¡Sangre Sucia!.... No me dejes (chicaxchica)

El Poder de Keyla.

Sirius entro a su habitación con una taza de café y miro a su hija. Keyla estaba abrazando una almohada, dormida al lado izquierdo de la cama.

Por alguna razón que Sirius desconocía, Keyla prefería dormir con él desde navidad hasta que fuera hora de ir de nuevo a Hogwarts. Keyla dormía demasiado, lo cual según sus amigos, era muy extraño.

Se enteró que en la escuela, su hija no dormía como debería ni comía como lo hace con la comida de Molly. En resumen, que su alegre y extrovertida hija, era muy diferente en la escuela.

Eso lo llevo a pensar que estaba haciendo algo mal como padre, pero los amigos de Keyla decían que ella era más feliz y tranquila estando con él que con cualquier otra persona.

- Keyla - la llamo desde la puerta pero Keyla ni siquiera se movió - Keyla...

- Estoy dormida - respondió la chica riendo.

- ¿Sigues dormida? Pero si has estado roncando toda la tarde - Habló Sirius sonriendo.

- Keyla está muy cansada y en este momento no puede responder ¿Quiere dejar un mensaje? - Siguió Keyla riendo ligeramente.

- ¿Keyla conoce la mejor forma para despertar a alguien? - pregunto Sirius y atrajo algo con su varita.

- Keyla conoce muchas cosas - Sirius se acercó en silencio hasta su hija - ¿El padre de Keyla sigue ahí?

- ¡Si! - Exclamó Sirius lanzando un balde de agua fría a su hija.

Keyla se levantó de un salto completamente empapada, se miro y miro a su padre que se estaba partiendo de risa.

- ¿Que...- Keyla trato de formular pregunta "¿Por qué hiciste eso" pero la respuesta era muy evidente "porque es Sirius Black". - Si yo muero de hipotermia, tu mueres conmigo.

Keyla se lanzó hacia su padre y lo rodeo con sus brazos rápidamente, logro tomar el balde que aún tenía un poco de agua y lo puso en la cabeza de Sirius.

- ¡Venganza! - Exclamó Keyla riendo, pero Sirius la tomo y la subió en sus hombros antes de empezar a correr - ¿Que haces? - pregunto Keyla riendo nerviosa.

- ¡Venganza! - Grito Sirius de vuelta corriendo por toda casa como un loco con su hija en los hombros. - Te tirare a un lago.

- ¡Ayuda! ¡Remus!

Los chicos bajaron al primer piso al escuchar los gritos de ayuda de Keyla pensando que algo malo había pasado, sin embargo se encontraron con Sirius Black con un balde en la cabeza y Keyla Black sobre su hombros completamente mojada.

Remus y la señora Weasley se asomaron desde la cocina para ver el show de los dueños de la casa. Remus sonreía de lado tratando no soltar una gran carcajada. Molly sonría con ternura, sin embargo, no era para eso que Sirius debía despertar a Keyla.

- Sirius - Habló Molly aclarando su garganta - ¿Recuerdas que...

- Si, Molly, lo siento - Sirius levantó el balde para poder mirar a la mujer y giro su cabeza hacia su hija - Keyla, es hora de ir a Hogwarts.

Keyla borró su sonrisa y su cara cambio por completo. Sirius la ayudo a bajar y se quitó el balde por completo.

- Pero yo no quiero volver a Hogwarts - Habló Keyla seriamente.

- Keyla, es necesario que vayas - empezó a hablar Remus.

- ¡No! Sé todo lo que puedan enseñarme, sé más de lo que enseñan en la escuela. - Aseguro Keyla - Yo misma soy maestra, Legeremancia... Lo sé desde los nueve años, sé cosas del ministerio desde que tengo memoria, pregúntenle a Snape, soy la mejor de su clase.