"Siempre Vuelvo a ti" Romeo Santos 2da y 3era temp. (Prince Royce) TERMINADA.

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Estaba sentada entre el público esperando que el concierto de Anthony comenzara, era increíble la popularidad que tenía, me emocionaba mucho escuchar a la gente decir lo mucho que lo admiraba y les gustaba su música, eso si, escuchar como todas ellas querían colarse en su cama me  daba risa y rabia, la única mujer que estaría en su cama, metida entre sus sabanas era yo.
Durante el concierto Anthony me cantaba, me decía frases que solo él y yo entendíamos. Verlo ahí, haciendo lo que más le gusta y para lo que vive, entregarse por completo a su público, sin duda alguna tengo mucho que aprender de él, la forma en que hace sentir a sus fanaticos tan especiales, tan parte de él.
-No sé realmente qué le ven a este tipo- Me dijo un hombre que estaba sentado a mi lado.
-Algo especial debe tener para que toda esta gente esté aquí por él- le dije riéndome.
-No es guapo, su voz es rara... no comprendo su éxito.
-¿Usted por qué está aquí?
-Bueno, soy el empresario- dijo encogiendo los hombros.
-Oh, usted contrató a Romeo?- le dije riéndome
-Si
-Vaya... y entonces si opina todo eso de él por qué lo contrato?
-Mi hija... es su fanática- dijo poniendo los ojos en blanco.
-Buen padre o buen empresario?- le dije sonriendo.
-Ambos, no lo hubiera traído si no supiera que llenaría este lugar, pero no comprendo el por qué de su éxito.
-Es compositor, cantante, un visionario y difiero de usted, por qué a mí me parece un tipo bastante atractivo.
-La que es bastante atractiva es usted, muy hermosa, con todo respeto- dijo coqueteándome.
-Gracias- le dije con fingida timidez.
-¿Me permite invitarle un trago?
-Lo siento soy casada- le dije mostrándole mis anillos.
-Oh lo siento- dijo apenado.- pero entonces... en donde está su esposo? No debería dejarla sola. Debo preguntarle entonces ¿Que hace usted aquí?- dijo sonriendo coquetamente.
-Disculpe caballero- Dijo Anthony desde el escenario dirigiéndose al hombre estaba a mi lado- Le parece atractiva esa dama?- dijo señalándome.
A lo cual el hombre respondió que si con una sonrisa.
-Pues tenga cuidado por qué esa mujer es mía.- dijo Anthony y siguió en lo suyo.
Me tape la cara de la vergüenza que me dio, todos a mi alrededor estaban viéndome.
-¿Que fue eso?- Me pregunto el hombre.
-es la respuesta a sus preguntas...Él es mi esposo. - a lo cual murmuró un lo siento y se fue apenado.

Antes terminar el concierto me escabullí hasta los camerinos y me senté a espéralo, apenas él entró ahí, me lancé a sus brazos.
-Hey- dijo apretándome entre sus brazos.-A que se debe tanta efusividad?
-Me di cuenta de lo afortunada que soy al tenerte.
-Y eso?
-De entre tantas mujeres hermosas de las que rodean... me elegiste a mi.
-Y lo haría una y otra vez- dijo dándome un beso en la frente.
-Estoy demasiado empalagosa y quiero comerte a besos- le dije apretando sus cachetes.
-¿Fumaste una sustancia ilegal?-preguntó riéndose.
-No, solo estoy muy enamorada y deseo demostrarte lo mucho mucho que te amo- le dije abrazándolo muy fuerte.
-Amor, me vas a desbaratar- estaba faltándole el aire.
-Uyy! Pareces una señorita- le dije soltándolo, me di la vuelta y caminé lejos de él.
-Y tú pareces una acosadora- dijo abrazándome por detrás.
-Soy tu esposa, puedo acosarte.
-Sabes que puedes hacer conmigo lo que quieras, soy tu títere, mi amada- dijo dándome un beso en cuello, causándome escalofríos.
-¿Me amas?- le pregunte girándome entre sus brazos para quedar frente a él.
-Mucho, muchísimo, no te imaginas cuanto.- dijo dándome un corto beso en los labios.-Por cierto...- Me soltó y camino por la habitación.
-¿Que pasa?
-¿Que quería el tipo del concierto? Aunque no lo creas, aunque esté en tarima cantando, siempre estoy cuidándote.
Solté una carcajada recordando todo.
Le conté y terminamos sentados en un sillón riéndonos los dos.
-Y todavía dijo "si" él muy pendejo- dijo Anthony riéndose.
-Me encanta verte reír, de esta forma-
Le dije agarrando sus mejillas con las dos manos.- Eres hermoso, que me diste? Me embrujaste? Por qué en estos días me eh sentido más atraída a ti de lo normal.
-Les llaman hormonas alborotadas- dijo riéndose.
-Siento mariposas cuando te veo, quiero guardarte en una caja de cristal para que nada te pase, quiero cuidarte siempre hasta que estemos viejitos.
-Mi amor- dijo tocandome la frente- Me preocupas, estarás enfermándote? Volviéndote loca? - hizo cara de sorprendido y se tapó la boca- Eres una imitadora!
-Yo no era así cuando yo te conocí- le dije imitándolo.
-Tú eres fría como el agua Del Río... No es normal que profeses así tu amor.
-Te amo y si alguien nos escuchara diría que estamos estupidos- le dije riéndome.
-También te amo linda, ahora ven conmigo, vamonos a nuestro hotel que quiero quitarte ese vestido y darte toda la noche- dijo jalandome a la salida.
-Darme que?- le dije riéndome.
-Placer linda, mucho placer.