- Ey
Llame la atención de pedro. Se encontraba sentado en uno de los asientos del aeropuerto internacional. Me había pedido que lo buscara.
- Hola amor
Sonrió con felicidad al verme y levantándose de ahí se acercó a mí para besar mis labios y abrazarme con fuerza.
- Te extrañe – susurro
- Yo también
Cerré mis ojos e intenté creerme a mí misma lo que acababa de decir, quería que ese sentimiento fuera tan real como alguna vez lo fue.
- Vamos a casa – tomo de mi mano para caminar hacia el auto
Durante la ida a su casa él me contaba cómo se encontraban las cosas por allá. Sus padres se habían puesto muy felices de que hayamos vuelto y quizás el y todos los demás se encontraban felices por esto, pero yo, yo me encontraba sumergida en un mundo en donde solo podía ser habitado por Villa.
- Quedo muy lindo desde la última vez que vine aquí – reí observando su sala de estar
- Si, antes de irme termine de pintarlo, por eso siempre nos veíamos en el bar o en tu casa – ambos reímos – ¿quieres cenar?
Dudé unos segundos en contestar, pero asentí con una le sonrisa.
- Claro
¿Qué quieres comer? – camino hacia la cocina, lo cual lo seguí
- Sorpréndeme – moví mis hombros – eres el chef
- Es verdad – rio negando
Mientras el cocinaba, yo pretendía prestar atención a su charla de cuanto me había extrañado, que hizo, ciertos comentarios más sobre nuestra relación que hicieron sus padres. En fin, cosas que no me interesaban, pero disimulaba que sí.
La cena estuvo bastante tranquila, de vez en cuando hablábamos de cosas sin sentido, pero no me sentía de ánimos para continuar. Comencé a jugar con mi comida mientras el comía sin respirar.
- No comiste mucho – frunció el ceño con preocupación
- No tenía mucha hambre
- ¿Te encuentras bien? – pregunto preocupado
- Si ¿Porque debería de estar mal?
- No lo sé, dime tu – tomo su copa de vino mientras me observaba con intriga
- Estoy cansada nada mas – moví mis hombros
- Ven – dijo levantándose y dándome su mano para que la tomara
El me llevo hacia su living y puso algo de música. Llevo sus manos a su cuello y las suyas fueron a mi cintura. Me observo a los ojos y ambos comenzamos a movernos en aquel pequeño lugar. Odiaba bailar, era una de las cosas que disfrutaba muy poco y hacerlo con el empeoraba aquel terrible sentimiento hacia un arte esplendido. Pero que podía hacer, era pésima.
- Te amo Mey – murmuro
Abrí mis ojos impresionada. ¿Qué era lo que había dicho? Inhale con fuerza e intente solo disimular mi asombro, yo no sentía eso aun y me sentía presionada. Era tan triste.
- Te amo tanto que daría mi vida por ti, nunca te olvide y quiero estar contigo toda la vida.
Yo ni siquiera sabía que decir sobre su confesión. Se acercó más a mí me inclino su cabeza para que sus labios chocaran con los míos. Ni siquiera me moví de ahí.
El beso comenzó lento, aunque yo no estaba cómoda con aquel suceso. No quería ser grosera así que lo seguí hasta el punto que empecé a sentir como subía mi blusa y sus manos acariciaban mi piel. Mi corazón comenzó a latir demasiado fuerte, me sentía asqueada, sentía que mi piel quería que dejara de hacer lo que estaba haciendo porque no eran las manos de Villa las que estaban sobre ella. En ese momento, reaccione y lentamente me separe de él.
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Amarillo - Juan Pablo Villamil
FanficEstoy perdida, vivo anclada casi como un pájaro a su cielo azul (T'estimo) Amarillo: me tienes en los bolsillos Primera temporada Segunda temporada Tercera temporada Todos los derechos reservados. QUEDA PROHIBIDA su copia u adaptación de cual...