La inestable familia Gaunt.

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Keyla Black, no era Keyla Black.

Debían preparar la poción de Muertos en Vida y quién mejor la hiciera se llevaría un pequeña botella de Félix Felicis.

Antes, Keyla hubiera Sido la primera en terminar y con gran ventaja de tiempo además de tener una poción perfecta, siguiendo la receta y sin ninguna distracción.

Ahora, Keyla solo saltaba de lado a lado, leyendo el libro sin haber empezado ni con la base de la poción. Podían verla haciendo muecas hacia el libro o mirando las pociones de los demás.

Snape ya la habría castigado por andar distraida, pero Slughorn pensaba que era algún ritual para la adolescente. Obviamente, Slughorn no conoce a Keyla tanto como Snape.

- Keyla, deberías empezar ya para que tengas el tiempo suficiente para hacerla - Habló Hermione quien ya iba bastante adelantada comparada con ella.

Keyla no le prestó atención a sus palabras, más bien se fijó en el cabello espeso de Hermione y como a veces cubría sus ojos. Dejo el libro y el caldero de lado para pararse detrás de Hermione.

- ¿Que haces? - Pregunto Hermione cuando sintió los dedos de Keyla en su cabeza.

- Puedes arruinar la poción si algún cabello cae, o podrías cortarte por no ver bien. - Habló Keyla mientras con ayuda de su varita un lazo dorado iba envolviendo la coleta que ella hacía. - Debes cuidar siempre tu cabello.

- Ya me lo habías dicho - Murmuro Hermione con una sonrisa.

- Quisiera recordarlo - Murmuro Keyla y termino con el cabello. Se quedó congelada unos segundos mirando el cuello de Hermione, no pudo evitarlo y lo acaricio de forma delicada.

- Estás tibia.

- Y tu muy fría - Keyla reacciono y se alejo de ella con una sonrisa nerviosa. - Será mejor que empiece.

Hermione se distrajo de su poción por mirar a Keyla, y se enorgulleció de haberla puesto nerviosa. Está Keyla parecía mucho más inocente que su novia, pero aún tenía esa iniciativa que la enamoro el primer día.

Keyla empezó a cortar algunas cosas mientras que su cabello se ordenaba solo. Después de un rato, Slughorn se acercó a ella mirando extrañado lo que hacía.

- Disculpa mi interrupción, querida ¿Que estás haciendo? - Keyla sonrió en dirección al maestro y siguió exprimiendo unos granos de sopóforo con un cuchillo - Debes cortarlos.

- Estoy experimentando - Respondió Keyla dejando el jugo en la poción - Empecé un poco tarde y necesitaba ganar tiempo. Mírela

Slughorn se acercó al caldero y se sorprendió al ver que la poción lucía perfecta. Keyla sonrió orgullosa y siguió con sus experimentos.

- Es extraño ver a una Slytherin improvisando, pero se ve asombroso, Keyla.

- Gracias, la verdad no recuerdo porque estoy en Slytherin pero eso no tiene que definir mi forma de trabajo - Dijo Keyla removiendo con una cuchara de palo. Aparto su mano un poco pues sintió como el humo la quemaba.

- Sigue así y este amiguito puede ser tuyo - Sonrió Slughorn mostrando la pequeña poción. Keyla asintio como pudo, ya que tuvo otro rápido recuerdo de estar preparando y hacer algo muy parecido.

Solo que estaba con Snape.

Volvió a perder tiempo por tratar de recordar que poción necesitaba ser hecha solo por un maestro y una estudiante, tal vez era una muy difícil que necesitaba una sesión privada.

El tiempo se acabó, y aunque Slughorn dejo en claro que si hubiera dejado unos minutos mas de tiempo la poción de Keyla sería perfecta, fue Harry quien ganó la pequeña botella de suerte líquida.

¡Sangre Sucia!.... No me dejes (chicaxchica)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora