crónicas de una adolescente | loona.

Historia de amor.

-¿Seguiremos el jueves?. -pregunto Jungeun, ya saliendo de la casa de Jinsol.
Había pasado un momento difícil de explicar, pero las dos volvían a tener esa desagradable conversación de siempre.

-Ajá, no puedo otro día y el sábado supusiste que me invitabas al partido de fútbol. -explicó la rubia, juntando la puerta detrás suya.

-No lo supuse. Te invite y me dijiste que si. -Jungeun se dio media vuelta, solo para mirar la expresión de Jinsoul.

Esta sonrió a medias y asintió con su cabeza.

-Esta bien, iré contigo. -la rubia parecía ser otra persona cuando Jungeun levantó la propuesta de que fuera con ella al partido de fútbol.

-Bien... -sin decir ni siquiera un "adiós", Jungeun camino unos pocos pasos más afuera de la casa de Jinsol, sin embargo se detuvo al acordarse de lo que su tía le había pedido.

"Pasarás por ella cuando salgan"...

Eso no era lo que quería, pero todo era por no ir al campo.

-Oye... -se volteó para llamar a la rubia, quien hizo lo mismo para escuchar a la castaña clara.

Jungeun quería golpearse con una piedra, solamente para olvidar todo lo que debía hacer y así como también olvidar que su tía existía y también Jinsol.

-Haber... -suspiró.

"Vamos, idiota. No te puede costar decirle eso". Se apoyó a sí misma. No podía ser tan difícil decirle a Jinsol "Pasaré por ti".

-Lo qué te quería proponer, era que si deseabas que pasara por ti el sábado para ir juntas al partido. -Jinsoul solo pudo sonreír animada y de manera tierna.

Por alguna extraña razón, ver a Jungeun con su cabeza agachada y algo sonrojada diciéndole tal cosa que le precia un acto de total ternura, se le hacía adorable y lindo.

-Estas generando que esto sea como una cita ¿sabes?. -si, la castaña clara lo sabía, pero no le era necesario recalcarlo, ni tampoco escucharlo.

-¿Quieres hacerlo, si o no?. -eso sonó muy mal ante el pensamiento de Jungeun. Jinsoul también lo mal interpretó. -Sabes que no me refiero a eso, me refiero a... -fue interrumpida por las palabras de la rubia.

-Lo se, solo quería ver lo adorable que te veías sonrojada. -la castaña frunció su ceño de manera enrabiada mientras que Jinsol parecía disfrutar de ver a Jungeun muy avergonzada, pero a la vez enojada. -Esta bien, si es lo que deseas.

-Eres una completa idiota, Jung Jinsol. -dicho esto y con muchísimo odio en sus palabras, se dio media vuelta para irse sin más que decir a su casa. Sin embargo la mayor volvió a interrumpirla.

-Adiós, Jungeun. Y por favor, deja de ser tan desagradable e idiota. -la menor se dio media vuelta, frunciendo su ceño. -Se nota que detrás de toda esa apariencia fría y desagradable que tienes, hay una adorable chica en busca de amor.

Sin duda, esa fue razón más de odio. ¿Desde cuando Jinsol era tan así con ella?.

Primero era tímida y ahora la trataba de tierna, no, eso no podía ser así.

-Vete a la mierda. -le recalcó en todas sus sílabas. Jinsoul sonrió de manera divertida. A lo mejor tenía cierta razón.

Jungeun por su parte, con sus manos en los mangos de su mochila, se dispuso a caminar hasta la parada de autobuses con la intención de tomar uno e irse directamente a casa.

Después de eso, su tía la "obligaría" a muchas cosas más con Jinsol.

[...]

-¡Ya se!. -Sooyoung volvió a hablar y Jiwoo nada más rodó sus ojos con aburrimiento. -Toc, Toc... -y comenzó a contar sus chistes aburridos. Jiwoo llegó al colapso de su paciencia.