...tal vez debería haberlo despertado pero no, me quedé fisgoneando y mierda, me acabo de excitar con los gemido de Suga, mierda".
Se sentía podrido, pero lo que más lo atormentaba es que se excitó sólo con los gemidos de Suga, algo que nunca pensó en su vida, prendió la luz de la lámpara y se limpió con pañuelos desechables, los botó en el basurero, volvió al futón y antes de apagar la luz miró a Suga que yacía plácidamente dormido, ahora muy relajado con una sonrisa bobalicona en el rostro, se veía precioso, sus mejillas sonrojadas, los ojos cerrados con suavidad y los labios entreabiertos levemente mostrando sus dientes, "ahora sonríes, ojalá siempre fuera así, tú sonriendo y despreocupado de todo", se agachó y besó la frente de Suga, "perdóname por haberte espiado", se acostó apagó la luz y no pudo dormir, estuvo varias horas dándose vueltas y dándole vueltas a lo que acababa de ocurrir.
A la mañana siguiente Suga despertó con ánimos, había dormido muy bien, mejor dicho excelente, se sentó en la cama y estiró los brazos hacia arriba junto con toda su columna vertebral, sonaron algunas vértebras, estaba listo para comenzar el día, miró hacia el lado y ve a su querido amor durmiendo con la boca abierta y babeando, aún con esa imagen matutina pensó que era el ser humano más hermoso de faz de la tierra, pero se acordó de anoche y de los besos que le dieron por lástima y su semblante se ensombreció, pero negó con fuerza y sonrió, "debo ser fuerte, no dejar que Daichi me vea deprimido, si me ve así le daré pena y esta situación seguirá así en un círculo vicioso, debo hacer todo lo posible por estar mejor, por no apegarme tanto a Daichi, por no acosarlo tanto, tengo que cortar poco a poco esta unión si quiero que mi amigo sea libre y feliz, aunque eso signifique dolor por mi parte, debo hacerlo", sonrió nuevamente y se levantó, apoyó su mano en el hombro de Daichi y lo zamarreó.
- Daichiiiiiii, despieeeeertaaaaa – le dijo suavecito mientras lo movía.
Daichi estaba zeta, no reaccionaba, Suga volvió a zamarrearlo con más fuerza pero éste no reaccionaba.
- ¡Daichi!, ¡ya va a comenzar el partido!.
- ¿Ah? – abrió los ojos asustado – el partido.
- Jajajajaja, bien, que bueno que despertaste – le sonrió feliz y con amor, mucho amor.
- ¿Suga? – dijo medio confuso pero luego recordó que se había quedado a dormir y también recordó lo que pasó anoche, error, se puso rojo en el acto – lo siento – se disculpó.
- ¿Por qué lo sientes? – Suga no entendía nada.
- No, nada – Daichi intentó disimular – es que estaba dormido, no sé por qué dije eso.
Se levantaron, desayunaron y fueron hacia la preparatoria.
Mientras tanto en casa de Hinata La cosa no andaba bien, Hinata ahora tenía fiebre, y escalofríos, tiritaba cada cierto rato. La mamá lo llevó al médico y le dijeron que se estaba resfriando, que debía hacer reposo solamente, y así estuvo toda la mañana del miércoles acostado luego de llegar del doctor.
Su madre tenía que salir con Natsu a hacer un trámite, algo simple, pero que requería dejarlo solo por 3 horas porque era en el centro y en ir y volver serían dos horas y media por lo menos, más el tiempo de espera, calculaba tres horas... Pero no tenía con quién dejarlo.
- Shou chan, ¿estarás bien solo? – preguntó la mamá muy preocupada.
- Sí mamá, estaré bien – no quería seguir preocupando a sus padres.
- Vuelvo en tres horas, ¿tienes tu celular con batería?.
- Sí mamá.
- Cualquier cosa me llamas, ¿entendido?.
ESTÁS LEYENDO
Volemos (yaoi) [ Haikyuu] [kagehina]
FanfictionHinata se da cuenta que le atrae Kageyama y de ahí para delante su vida se vuelve un caos, cada día un mal entendido tras otro, pasa por períodos en que añora morir, no estar, esfumarse del mundo por lo que toma pésimas decisiones que traerán nefast...