*: Ken está embarazado pero ni así deja de sentir celos.
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Desde que soy la estrella del béisbol japonés, siempre he estado acostumbrado a que todas las miradas se posen sobre mí. Mi habilidad, mi rostro, mi porte; siempre he sido el centro de atención, y claro, eso alimentaba mi ego. Un ego que, para ser honestos, jamás he intentado esconder. ¿Para qué? Si soy perfecto, y el mundo lo sabe.
Pero todo cambió un poco cuando apareció T/N en mi vida.
Ella... es todo lo que cualquier omega soñaría tener como pareja. Una mujer alpha impresionante, con una sonrisa tan hermosa que hasta las flores parecen abrirse solo para verla pasar. Su amabilidad y generosidad son evidentes desde el momento en que alguien la conoce. Y lo mejor de todo, está locamente enamorada de mí. ¿Cómo no lo estaría? Digo, mírenme. Soy el hombre más guapo y talentoso que jamás haya caminado sobre la Tierra. Pero ahí radica el problema... los demás también lo notan.
T/N no solo está a mi lado por mi físico o por mi talento en el campo de béisbol, aunque claro, eso suma puntos. Lo que realmente la tiene atrapada es nuestro vínculo, algo más profundo. Sin embargo, no deja de ser frustrante ver cómo otras personas, tanto omegas como alphas, se babean por ella. ¿Acaso no entienden que ella ya tiene dueño? Yo, Ken Sato, soy el único que puede estar a su lado. Pero vaya, parece que no lo ven.
Hoy, por ejemplo, íbamos caminando por la ciudad. T/N y yo disfrutábamos de un día juntos, algo que no es raro. Desde que se enteró de que estoy embarazado, ha sido absolutamente perfecta conmigo. No importa si me canso a los diez minutos de andar, ella se inclina y me carga como si fuera lo más natural del mundo. Es que hasta lo hace sin quejarse, con esa sonrisa que me derrite, y me susurra: "Descansa, amor. Yo te llevo." La verdad es que ni quiero caminar mucho cuando sé que me cargará.
Pero ahí es donde entra mi... digamos, leve problema con los celos.
Hoy, mientras caminábamos, noté que algunos omegas nos miraban. Bueno, más bien, la miraban a ella. Esos ojos brillando como si estuvieran viendo a un héroe, y no puedo culparlos del todo. T/N siempre me cuida, está pendiente de mis antojos, y si le digo que me muero por helado a las tres de la mañana, ya está camino a la tienda. Es increíblemente atenta conmigo. Pero claro, esa atención llama la atención de otros.
Uno de esos omegas se atrevió a acercarse más de lo que me gustaba. Lo miré de reojo, evaluando sus intenciones. No era tonto. Pude ver el destello de interés en sus ojos, esas malditas sonrisitas que piensan que tienen una oportunidad con mi alpha. Mi T/N.
Antes de que pudiera abrir la boca para soltar cualquier excusa barata para acercarse, hice lo que mejor sé hacer: reafirmar lo que es mío.
T/N no se lo esperaba, pero la agarré del cuello suavemente y la besé. No fue un beso cualquiera. Fue de esos besos que no dejan lugar a dudas de que ella es mía, y de nadie más. Puse todo mi amor, pero también mi posesividad, en ese beso. Sentí cómo su cuerpo se relajaba al instante, pero al mismo tiempo, me devolvía el beso con la misma pasión. Ella sabía lo que estaba haciendo y lo que yo estaba reclamando. Estaba marcando territorio.
El omega que nos observaba se quedó paralizado por un segundo, y luego, se alejó, fingiendo que no había intentado algo. Buen intento. Pero ya sabemos quién manda aquí.
T/N se separó del beso, con esa sonrisa divertida y cálida que siempre me dedica cuando sabe que estoy celoso.
"Ken, cariño, no tienes que preocuparte. Ya sabes que solo tengo ojos para ti," me susurró, y aunque lo sé, no puedo evitar sentir este impulso de proteger lo que es mío. Tal vez sea por las hormonas del embarazo o simplemente por mi naturaleza, pero no soporto la idea de que alguien piense que puede acercarse a ella. Ella es mía, y yo soy suyo.
A veces me pregunto si mis celos son excesivos, pero luego miro a T/N y la manera en que me cuida, cómo siempre está ahí, pendiente de cada pequeño detalle, de cada capricho que tengo... y todo parece tan correcto. Incluso cuando el mundo la mira, sé que al final del día, ella vuelve a mí.
Y si alguien más lo duda, bueno... siempre puedo volver a besarla para dejar las cosas claras.
Necesito una T/N así en mi vida :(