra el Clan Demoniaco...ya estaría tan atrás...

Entre la multitud, también había otra persona que estaba igual de sacudida que Antonio; Leonardo. Su mente estaba hecha un desastre cuando pensó: 'Este chico... ¡Su ascensión tanto en fuerza como poder son extremadamente rápidos! Podría... ¿Podría tener que ver con la masacre de mi familia...?' Al no estar completamente seguro, se quedó mirando con frialdad y dudas a Alan...

De entre todos ellos, el Emperador era el que menos sorprendido se veía. Por dentro, estaba igual de tranquilo. No era una fachada, estaba completa y absolutamente tranquilo: 'Así que es un genio hasta este grado... ¡Bien, muy bien!' Lentamente, una intención de matar casi imperceptible apareció en los ojos del Emperador, la cual fue rápidamente suprimida al decir: "Continua"

Alan observó por un momento al Emperador. Y aunque el Emperador pensó que nadie se dio cuenta de su pequeña, pero poderosa intención asesina, no podría haberse imaginado que Alan sí se dio cuenta...

No obstante, Alan no demostró haberse dado cuenta en lo absoluto. Al contrario, él sonrió 'amablemente' y continuó enumerando en qué nivel de poder estaba cada cabeza.

Finalmente, para cuando Alan terminó, todos, incluido el Emperador, aunque en menor medida, revelaron expresiones sorprendidas. Este resultado no era sorprendente. En total, fueron diez personas en el Reino Carnal, nueve en el reino inicial y tan solo una en el Reino Carnal Intermedio. Y luego, cuarenta y un cabezas eran todos Expertos en el Reino Mortal y tan solo uno en el reino avanzado.

Si alguien como el Emperador o algún jefe de familia como Aron Baker matase a esta cantidad y con esos niveles de fuerza, no serían tan sorprendentes. Pero el responsable de dichos asesinatos no era una gran figura de ese tipo. Al contrario, era la anteriormente conocida basura, el Segundo Joven Maestro Blay. Y al ver que esta persona, la cual ellos consideraron una basura por diecisiete años, en realidad era un genio capaz de sacudir el mundo... ¡¿Cómo no podrían no estar sorprendidos!?

Karina siempre afirmaba las palabras de Alan, por lo que nadie dudaba. Y el Emperador mismo tampoco dudaba de la palabra de su hija. No porque fuera su hija, sino porque sabía que Alan era peligroso luego de ver su estallido de intención asesina cuando vio a su padre y luego de verlo golpear a su hijo tan impunemente.

Aunque su rostro no lo revelo, tomó una decisión en su corazón. Ahora, vería si Alan realmente quería aliarse con su familia o no. Si no quería, para cuando las cosas con el Clan Demoniaco terminen, ¡Definitivamente haría que asesinen a Alan! Era demasiado peligroso si lo dejaba estar. Si lo ataba a su familia, no sería necesariamente alguien peligroso. Al contrario, podría ser algo bueno para su familia. Pero si no quería... ¡El Emperador sabía que dejar con vida a semejante genio podría perjudicar la vida de cualquiera de sus hijos que tomase el trono!

Guardándose estos pensamientos para él mismo, dejó salir una sonrisa al decir: "Realmente impresionante. Todos, incluido yo, te hemos subestimado. Al pensar en cómo te subestime hace tantos años, hace que sienta un gran arrepentimiento" De repente, su rostro dejó de sonreír. Y en cambio, reveló una expresión de dolor al continuar: "Por esta razón, como disculpas por subestimarte, ¡Quiero que la posibilidad de matrimonio entre mi hija y tú se reabra!" Finalmente, para demostrar que sus palabras eran sinceras, hizo una reverencia. Aunque la reverencia no era profunda, sí que era algo impactante considerando su estatus. Incluso con personas como Aron, el Emperador no haría ninguna reverencia. Pero aquí estaba, ¡Dando una reverencia al Segundo Joven Maestro Blay!

Aunque el Emperador podría ser una persona arrogante, no era un idiota. Si podía agarrar a este chico y meterlo en su familia, aunque al final controle al Continente Santo casándose con su hija, ¡Estaría bien! En el futuro, cuando los descendientes de su hija y Alan nazcan, al heredar el talento de su padre y de su madre, ¡Definitivamente serían unos grandes genios!

Al Emperador no le importó la opinión de sus hijos o su hija. Para el, el futuro de su linaje era lo más importante. Y para él, su linaje debía gobernar por siempre el Continente Santo. Por lo que no perdería una oportunidad como esta.

Pero al igual que no era un idiota, y podía rebajarse a estos extremos para invitar a Alan a que considere nuevamente casarse con la Segunda Princesa, ¡Tampoco consideraría dos veces asesinarlo personalmente sí fuese el último recurso para detener el ascenso meteórico de Alan!

Las palabras del Emperador podían parecer amables en la superficie. Pero Alan, quien había logrado captar la intención asesina del Emperador, sabía cuáles eran sus intenciones. Para Alan, el Emperador le estaba diciendo esto; ¡Únete a mí familia, o muere!