*:Ken te invita a una boda.
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Ken Sato tenía un plan. Su novia, T/N, era el amor de su vida, y quería casarse con ella a como de lugar, pero cada que decía algo de matrimonio ella cambiaba de tema, dejando en claro que aún no quería. Pero Ken preocupado y temeroso que su media naranja fuera a escapar se le ocurrió algo audaz.
Una mañana, mientras desayunaban juntos, Ken se acercó con una sonrisa.
—Oye, amor, me invitaron a una boda este fin de semana. ¿Te gustaría acompañarme? Será muy divertida, con mucha comida y baile.
T/N, con los ojos brillando de emoción, aceptó de inmediato.
—¡Claro que sí, Ken! ¡Amo las bodas! Además, ¡la comida y el baile siempre son lo mejor!
El día de la boda llegó, y T/N estaba radiante con un hermoso vestido que había elegido para la ocasión. Ken, por su parte, lucía un elegante traje, intentando contener su entusiasmo y nerviosismo.
—Vas a ver, amor. Esta boda será inolvidable —dijo Ken, tomando la mano de T/N mientras se dirigían al lugar de la ceremonia.
Cuando llegaron, T/N se sorprendió al ver lo hermoso que estaba todo decorado. Había flores por todas partes y una gran cantidad de invitados bien vestidos.
—¡Wow, Ken! Esta boda es increíble. ¿Quiénes son los novios? —preguntó T/N, mirando a su alrededor.
—Ya lo verás —respondió Ken con una sonrisa enigmática.
El tiempo pasó, y pronto la ceremonia estaba a punto de comenzar. T/N se sentó emocionada, esperando ver a los novios. Pero cuando la música empezó a sonar y todos se levantaron, Ken tomó su mano y la condujo hacia el altar.
—¿Qué haces, Ken? —preguntó T/N, confusa y un poco nerviosa.
Ken sonrió y le susurró al oído.
—Confía en mí, amor. Todo va a estar bien.
Cuando llegaron al altar, T/N finalmente entendió lo que estaba sucediendo. Sus ojos se abrieron de par en par y su mandíbula cayó.
—¿Es nuestra boda? —preguntó, incrédula.
Ken asintió, con una sonrisa amplia.
—Sí, T/N. Quería sorprenderte.
La confusión de T/N no la dejaban reaccionar, así estuvo lo que duro la ceremonia.
—"Chale, cuando me invitaron a una boda no sabía que se referían a la mía"
La ceremonia fue hermosa, llena de risas y lágrimas de felicidad. Los amigos y familiares aplaudían y vitoreaban mientras Ken y T/N se daban el "sí, acepto". Después de la ceremonia, todos se dirigieron a la recepción donde la comida y el baile los esperaban.
T/N no podía dejar de sonreír mientras disfrutaba de la comida y bailaba con Ken.
—No puedo creer que hiciste esto, Ken. Eres un tramposo —dijo T/N, riendo mientras bailaban.
Ken la miró con amor y dijo.
—Quería que nuestra boda fuera algo que nunca olvidaras, amor. Y por lo que veo, creo que lo logré.
La noche continuó con más risas, bailes y momentos inolvidables. Ken y T/N estaban rodeados de amigos y familiares que compartían su felicidad.
Al final de la noche, mientras se preparaban para irse, T/N se volvió hacia Ken y dijo con una sonrisa traviesa.
—Bueno, creo que ahora podemos decir que nuestra boda fue definitivamente inolvidable. ¿Qué será lo próximo, Ken? ¿Un embarazo?
Ken la abrazó y respondió.
—Lo que sea, amor. Contigo, cada día es una aventura.
Y así, con risas y amor, Ken y T/N comenzaron su vida juntos, sabiendo que cualquier cosa que enfrentaran, lo harían con una sonrisa y mucho amor.
Perdón por no subir ayer nada, no tenía inspiración.