𝙏𝙊𝙆𝙔𝙊 𝙍𝙀𝙑𝙀𝙉𝙂𝙀𝙍𝙎 - ᴏɴᴇ ꜱʜᴏᴛꜱ

𝚈𝚊𝚖𝚊𝚖𝚘𝚝𝚘 𝚃𝚊𝚔𝚞𝚢𝚊

·Inferno - Bella Poarch ft. Sub Urban·
Imaginemos que la vida es justa y Baji no murió
Narración en tercera persona
Female Reader

Sonreiste mientras te levantabas del suelo, dejando al chico que te subestimó en el suelo, inconsciente.

Entonces llegó tu hermano, Keisuke te miró con orgullo.

—Esa es mi hermana —sonrió, agarrando tus hombros.

Caminaron hasta que llegaron donde vuestros amigos os esperaban.

—Tienes un poco de sangre en la mejilla, [Tn]-chan —dijo Mikey, acostumbrado a tu violencia.

La limpiaste y desviaste la vista.
Había un nuevo chico entre vosotros.

—Él es Takemicchi.

—Aún no tiene moto, así que le llevarás tú a casa —dijo Mikey antes de arrancar e irse.

—¡Bastardo! —te quejaste. Luego le miraste de nuevo—. Sube.

—Gracias por llevarme —dijo con una sonrisa, algo avergonzado.

—Si, si. ¿Dónde vives?

Conduciste hasta dónde te indicó, allí esperaba un chico en la puerta de casa.
Era rubio, con una mirada inocente y algo bajo.

Al ver a Takemicchi detrás de ti, se sorprendió. Vio tu uniforme y sonrió.

—¿Al fin entraste en ToMan?

—Estoy en ello. ¿Qué haces aquí, Takuya?

—Habíamos quedado para hacer unas tareas —luego te miró—. H-hola.

—Hola, soy [Tn]. ¿Puedes bajarte, Takemicchi? Tengo que volver a casa.

—Claro, perdona.

Te despediste y volviste a casa, pensando en aquel chico.
Poco después, descubriste que era amigo de la infancia de Takemicchi y asistía al mismo instituto que él.
Así, pasaste a recoger a Takemicchi siempre que podías para ver a Takuya.

—¿Aún no sale Takemicchi? —preguntaste al chico, pretendiendo entablar una conversación con él.

—Sigue hablando con la profesora sobre su examen.

—Le salió mal, ¿verdad? —sonreiste.

—Horrible —rio él.

Hablaron unos minutos hasta que el rubio salió.

—Siento haber tardado, [Tn]-kun. 

—No importa, vamos. Hasta otra, Takuya —sonreíste y arrancaste la moto para irte.

El chico se quedó con la respiración pesada y el corazón acelerado.
Sentía mariposas en el estómago, pero realmente era algo diciendo que escapase.

Sabía que eras difícil de tratar, tenías el mismo carácter explosivo de tu hermano, pero a él no le importaba, quería amarte sin tener que ocultarlo.
Sabía que en el fondo eras dulce y él quería ver ese lado tuyo.

Pasaron unos meses y Takemicchi al fin entró en la ToMan, al igual que sus amigos Yamagishi, Atsushi, Makoto y Takuya.
Esto hizo que vieras más seguido al rubio.

Después de una reunión, te acercaste a él mientras él hablaba con sus amigos.

—¿Qué tal tu primera reunión con la pandilla? —sonreíste, mirando al chico, perdiéndote en sus ojos.

—Bien, yo...

—¿Quién es ella? —susurró Makoto.

—La hermana de Baji Keisuke, es casi tan fuerte como él.

Desvié la vista y le miraste con el ceño fruncido.

—¿Casi tan fuerte? Soy mayor que él, ¿quién crees que le enseñó esas ganas de pelear?

Los chicos se asustaron, pero Takuya solo sonrió, sabía que no les golpearías repentinamente... o eso creía.

—Bueno —zanjaste de mal humor—. Venía a llevarte a dar una vuelta.

Lo dijiste de una manera tan natural que el rubio se paralizó y reaccionó unos segundos después, con un sonrojo de oreja a oreja.

—Ven conmigo —agarraste su mano y le arrastraste hasta tu moto. 

Condujiste algo molesta mientras él sentía miedo, podrías llegar a ser peligrosa en la carretera cuando estabas enfadada.

Al fin llegaron a un sitio algo apartado.
Había un pequeño descampado y un área de césped con algunas sillas, donde te sentaste.

—Vengo a menudo aquí con el resto —dijiste tranquila.

Takuya se sentó a tu lado y suspiró, tranquilo de que no estuvieras tan molesta.

Hablaron durante un rato sobre algunas cosas, hasta que decidiste desahogarte.
Durante estos meses, Takuya se había convertido en tu mejor amigo. Hablaban todo el día por mensajes o bien en persona. 
Él conocía esa parte de ti que anhelaba ver. Tu parte sensible, algo que solo tu hermano conocía.

—A veces me siento infravalorada, me gustaría que me valoraran como al resto de chicos de la pandilla —concluiste, después de unos minutos hablando.

—No debes sentirte así solo por lo que dijo el idiota de Yamagishi. Tú eres la primera chica de ToMan, deberías sentirte orgullosa —sonrió para intentar animarte—. Eres fuerte y no tiene nada que ver con tu hermano o el resto de chicos de la pandilla.

Sonreíste de vuelta, sintiendo una calidez en tu corazón.

Vuestras sillas estaban una junto a la otra. Vuestras manos se rozaban un poco, pero no las apartaron.

Se miraron unos segundos a los ojos, sonriendo como estúpidos enamorados, porque lo eran.

Acercaste tu mano a su costado, dónde le hiciste cosquillas. Él comenzó a reír y se apartó, mirándote.

—Eres mala, [Tn] —se atrevió a decir él con una pequeña sonrisa.

Sonreíste de lado y te acercaste un poco más a él.

—Bebé, soy la razón por la que lo malo es tan divertido.

Eso empujó a Takuya a tus labios. Fue tan rápido que cuando reaccionaste, ya se había apartado.

—¡Lo siento! Por favor, no te enfades, yo...

No le dejaste seguir hablando, presionarte tus labios contra los suyos de nuevo y acariciaste su mejilla.

Te separaste con una sonrisa y él sentía que se iba a morir.

—Te quiero, Takuya —admitiste orgullosa. No debías ocultarlo más.

—También te quiero —dijo con una sonrisa—, pero le tengo miedo a tu hermano.

—Tranquilo, le golpearé si se queja de lo nuestro —sonreíste y te acercaste de nuevo a él.