crónicas de una adolescente | loona.

Lippie y Soulie.

-¿Te sientes mejor?. -su pregunta era difícil de responder, así como cualquier cosa que pudiera llegar a preguntar.

-Claro... -murmuró con su cabeza agachada.

Ni siquiera se había tomado el tiempo de abrir las galletas, y si lo hizo, ni siquiera las probó.

-¿Segura que estas bien, Heejin?. -la nombrada no respondió y levantó su mirada, dispuesta a volverle a decir una pequeña mentira a Ryujin. Aunque la verdad es que no era mentira, realmente necesitaba ir al baño.

-Necesito ir al baño. No tardo. -se levantó, posando su mano en la de Ryujin.

La nombrada por su parte sonrió y cuando perdió de vista a Heejin, suspiró.

Heejin por su lado camino a paso rápido hacia el baño. El primero que viera, nada más para verse en el espejo y poder tomar algo de agua.

Y cuando llego a donde deseaba, apoyo ambas manos en los lavabos y dejó salir un suspiro, tratando de controlar sus emociones, aún así no pudiera.

Se miró en el espejo y se preguntó a sí misma; ¿que estaba haciendo?.

No tenía intención de dañar a nadie, y con tal sólo decir una palabra, dañaba a la mitad de las personas que quería.

-Eres una idiota. -se susurró a sí misma, golpeando el lavabo con la palma de su mano.

Estaba enojada, enrabiada, triste, era un desorden de emociones que no podía ordenar ella misma.

-¿Por qué haces esto?. -volvió a susurrar, como si en sus adentros pudiera encontrar una respuesta.

Heejin lentamente comenzaba a odiarse. No físicamente, odiaba cada rincón de sus pensamientos, palabras, actos o cualquier cosa que tuviera que pensar para hacerla.

Ella sentía que no pensaba lo que hacia. Si fuera así, no haría tanto daño como el que causaba en sí misma, en Ryujin y en algún momento lo causaría en Hyunjin, y alguien más. ¿Quien? Dependía de la situación. Tal vez a Haseul o Yeojin, Heejin se creía capaz de eso.

Sabía que en su escuela, las noticias volaban y llegaban a los oídos de las personas menos esperadas.

Sabía que la mitad de sus amistades y compañeros se habían enterado de su relación con Hyunjin, y que al día siguiente llegarían diciendo que estaba con Ryujin, aún siguiendo en una relación con Hyunjin.

Ella no deseaba que aquellas cosas pasaran, pero sabía que si no le ponía un alto a esa situación, todo lo que no quisiera que sucediera, pasaría.

No quería perder su relación con Hyunjin, que apenas llevaba uno o dos días. Tampoco deseaba ser odiada por la mitad de su clase, ni recibir burlas por parte de casi todos sus compañeros.

Negó con su cabeza mientras veía su reflejo en el espejo y bajo su mirada.

Nadie le dijo que la adolescencia le sería tan complicada.
Nadie le advirtió que las emociones serían sus peores enemigas.

Deseaba tanto volver a tener, tal vez, ocho años. O ser un bebé, el cual no tenía ni idea de lo que pasaba a su alrededor y que no era responsable ni de sus actos ni de sus palabras.

-¿Heekki?. -y aquella voz, que la hizo sobresaltar, la hizo sentirse aliviada.

Tal vez no tanto como deseaba estar en esos momentos, pero si que le hizo bien escuchar a Hyunjin detrás suyo.

Por su parte, Hyunjin se acercó de manera lenta donde Heejin. Colocó sus manos en sus hombros y se acercó a su mejilla, nada más para besarla levemente.