Lea... la menospreciada

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Génesis 29:30-32

30 y se llegó también a Raquel, y la amó también más que a Lea; y sirvió a Labán aún otros siete años.

31 Y vio Jehová que Lea era menospreciada, y le dio hijos; pero Raquel era estéril.

32 Y concibió Lea, y dio a luz un hijo, y llamó su nombre Rubén,[a] porque dijo: Ha mirado Jehová mi aflicción; ahora, por tanto, me amará mi marido.

La historia de Lea me parece interesante, podemos pensar que quizás en su pueblo nadie le hacía caso como para casarse con ella, más la humillación de ser entregada por su padre al entender que nadie había venido a pedirla como esposa, otra experiencia horrible que vivió esta mujer fue al levantarse de su noche de bodas literalmente su esposo va y le reclama a su padre, pues por equivocación tuvo una relación con la mujer que él no quería.
Imaginate lo que sintió esta mujer esa mañana... una verguenza horrible

En otras palabras, esta mujer era para que sufriera de una depresión fatal. Pues si venimos a ver ella no tenía culpa de lo que hizo su padre, Dios no aprueba este comportamiento, sin embargo ya Jacob estaba metido en el tremendo problema de tener dos esposas y de seguir trabajando para recompensar la entrega de ellas, debido a la trampa de Labán.

¿Donde esta Dios en todo esto?

La justicia de Dios es increíble y aquí la vemos una vez más. Dios decide concederle hijos a Lea, y no es que Raquel fuera privada por alguna razón en específico, simplemente era estéril, así como fue Sara y otras mujeres de la Biblia.

Sin embargo, Dios miro la tristeza de Lea y que mejor que darle el deseo de su corazón para recompensar su sufrimiento y humillaciones.

Sin embargo, Dios miro la tristeza de Lea y que mejor que darle el deseo de su corazón para recompensar su sufrimiento y humillaciones

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Has oído alguna vez una mujer decir... él es así, pero si le doy un hijo quizás cambie.

Bueno en mi opinión esa no es la mejor idea, pues los hijos no se deben usar para cambiar a una pareja, creo que mejor es trabajar en muchas cosas de la relación antes de estar teniendo hijos para obtener un cambio.

Pero en este caso así era que hacían estas mujeres, aquí no había secciones matrimoniales, consejerías, ni retiros espirituales... Aquí todo el mundo lo que quería era tener hijos y bastantes, para que se dijera tu mujer es fructífera y tu eres un hombre dichoso y así se resolvía todo.

Culturalmente esto era lo que una pareja buscaba y más estas personas que se les prometió un pueblo, pues eso mismo hicieron muchos hijos y estos siguieron teniendo hijos hasta llegar a un número extenso de personas eventualmente.

Lea fue clave en todo esto pues tuvo mas hijos, a pesar de que nunca consiguio tener el corazón de su esposo.

La participación de Dios es maravillosa pues nos deja ver que aunque no estaba de acuerdo en las trampas de Labán, ni en como se estaba desarrollando esta parte de la historia, tenemos todos que entender que este tipo de matrimonios o arreglos matrimoniales eran permitidos por la sociedad de ese entonces en ese lugar, pero era obvio que una de las dos partes siempre era afectada, pues el dinero se compartía, la comida, el hogar, los beneficios... pero el corazón no, entonces siempre quedaba una parte sabiendo que nunca podría ser la favorita.

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Un día Con Dios (Sin Editar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora