Alisa Black

El Muerto Que No Lo Estaba

Transcurría el mes de agosto cuando Alis recibió una carta, alguien sin más la había deslizado por el buzón de Grimmauld Place. Con el corazón latiéndole en la garganta Alis abrió la carta, se trataba de un citatorio, adjuntado por una carta de John.

"Sé que tu misión con Harry es muy importante, sin duda entiendo que quizá ustedes sean nuestra única esperanza, pero por otro lado creo que es importante que vuelvas a Hogwarts una temporada, solo hasta las vacaciones de Navidad mientras cumples la mayoría de edad, sé que ya no cuentas con el Rastreador, me asegure de ello, pero si llegaran a descubrirlo no sé qué podría ocurrir, un colega de la Oficina de Aurores me ha asegurado que a menos que vuelvas al colegio harán averiguaciones, y giraran un orden de búsqueda y captura, muy probablemente en consecuencia de tu relación con Harry, después de todo no es un secreto que Sirius era su padrino y que eso los une de cierta forma, por favor tenlo en cuenta.

Alis suspiró y se dejó caer en una silla de la cocina mientras Kreacher más feliz que nunca preparaba una tarta de chocolate. John no se lo había dejado en claro dentro de la carta, pero a ella le parecía que después de todo tenía un significado escondido, John quería que Alis volviera no solo porque le preocupaba que giraran una orden de captura en su contra como sospechosa de ser cómplice de Harry, sino que le preocupaba a la vez la seguridad de los demás, después de todo ¿Qué pasaría si Voldemort seguro de que ella había escapado con Harry apresaba a los Frost que se hacían llamar sus primos en el colegio? ¿Y si se llevaba a John o a Tonks? Y aun si ellos lograr mantenerse lejos de sus garras ¿Qué sería de Draco? Después de todo la última vez Voldemort la había usado a ella para chantajear a Draco, nada le impediría jugar a lo mismo con ella, usar a Draco como carnada para atraerla a sus garras, si volvía a Hogwarts quizá estaría con Draco, quizá mantendría a su familia a salvo y quizá podría conseguir información para Harry, después de todo pasadas las vacaciones de Navidad siendo mayor de edad nada le impedía dejar Hogwarts sin dar lugar a más sospechas que una rebeldía adolescente o por lo menos eso quería creer.

-Kreacher...

-Si mi joven ama – le respondió el elfo con una ligera inclinación de la cabeza.

-¿Tu sabias de la existencia de John... digo sabias que mi madre tuvo otro hijo? – Kreacher dejo de lado el trapo con el que lustraba la mesa y sus orejas se desplomaron visiblemente.

-El primogénito de la señorita Larisa y el amo Sirius... o la pobre señorita Lisie, el amo Regulus estaba destrozado cuando se enteró de que ella y el amo Sirius tendrían un hijo, Kreacher nunca perdonó al amo Sirius por robarle al amo Regulus la luz de su vida.

-¿Regulus estaba enamorado de mi madre?

-El amo Regulus y la señorita Lisie eran inseparables, desde muy pequeños se volvieron grandes amigos y luego aunque ella asistió al colegio con el amo Sirius y el amo Regulus un año más tarde no se distanciaron hasta que el amo Sirius metió sus narices, mi ama estaba tan contenta de que el amo Regulus hubiera encontrado tan buen partido, solo hacía falta pulirla un poco decía mi joven ama, alejarla de las mala influencias, pero es perfecta para mi amado hijo, eso decía la ama de Kreacher, pero el amo Sirius tenía que meter las narices, Kreacher se enfadó con la señorita Lisie por mucho tiempo, pero ella siempre fue muy buena con Kreacher, no como el amo Sirius a quien le gustaba atormentar al pobre Kreacher.

-¿Por eso se distanciaron mamá y Regulus? ¿Sirius se metió entre ellos, eso es todo?

-Bueno... a la señorita Lisie nunca le gustaron las costumbres de la familia Black por eso la ama de Kreacher decía que hacía falta pulirla un poco, regresarla al buen camino y que sería una excelente esposa para el amo Regulus.