Heejin es popular, sin querer serlo. Vive confundida por estar enamorada de su mejor amiga.
Hyunjin es parte del equipo de fútbol. Personalidad única, pero parece ser fría, odiosa y cortante.
Haseul es algo torpe e inocente. La más inteligente de su...
*En este capítulo me centraré específicamente en Hyejoo y Chaewon*
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Sentada en el césped de algún sector de la escuela, Hyejoo pensaba en prácticamente nada.
Su mirada en un punto fijo y sus manos jugaban con el césped verde que parecía estar muy bien cuidado.
Ese era el panorama de Hyejoo cada vez que llegaba el receso. La gente que pasaba por el frente o a su lado, la miraban de una manera extraña y murmuraban cosas que a lo oídos de la azabache, se escuchaba perfectamente.
Las risas no se quedaban atrás y su apodo de "rarita" todo el mundo lo conocía.
Nadie la conocía por Hyejoo, sino que por "rarita".
No era algo que le afectara totalmente, podía lidiar con eso. El problema era que la gente comenzaba a hablar de ella a sus espaldas.
"Ella no come..."
"Esta loca".
"No se que hace viva".
Eso no era positivo y hacían que ella se sintiera mal.
Que las ganas de comer cada vez fueran menos. Que el hecho de sentirse bien con su cuerpo, nunca tuviera función. Que poder ser buena persona que tener aunque sea una sola amistad, no funcionarán.
Cambiarla a esa escuela fue un gran error. Y aunque en cualquier escuela la juzgaban por que si, esa era la peor.
Hyejoo no sentía nada, más que dolor.
No sentía el amor, no sentía la amistad. Solamente su pasión por el baile y los videojuegos. Y cuando Hyejoo bailaba, se exigía demasiado.
Hubieron ocasión en las cuales Hyejoo bailó y bailó, hasta terminar en el hospital. No era una vez, habían sido varías veces.
Y eso pasaba simplemente por que cuando hacía aquello, lo hacía sin nada en su estómago, más que agua. Gastaba energía que no tenía en su cuerpo y su madre muchas veces tuvo que llevarla al hospital antes de que se desmayara.
Hyejoo sacudió su cabeza para despegar su vista del suelo y cuando lo hizo, pudo ver una botella de algún refresco sobre su vista.
Frunció su ceño y levantó su mirada para ver la sonrisa de Chaewon, estirándole aquel refresco.
-Toma. Te va a gustar. -insistió moviendo la botella sobre la vista de Hyejoo.
