La dura vida de Cassandra Lupin.

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- ¡Mamá, ya llegué...

El muchacho se quedó viendo a la chica de vestido negro con una cicatriz en su cara y un tatuaje en el brazo que dormía sobre el sofá.

- Y recogiste a una vagabunda - Termino al ver lo sucia que estaba.

La mujer volvió a la sala con una taza de té en sus manos y una linda sonrisa.

- No es una vagabunda, pero es una chica que huyo de su casa y necesita ayuda - Aclaro la mujer sentandose junto a ella. - Además, estaba llorando en el cementerio cuando la encontré, no imagino todo lo que debía pasar.

- En resumen... Es una loca - Resumió el chico. - ¿En un cementerio? Y si estaba haciendo algo satánico o algo así.

- Ella no cree en eso, creo que es Atea - Habló la mujer y su hijo rodo los ojos. - Odette, despierta.

Keyla se quejó y abrió los ojos lentamente. Miro extrañada que no se encontraba en ninguna cama conocida y que la voz de la mujer no la había escuchado antes. Se fijó en que estaba en un sofá y que aún tenía la maldita marca en su brazo.

- Entonces no fue una pesadilla... - Murmuro y miro a la mujer.

- ¿Hace cuanto no dormías? - Pregunto la mujer tendiendole la taza. Keyla se acomodo mejor en el sofá para poder beber.

- Supongo que más de veinticuatro horas... No suelo dormir mucho tampoco. Mis horarios de sueño varían según cuánta tarea tenga - Rio Keyla pero la mujer abrió los ojos sorprendida.

- No sabía que estudiabas. No te ofendas, pero no das esa impresión.

- Lo sé - Acepto Keyla. Ella misma se sentía como una vagabunda en ese momento. - Es difícil dar la impresión de que estudió cuando me vio en medio de un cementerio golpeada y maltratada.

- Supongo que no quieres hablar de eso con una desconocida.

- No hablo de esto ni con mis amigos - Reconoció Keyla. - Debe disculparme, tuve el atrevimiento de dormir en su sofá y ni siquiera pregunté su nombre cuando debía.

- Soy Carrie.

- ¿Cómo la del libro? - Pregunto haciéndola reír.

- No, pero a mi hijo le fascina la película - Keyla la miro mientras trataba de recordar el término "película". - ¿Sabes lo que es una película? - pregunto la mujer al verla confundida.

- Si, si... A mí me gusta... Cenicienta y.. Simba - Respondió Keyla con las únicas películas qué recordaba haber visto en casa de Hermione.

- Eso es muy tierno, Odette...

- ¡Cassie! - Corrigió Keyla tratando de ocultar su verdadero nombre. - Bueno, Cassandra, pero prefiero que me digan Cassie. Odette tampoco me gusta tanto.

- Bien, Cassie, será mejor que tomes una ducha y después te ayudo con la venda - Carrie señaló el brazo de Keyla, el lugar en donde Bellatrix la había rajado con la daga estaba cubierto con un vendaje.

- No es necesario, de hecho creo que sería mejor irme... Mmm al caldero chorreante, después irán por mi.

- ¿Caldero chorreante? Supongo que jamás oi de él - Habló la mujer tranquilamente.

- Es un lugar nuevo, no he ido pero un amigo se quedó allí un tiempo y dijo que era bueno - Respondió rápidamente Keyla con su cabeza apunto de explotar sobre lo que es Muggle y lo que no.

- ¿No sabrás él número de tu amigo?

- ¿De Harry? ... El idiota no me lo ha dicho - Murmuro Keyla sintiéndose ofendida. - Pero creo que es el treinta y uno de Ju...

¡Sangre Sucia!.... No me dejes (chicaxchica)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora