Heejin es popular, sin querer serlo. Vive confundida por estar enamorada de su mejor amiga.
Hyunjin es parte del equipo de fútbol. Personalidad única, pero parece ser fría, odiosa y cortante.
Haseul es algo torpe e inocente. La más inteligente de su...
[Léanse el capítulo con una canción bonita y algo sensible. Así ambientan las situaciones de mejor manera, lo digo por experiencia ya que escribí el capítulo con una canción así. Ya, lean, está bonito el cap]
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Esa tarde no había sido más que solo perfecta y agradable.
Ambas caminaban balanceando sus manos al compás de sus pasos sobre la cera de la calle. La calidez que sus manos necesitaban para sentirse bien ante el frío que comenzaba a hacer.
Haseul, por su lado emocional, no sabía muy qué hacer. Si tenía emociones, estas estaban demasiado confusas y no eran fáciles de tratar.
La pelirroja merecía esa verdad sobre su viaje, después de todo, sus padres le dijeron que si. Se iba directamente a Islandia por temas de dinero, trabajo y todo ello, de lo cual Haseul no deseaba tanto detalle.
Fueran las razones que fueran, ella debía irse a Islandia.
Primeramente, Haseul quizás podía tener la posibilidad de quedarse en Corea y no dejar nada, pero varias cosas se debían de tomar en cuenta.
No le gustaba quedarse demasiado tiempo en casas ajenas, de las cuales no pertenecía como tal. No se le hacía cómodo.
Probablemente un fin de semana o cuatro días, pero si planeaba quedarse en Corea en casa de un amigo o amiga hasta que... bueno, hasta que su carrera universitaria terminara, no lo aceptaría ni con ojos cerrados.
Kahei era su probabilidad de quedarse en Corea por bastante tiempo, pero... era demasiada carga para ambas. Las dos estudiando todo el día y, además, trabajar horas para mantenerse entre sí. Haseul quizás podía vivir contra eso, pero Kahei no y sabía que se preocuparía demasiado por todo. Más aún si vivían juntas a tan corta edad, que si bien para esas cosas no había edad porque esta solo definía un número de años de vida, sus personalidades podían chocar muy fuertemente ante el hecho de convivir demasiado tiempo juntas.
Al final de todo, ambas seguían siendo adolescentes que por más maduras que fueran, necesitaban su espacio como personas que aún vivían su "juventud".
Haseul no sabía cómo mantener su relación con la pelirroja. A distancia, no era bueno... no podía hacer feliz a Kahei de esa manera.
La confianza era muy frágil, nadie les aseguraba que detrás de una pantalla no pasaban cosas.
Ella amaba a su novia, mucho más que cualquier otra cosa. Dañarla era lo que menos deseaba y sabía que una relación a distancia, no sería lo mismo que si fuera ambas en el mismo país y el mismo tiempo.
Podían intentarlo, pero Haseul no aseguraba nada.
Según ella, Kahei merecía a alguien que estuviera para ella tanto físicamente, como emocionalmente. Que pudiera abrazarla cuando se sintiera mal y que pudiera besarla cuando lo necesitara... Haseul sentía que todo eso no podía dárselo a través de kilómetros y horas de distancia. No era el mismo amor que podía haberle dado en algún momento.
