Harry llego a la Madriguera aquella noche y se instaló en la antigua habitación de Fred y George en donde la señora Weasley había colocado unas flores sobre el escritorio para intentar, infructíferamente, despejar el aroma a pólvora de la habitación.
Hedwig le ululó felizmente a Harry desde su pedestal encima de un gran armario y después se fue por la ventana. Harry supo que ella lo había estado esperando para verlo antes de irse a cazar. Le dio las buenas noches a la señora Weasley, se puso la ropa para dormir, y se metió en una de las camas. Había algo duro dentro de la funda de almohada. Se fijó y sacó de ella un pegajoso dulce violeta y naranja la cual reconoció como la Pastilla Vomitiva. Sonriendo, se dio vuelta y se durmió al instante.
Segundos después, o eso le pareció a Harry, se despertó por algo que sonó como un disparo de cañón mientras la puerta se abría de un golpe. Sentándose inmediatamente, oyó el chirrido de las cortinas siendo abiertas: la deslumbrante luz del sol le taladraba los ojos. Protegiéndose la cara con una mano, buscó desesperanzadamente sus anteojos con la otra.
-¿Qué está pasando?
-No sabíamos que ya estabas aquí. – dijo una voz fuerte y emocionada y Harry recibió un fuerte coscorrón en la cabeza.
-¡Ron, no le pegues! – dijo la voz de una chica reprochándolo.
La mano de Harry encontró sus anteojos y se los puso en el instante. A pesar de que la luz era tan brillante, no podía ver nada a su alrededor. Una sombra larga y confusa apareció frente a él por un momento, él parpadeó y pudo enfocar a Ron Weasley, mirándolo.
-¿Todo bien?
-Nunca había estado mejor. – dijo Harry, tirando de una caja y sentándose sobre ella.
-¿Cuándo llegaste? ¡Mamá recién nos dijo!
-Como a la una de la madrugada.
-¿Estuvieron bien los Muggles? ¿Te trataron bien?
-Como siempre. –dijo Harry, mientras Hermione se apoyaba en el borde de su cama –. No me hablaron mucho, pero así me gusta más. ¿Cómo estás, Hermione?
-Eh, estoy bien. –dijo Hermione, quien estaba observando a Harry como si estuviera enfermo de algo. Creyó que sabía qué había detrás de esto, y como no quería hablar acerca de la muerte de Sirius ni ningún otro tema triste, dijo: - ¿Qué hora es? ¿Me perdí el desayuno?
-No te preocupes por eso, mamá te está trayendo algo, ella cree que te ves desnutrido. – dijo Ron, girando sus ojos -. Así que, ¿Qué ha estado pasando?
-No mucho, he estado atrapado en casa de mis tíos, ¿No es así?
-¡Di la verdad! – dijo Ron –. ¡Has estado afuera con Dumbledore!
-No fue tan emocionante. El solamente quería que lo ayudara a convencer a un antiguo maestro a salir de su retiro. Su nombre es Horace Slughorn.
-Oh. –dijo Ron, decepcionado –. Pensábamos...
Hermione llamó la atención a Ron con la mirada, y Ron cambió de rumbo a máxima velocidad.
-... pensábamos que sería algo como eso.
-¿En serio? – preguntó Harry, divertido.
-Sí... sí, ahora que Umbridge se ha ido, obviamente necesitamos un nuevo profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras, ¿No es así? Así que... eh... ¿Cómo es él?
-Se asemeja a una morsa y solía ser el Jefe de Slytherin. – dijo Harry –. ¿Pasa algo malo, Hermione?
Ella lo estaba mirando como si estuviera esperando que algo raro pasara en cualquier momento. Volvió a su estado normal apuradamente con una sonrisa no muy convincente.
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Alisa Black
FanfictionAlisa Black es la hija de Sirius Black y Larisa Frost, Larisa fue asesinada misteriosamente cuando Al tenía poco más de 3 años por lo que la niña es criada por Remus Lupin que nunca le oculta la verdad sobre sus padres y el lazo que tiene con Harry...