➽ "Era demasiado joven para saber que lo tenía todo contigo"
Muchas cosas pueden pasar si tienes diecinueve años y una carrera musical en Hollywood. La vida como rockstar puede ser complicada si te enamoras de alguien que pertenece al mismo medio. P...
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MI CASA NO ES LA TUYA
Tuvo la peor de las mañanas con Beck, desayunaron en una bonita cafetería y él la acompañó todo el tiempo que duró su presentación en vivo, además de haber sido entrevistada por Craig Ferguson, de The Late Late show, le hizo prometer que harían algo en el futuro.
Beck estuvo todo el tiempo molestándola con sus chistes de doble sentido y sonrisas coquetas, era tan odioso. En el fondo, Alexis sabía que si no estuviesen en estas circunstancias serían grandes amigos.
En fin, su mañana fue un asco.
Eran las tres de la tarde en California, ella se secaba el cabello con una toalla y veía la televisión en su sofá, tenía un bebida dietética en la mesa sin abrir y empezaba a sentir hambre, pero esperaba a que llegara la cena para comer.
Y el timbre sonó. Atendió y por el lente vio a Justin, le abrió y como era clásico en él, entró como si se tratara de su propia casa.
—Apenas fue el almuerzo ¿Qué haces en pijama? —le dijo el rubio frunciendo el ceño, traía una camiseta blanca y jeans cualquiera, se veía demasiado simple para su gusto, Justin podía ser un poco engreído con su apariencia.
—Iba a dormir, ¿Bien? —cerró la puerta tras ella, pasando del rubio y caminando a su cocina, sabiendo que él la seguía —¿Qué haces acá?
—Tuve una pelea con Selena —confesó, oyéndose agotado y triste —, lo mismo de siempre.
—¿Qué haces acá? —volvió a decir, esa noticia ya no le sorprendía, era justo como él acababa de decir, lo mismo de siempre.
—Pelee con mi novia y necesito el apoyo femenino, ¡Y resulta que Taylor ya no abre la puerta! —se quejó cual niño pequeño, mostrando las manos y haciendo un diminuto puchero.
—Debe estar con Selena, ¿No tienes cerebro, Justin? —elevó una ceja y se burló, él entrecerró los ojos y se alzó de hombros luego.
—Como sea, solo aliméntame y dame un abrazo, —Justin le dio una palmada en el hombro y la apartó de su camino al refrigerador, de donde sacó un tarro de helado sin abrir —¡Por fin tienes algo que vale la pena comer! Había pensado en ir a hacer las compras.
—No sería mala idea, adelante —negó lentamente, con un suspiro salió de la habitación.
De vuelta en su sofá, concentró toda su mente en la pantalla, estaba comenzando a interesarse en la serie que pasaba cuando Justin se sentó a su lado, con todo el tarro en manos y solo una cuchara, tenía evidentes planes de comerse todo su helado solo.
—¿Qué hiciste ahora? —dijo ella, metiendo su dedo y sacando con este un poco de helado de chocolate —Selena solo se enoja cuando haces algo y como que metes la pata a diario —se rio sola, pese a que Justin apartaba la mirada muy triste.
