Capítulo 54 parte 2

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-    Así me gusta amor... – se relamió los labios que estaban secos por tanto jadeo.

Daichi observaba el baile rítmico del pene erecto de su amigo y lo que veía le gustaba de sobre manera; osadamente alargó su brazo derecho y con su mano acarició la mejilla de Suga para luego deslizar sus dedos por el contorno de los labios de éste, como pidiendo permiso para introducirlos en su cavidad, Suga como si pudiera leerle la mente, abrió su boca permitiendo el ingreso de los dedos de su amado, succionó cada uno de ellos ahogando sus emisiones de placer, Daichi al ver sus dedos siendo succionados y sentir la lengua de su amigo por todo el largo de ellos se extasió y quería devolver el favor por lo que sacó su mano y deslizando sus dedos por el mentón luego cuello, torso y abdomen llegó al miembro de Suga lo agarró y comenzó a masturbarlo sin miramientos, fuerte desde un principio siguiendo el ritmo de sus estocadas, al parecer esto fue suficiente para que Suga se perdiera por completo y comenzara a mover la cabeza para todos lados desesperadamente, agarrándose con fuerza del cubrecamas; el orgasmo se avecinaba, podía sentir como el placer lo comenzaba a invadir por todo el cuerpo.

-    Daichi más... Estoy... – no terminó de hablar, fue acallado por el orgasmo y las contracciones de todo su cuerpo liberando su semen sobre su abdomen y el de su amado.

Wow para Daichi ver la expresión de Suga al irse fue un nuevo descubrimiento, su calentura llegó a tal punto que con una simple estocada más y llegó al orgasmo llenando el interior del peli plata, la magnitud de su place fue tan potente que cayó sobre el pecho de su amado, jadeando y estremeciéndose por completo.

Suga sonrió de medio lado al recibir el cuerpo de su amante, le gustó que su amor no pudiera sostenerse significaba que lo había pasado bastante bien y eso le ayudaba a sentirse un poco más seguro, lo abrazó y acarició su espalda con ternura y devoción.

-    Daichi te amo – besó el cabello negro de Daichi.

El capitán de karasuno levantó la cabeza para que sus ojos hicieran contacto y sonriendo de medio lado contestó – Suga te amo – agotado bajó la cabeza y se apoyó el en pecho de su amigo.

Ninguno de los dos quería moverse, la cercanía y calidez era deliciosa, acogedora y reconfortante tanto así que el peli plata se quedó profundamente dormido. Daichi en cambio permaneció despierto porque quería cuidar a su nuevo amor; se salió despacio para no despertarlo, estaba sucio en su pecho al igual que el peli plata, sonrió al ver a su amigo manchado de su propia semilla y completamente desnudo aún con las piernas abiertas; se agachó despacio para unir sus labios con ternura y amor, ya no tenía dudas, estaba completamente enamorado de su vice capitán, el haber estado a punto de perderlo lo hizo entrar en razón, antes como siempre estaba cerca de él se sentía a gusto y muy cómodo recibiendo la devoción de Suga, mentalmente agradeció la intromisión de esa Reiko que lo ayudó a darse cuenta de sus verdaderos sentimientos porque lo más probable es que solo, no hubiera sido capaz de comprender lo que en realidad sentía, si no hasta tarde cuando ambos entraran a la universidad. Se vistió con su pijama y salió de su pieza abriendo la puerta con sumo cuidado de no hacer ruido pero recordó el nivel de los gemidos de su amigo y sonrió ya que lo más probable es que fueron escuchados y ahora él ilusamente estaba abriendo la puerta despacio, salió con más confianza y divertido pero de todas formas caminó suave, llegó al baño prendió la luz y se vio en el espejo tenía un rostro bobalicón, no podía dejar de sonreír, hizo pequeños 'no' con su cabeza y se puso manos a la obra; tomó una toalla y la humedeció, se limpió el pecho para eliminar la evidencia del orgasmo de Suga, la volvió a humedecer y regresó a su cuarto, esta vez tuvo cuidado para no despertarlo, se agachó y lo primero que hizo fue tomar las piernas de su amado y moverlas sobre la cama girando el cuerpo desnudo y lacio de su otrora sólo amigo, el peli plata hizo un ruido de disgusto porque lo movieron y estaba cómodo, abrió un poco los ojos y lo primero que ve es el rostro de su amor, sonrió como un tonto al recibir un beso en los labios.

-    ¿Cómo te sientes? – susurró Daichi.

-    En el cielo – respondió con su rostro ruborizado.

-    Yo igual – volvió besarlo en los labios – déjame limpiarte – con la toalla húmeda comenzó la tarea de asear a su amado, lo hizo con delicadeza, removió todo el semen y luego besó el torso y abdomen del enamorado – quiero que levantes tus piernas – le pidió con ternura.

-    ¿Para qué? – "¿otra vez Daichi?" Lo pensó pero no se atrevió a preguntar por vergüenza.

-    Necesito limpiarte – dijo con una sonrisa de medio lado.

-    Oh, ah jajaja, me da pudor – se tapó el rostro.

-    No no no, nunca tapes tu rostro frente a mí – le sacó las manos de la cara – voy a tomar tus piernas – así lo hizo con la mano izquierda las tomó y con la derecha limpió el semen que salía de Suga – ¿te molesta?.

-    No, sólo me da mucha pero mucha vergüenza.

-    No debes tenerla, de ahora en adelante te voy a cuidar muy bien amor – luego de unos segundo – aprieta un poco.

-    Ay Daichi, las cosas que dices – lo hizo despacio.

-    Tiene que salir la mayor cantidad posible – le cerró un ojo muy cómplice.

Luego de que su amado estuviera relativamente más limpio, se desvistió y caminó así tal cual para ponerle seguro a su puerta. Se recostó al lado de Suga y lo abrazó fuertemente como si el otro fuera a escapar; el abrazado ya no podía más de la felicidad de ser mimado de esa forma.

-    Te amo mi capitán.

-    Te amo mi vice capitán.

Se besaron sutilmente, ambos cerraron los ojos y se quedaron profundamente dormidos.

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Mañana tengo un día muy ajetreado, por eso publiqué hoy dos capítulos.
¿Saben?, nunca me cansaré de agradecerles sus comentarios, no saben lo reconfortante que son, me crean una sonrisa espontánea, cosa que en mí es un poco difícil.
Les contaré un poco de mí:
Soy extrovertida pero tengo un mundo interior grande, vivo en fantasías, es tanto así que algunas veces no recuerdo lo que he hecho, como por ejemplo, '¿cerré la puerta?', ¿me dieron vuelto?', '¿le dije a mi amiga tal cosa?', generalmente sí he hecho las cosas pero se borran de mi mente. Es un problema tener déficit atencional y dislexia... Algunas veces cuando camino gente conocida pasa por mi lado y no los veo, lo que me ha valido enojo por su parte, pero luego de conocerme mejor saben que no es de altiva o diva, si no simplemente NO los veo, por eso ahora saben y ellos toman la iniciativa de saludarme. Me ha pasado que llego a una parte y no me acuerdo del trayecto, trato de pensar y sólo obtengo negro...
Es un poco peligroso, el año pasado me atropellaron, pero esa vez NO fue mi culpa, caminé por paso peatonal y el conductor no me vio y me golpeó , volé como dos metros y medio pero gracias a Dios no me pasó nada grave, sólo algunos hematomas, tendinitis y una quemadura en el brazo por arrastre que me dejó una cicatriz bien fea.

Bueno, quería compartir algo de mí porque ya las siento como amigas, 🤗.

un beshito.

Volemos (yaoi) [ Haikyuu] [kagehina] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora