*:Tienes una celostina como novio 😬
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.Ken Sato, la estrella del béisbol japonés, era conocido por su destreza en el campo y su carisma fuera de él. Sin embargo, pocos conocían la intensidad de sus sentimientos por (T/N), su asistente y pareja. Desde que habían comenzado su relación, Ken había demostrado ser increíblemente protector, a veces llegando a ser celoso y posesivo.
Una noche, Ken y (T/N) asistieron a un evento benéfico organizado por uno de los patrocinadores del equipo. El salón estaba lleno de celebridades, empresarios y figuras influyentes. (T/N), radiante en un elegante vestido negro, estaba a su lado, sonriendo y charlando amablemente con los invitados.
Todo iba bien hasta que un joven empresario se acercó a ellos. Era alto, bien parecido, y claramente interesado en (T/N). Ken observó con creciente incomodidad cómo el hombre estrechaba la mano de (T/N), manteniendo su contacto visual por un momento demasiado largo para el gusto de Ken.
"(T/N), qué placer conocerte. He oído hablar mucho de ti," dijo el empresario con una sonrisa encantadora.
(T/N) sonrió educadamente. "Gracias. Es un placer conocerte también."
Ken sintió cómo la rabia comenzaba a burbujear dentro de él. Cada palabra del empresario parecía una provocación. Su mano se tensó alrededor de la cintura de (T/N), atrayéndola más cerca de él en un gesto posesivo.
"Soy Ken Sato, el novio de (T/N)," dijo Ken, su voz baja y firme, con una mirada que dejaba clara su intención de proteger lo que era suyo.
El empresario levantó las manos en un gesto de rendición. "Ah, claro. No quise ofender. Solo estaba charlando."
"Bueno, hemos tenido suficiente charla por esta noche," replicó Ken bruscamente. "(T/N), vamos a buscar un lugar más tranquilo."
(T/N) asintió, notando la tensión en Ken. Mientras se alejaban, podía sentir la energía protectora y celosa de Ken rodeándola como un escudo.
De vuelta en su casa, la tensión no disminuyó. Ken se movía por la sala de estar como un león enjaulado, su mente repasando la interacción de la noche.
"Ken, ¿qué pasa?" preguntó (T/N) suavemente, acercándose a él. "Solo estaba siendo amable."
"Amable," repitió Ken, su voz llena de amargura. "Ese tipo estaba coqueteando contigo. ¿No lo viste?"
"Estás exagerando," dijo (T/N), intentando calmarlo. "No significaba nada."
Ken se detuvo y la miró, sus ojos llenos de una mezcla de amor y furia. "No me gusta cuando otros hombres te miran así. Eres mía, (T/N). Solo mía."
(T/N) suspiró y tomó sus manos, entrelazando sus dedos con los de él. "Ken, confía en mí. No quiero a nadie más. Te amo."
La intensidad de sus palabras calmó un poco a Ken, pero no completamente. "Lo sé, (T/N). Pero no puedo soportar la idea de que alguien intente apartarte de mí. Me vuelve loco de rabia."
Al día siguiente, Ken decidió trabajar desde casa, manteniendo a (T/N) cerca. La tensión aún estaba presente, pero ambos intentaban ignorarla. Sin embargo, la situación alcanzó su punto crítico cuando (T/N) recibió un mensaje de texto.
Ken vio la notificación en la pantalla y su ceño se frunció. "¿Quién es?"
"Es solo un amigo del trabajo," dijo (T/N), pero la expresión de Ken no cambió.
"Quiero verlo," dijo Ken, extendiendo la mano.
(T/N), suspirando, le entregó el teléfono. Ken leyó el mensaje, un simple saludo y una pregunta sobre un proyecto. Aunque no había nada inapropiado, la idea de otro hombre comunicándose con (T/N) lo enfureció.
"¿Por qué tiene que hablar contigo fuera del trabajo?" exigió Ken, su tono gélido.
"Es solo trabajo, Ken," dijo (T/N), tratando de mantener la calma. "No hay nada más."
Ken apretó los puños, luchando contra su instinto de protegerla de cualquier posible amenaza. "No quiero que hables con él fuera del trabajo. No me gusta."
(T/N) miró a Ken, viendo la mezcla de miedo y amor en sus ojos. "Ken, tienes que confiar en mí. No hay nadie más. Solo tú."
La intensidad en la mirada de Ken finalmente se suavizó, y dejó escapar un suspiro largo y cansado. "Lo siento, (T/N). Solo te quiero tanto que me vuelvo loco pensando en perderte."
(T/N) se acercó y lo abrazó, sintiendo cómo la tensión se desvanecía lentamente de su cuerpo. "No tienes que preocuparte, Ken. Estoy aquí contigo, y siempre lo estaré."
Ken la abrazó con fuerza, sabiendo que sus celos eran un reflejo de su amor profundo y posesivo. "Te amo, (T/N). No puedo evitar querer protegerte de todo."
Y así, aunque los celos de Ken seguían siendo un desafío, el amor y la comprensión de (T/N) lograban calmar las tormentas, fortaleciendo su relación y demostrando que, a pesar de todo, su amor era más fuerte que cualquier obstáculo.
Mi BB se pone un poquito tóxico.🤭
La personita que lo pidio, espero y te haya gustado 👊