Amarillo - Juan Pablo Villamil

.5. tercera temporada

Esa noche obligue con demasiado dolor a Villa, a desaparecer con sus cosas de nuestra casa. Estaba destrozada, rota. Me arreste por la puerta hasta terminar hecha un ovillo llorando a mares, intente recomponerme un poco pero simplemente no podía. No podía dejar de pensar que me dolía todo, más el corazón.

Sin haber dormido, me quede acurrucada en la cama observando su lado. Se sentía vacío, frio y me dolía. Me dolía no haber sentido sus manos en mi cintura, ni sus besos por la mañana, sus te amo tan sinceros que hoy si los escuchaba después de lo sucedido, me sabrían a veneno.

Baje rápidamente cuando escuche el timbre. Isaza se encontraba del otro lado con una sonrisa, pero la borro automáticamente cuando se dio cuenta en el desastre que me había convertido de la noche a la mañana. Lo abrace con fuerza escondiendo mi rostro en su pecho y descargándome nuevamente.

- ¿Qué sucedió? – susurro

Ambos ingresamos y caminamos a la sala. Ya sentados frente a frente, el me observaba expectante, pero no encontraba las palabras exactas para contarle lo que me dolía que mi vida se haya acabado por su desconfianza, por su traición.

Suspire pesadamente y levante mi vista hacia el,

- Decidí separarme de Villa – susurré, el abrió los ojos sorprendido

- ¿Qué? – balbuceo – Pero ¿Por qué? Ustedes no

- Nosotros si – afirme dolida – el me traiciono

- No entiendo – negó confundido

- Desde que volví de viaje me alejo y estuve una semana intentando entender que había hecho mal para que el actuara tan frio – cerré mis ojos recordando lo vacía que me sentí y me sentía, aun – y ayer fui a buscarlo para hablar – mi voz comenzaba a quebrarse – y escuche como una mujer hablaba por teléfono y decía que villa me dejaría, que se habían besado – mis lágrimas comenzaron a caer una tras otra

Mi amigo se quedó en silencios unos momentos intentando procesar lo que le había relatado. Mi corazón estaba despedazado frente a sus ojos, mi vida estaba totalmente destruida y vacía. No sabía que hacer conmigo en estos momentos.

- Mey – susurro

- No digas nada – seque mis lágrimas – él dice que no sabía cómo decirme lo que había sucedido, que no quería lastimarme pero

- Juan Pablo, te ama - afirmo

- ¿Cómo quieres que lo mire a los ojos después de esto? ¿Después de saber que no confió en mí? Hubiese perdonado si venía de frente y no me hacía sentir como la mierda durante toda esta semana – argumente algo furiosa – es volver al principio de todo, es revivir cada maldita cosa que juramos no hacerlo mas

El me observo detalladamente y asintió entendiendo mi punto, trago saliva antes de volver a hablar.

- ¿Qué quieres que haga por ti? – su tono de voz era dudoso

- Quiero el divorcio – escupí mi veneno frente a Isaza

Narrado por Juan Pablo Villamil

- Villa

Parpadee rápidamente volviendo a Simón que intentaba llamar mi atención.

- ¿si? – susurre, el frunció el ceño

- Solo que ya terminamos por si tienes más preguntas – comento

Mire a mi alrededor, todos aquellos hombres con traje me observaban expectantes esperando una respuesta. Suspiré y negué cabiz bajo.

Di por terminada aquella reunión y mientras todos se iban yo juntaba uno por uno mis papeles para encerrarme en mi oficina. No quería ver a nadie, nadie que no sea mi mujer para poder arreglar esto.