- Tranquilo Kakarotto -dijo Vegeta acercándose y la toco- ella esta bien... solo se desmayo por su estado. Lamento lo que dije.
- Señor Goku -dijo Dende- no ha comido bien y la verdad es que come más que ustedes dos juntos.
- ¿DE QUE ESTAS HABLANDO DENDE? -dijo Goku-
- Que ella tiene hambre hace rato Satán solamente le dio unas manzanas y unos plátanos y todos los acabo, pero aún tiene hambre.
- SHIN -dijo el anciano sin dejar de ver a Jess- VE POR COMIDA PARA LA PRINCESA RAPIDO.
Kibitoshin fue rápido a preparar y Satán fue con él para poderle ayudar.
- Ven muchacho cerca del árbol donde te dormiste cuando estaba con Gohan -dijo el anciano-
Goku la cargo y la puso ahí y toco su vientre y sintió la calidez de su hija, Vegeta llego junto a él.
- Dice no preocuparte -dijo Vegeta- habla raro...
- Habla así porque es una bebe que no sabe hablar -dijo el anciano- oye muchacho ¿Ella es la mujer con la cual me prometiste una cita?
- ¿Qué NO ELLA NO ES? -grito Goku celoso-
- QUISIERA SABER SI NO PROMETISTE UNA CITA CON MI ESPOSA -dijo Vegeta enojado-
- La verdad... la verdad es que... -dijo Goku nervioso- si lo hice...
Jess comenzó a despertar y vio a Goku a su lado y a Vegeta furioso con él.
- COMO PUDISTE HACERLE ESO A BULMA IDIOTA ES... ES MI ESPOSA -dijo Vegeta-
- ¿Qué... que hiciste qué? -dijo Jess-
- Jess -dijo Goku abrazándola- ¿Te sientes bien?
- SI ACLARAME ALGO ¿Qué HICISTE? -dijo Jess molesta-
- TU FLAMANTE CABALLERO LE PROMETIO A ESTE VEJETE UNA CITA CON MI ESPOSA...
- No solo una cita sino también una foto -dijo el anciano-
- KAKAROTTO -grito Vegeta-
- ALTO -grito Jess- ESCUCHA ANCIANO... yo tendré una cita contigo y te daré una foto... solo contéstame algo...
- JESS NO LO HAGAS -grito Vegeta celoso-
- TE CALLAS TU COMENZASTE CON ESTO AHORA TE AGUANTAS... -grito Jess- ADEMAS ACERCATE...
Goku tenía miedo pensaba que ella le pegaría y al acercar la cara Jess le tomo la cara con ambas manos y lo beso, el correspondió y la abrazo.
- HACE SUS GRACIAS Y LO PREMIAS -dijo Vegeta cruzando los brazos-
- No Vegeta -dijo Jess- lo que pasa es que hace rato no pude... abrazarlo ni besarlo. Pero si tendré una cita con el supremo anciano le guste o no.
- Es mi castigo -dijo Goku abrazando a Jess-
En eso llego el Kibitoshin con Satán y la comida.
- DIOS TODO ESTO ES PARA MI -dijo Jess-
- Por supuesto princesa.
- ¿Shin? ¿Eres tú? ¿Pero qué te paso? -preguntaba Jess-
- Bueno digamos que me mostro como se usaba los arcillos -dijo Goku-
- Gracias me muero de hambre ustedes dos -dijo Jess dirigiéndose a Vegeta y Goku- váyanse de aquí porque de esta comida no tomarán nada.
- OYE -dijo Vegeta-
- QUE ESTA COMIDA ES MIA Y DE NADIE MAS...
- Juro que ahora si eres una sayayin loca -dijo Vegeta-
- DEJA QUE RECUPERE MI ENERGIA Y PAGARAS LO QUE DICES -dijo Jess-
Ellos se alejaron y Jess devoro todo lo que estaba a su paso parecía que no había comido en años. Una vez que sació su hambre el anciano estaba por ahí.
- Ya veo que estas mejor -dijo el anciano-
- Me siento satisfecha gracias -dijo Jess- pero necesito preguntarte algo.
- ¿Dime?
- ¿Qué es ella? -dijo Jess acariciándose el vientre-
- Ella es una joya que esta entre dos mundos -dijo el anciano- no la vas a comprender en sus primeros años de vida.
- ¿Ha habido otro igual?
- Sí en otro planeta -dijo el anciano tocándole el vientre- pero, tu hija es única ya que será sayayin y un ser de luz que entenderá cosas que ustedes jamás comprenderán.
- Tengo miedo -dijo Jess- ella... no es como Reika y Yamira...
- No lo es ella es única y será la adoración de Goku -dijo el anciano- con lo que respecta a nuestra cita alteza considera que esto es nuestra cita.
- Gracias de verdad, pero necesitaba darle una lección a Goku -dijo Jess riendo coqueta-
- Eres admirable alteza -dijo el anciano-
- Sólo llámame Jess.
- ¿Algo más que quieras preguntarme? -dijo el anciano-
- No muchas gracias -dijo Jess-
Se acercaron a donde estaban los demás y Goku la vio con celos.
- ¿Dime te hizo algo? -dijo Goku celoso-
- No me hizo nada Kakarotto, ¿querías que mi hermano tuviera esa angustia? -dijo Jess-
- No... ya le dije que lo sentía -dijo Goku-
- Y TU NI TE RIAS VEGETA -dijo Jess regañándolo-
Entonces, miraron a Kibitoshin estaba angustiado.
- Ahora si -dijo el anciano- explícate de que Majin Boo regreso...
- ¿Cómo que regreso? – pregunto Vegeta-
- Lo que pasa es que cuando Majin Boo ataco por primera vez éramos 5 Kaiosamas, el llego con esa forma como la vieron. Éramos el supremo Kaiosama del norte, del sur, del oeste y yo del este, y el sagrado Kaiosama y yo que en ese entonces era un aprendiz, todos eran tan alegres y vivíamos en paz con los humanos a los cuales solo protegíamos. El kid Boo como lo llamamos después, destruía ciudades y planetas enteros. Majin Boo llego a nuestro planeta sagrado y aunque tratamos todos de detenerlos uno a uno fueron eliminados -dijo Kibitoshin- se unió con el Kaiosama del sur y es como se formo el Majin Boo que vieron que destruyo el templo de Kamisama. Yo... yo era el aprendiz era el más joven de todos y por lo tanto le debo mi supervivencia a una sola persona al sagrado Kaiosama el me defendió y me salvo la vida, se fusiono con Boo y así nació el Majin Boo gordo, se volvió bueno y pacífico, Bibidi lo pudo controlar y creo que lo metió al huevo por eso.
- Maldito Boo -dijo Jess- mis hijos, Trunks y Picoro están muertos por su culpa. Destruyo la tierra.
- Lamento mucho lo que dije hace rato Reika -dijo Vegeta-
- No te preocupes era entendible -dijo Jess- después de todo yo no te sirvo de nada.
- CALLATE NO DIGAS ESTUPIDECES QUIERES -dijo Vegeta-
- Kakarotto agarro a quien más estaba cerca -dijo Jess abrazando a Goku que se sentía mal- amor por favor no te preocupes por favor...
Goku la tomo por la cintura pegándola a su cuerpo y ella se estremeció.
- Mi vida tu siempre me entiendes -dijo Goku- sin embargo, me siento culpable porque mis hijos y el hijo de Vegeta murieron en la explosión.
- No digas nada -dijo Jess y lo beso en los labios tiernamente-
YOU ARE READING
LA ULTIMA SAYAYIN
FanfictionElla penso ser una chica normal solo que su fuerza era descomunal, su madre le dice la verdad. Viaja a buscar su destino. ¿Cual es?